Por las memorias de Fernando Alvarez Bogaert  

Las personas que fueron actores directos de acontecimientos históricos que incidieron en las vidas de las personas y del país deben contar sus memorias, los hechos y resultados para las presentes y futuras generaciones.

Como dice el Dr. Kierkegaard: “la vida debe ser vivida mirando hacia adelante, pero sólo puede ser entendida mirando hacia atrás”.

Usted, Don Fernando, desde el 1966 al 1982 se mantuvo activo con el presidente Balaguer, el Partido Reformista del que fue ministro y participó en cada proceso político-social durante décadas; además, su condición de economista le permite contextualizar los daños colaterales, el comportamiento social, la personalidad y las patologías de las políticas posguerra fría y postrujillismo.

El Dr. Víctor Gómez Bergés escribió: Balaguer y yo: la historia tomo I y II para contar sus memorias al lado de Balaguer, al igual hizo Font Bernard, Aliro Paulino y otros que intentaron conocer al Dr. Balaguer.

Sé que usted y parte de su generación fueron víctimas del Dr. Balaguer, donde se les impidió aspirar, les limitó su carrera política, les puso piedras en el camino, los torturó psicológicamente, les impuso el terror, la división, el miedo y la exclusión para que no lleguen nunca. Recuerde a Augusto Lora, Goico Morales, Víctor Gómez Bergés, Jacinto Peynado, etc.

Bogart, el dolor es inevitable, pero el sufrimiento es opcional. Todos los seres humanos han vivido adversidades, crisis y circunstancias difíciles, pero continúan fortaleciendo el espíritu.

Escribir, publicar, dialogar, contar las historias y evocar de la memoria todas las huellas somáticas y emocionales, permiten que nunca se queden como traumas o como experiencias traumáticas no resueltas.

Don Fernando, escriba, la política y las circunstancias han cambiado; aquel coronel de la FAD que le secuestro y torturó en un avión y le puso la pistola en la cabeza y le decía “cualquiera te tira al mar” ya no está; pero usted dentro de su ira y su rabia pudo contestarle  “solo le renuncio a Balaguer”, después lo tuvieron bajo arresto hasta que renunciara a la vicepresidencia que había ganado en una asamblea en el Partido Reformista.

Lo pusieron a renunciar, pero como son las circunstancias dos semanas después perdieron las elecciones de 1978, donde el Dr. Balaguer les dijo a los reformistas dando manotazo y con su voz firme y a puro pulmón como buen orador: “no llorar como mujer lo que no supieron defender como hombre” recordando la leyenda del Rey Baabdel de Granada.

Pienso que Balaguer nunca le perdonó que siendo ministro de Agricultura 1966 apoyara usted a Francisco Lora, o que fuera independiente en sus decisiones o comentarios económicos, o que se atreviera en dos ocasiones a desafiarlo en una asamblea dentro de su propio partido.

Sin embargo, en 1978 y 1982, las dos veces que aspiró a vicepresidente, y el Dr. Balaguer le negó o le hizo renunciar; cosas del destino, las dos veces Balaguer perdió las elecciones.

Las acumulaciones de las actitudes emocionales negativas, los conflictos, los chismes y las intrigas de la patología política, le dividieron del poder; los militares, la oposición, y las conductas pasivo-agresivo produjeron la frase: “si toca esa tecla te hunde, te hunde”.