OPINION: Impuestos y eficiencia

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EL AUTOR es administrador financiero, contralor general de la República. Reside en Santo Domingo.

Es casi un tema de sobre mesa recurrente el relativo a una nueva reforma fiscal que abarque los gastos y los ingresos tributarios de forma holística.

Son muchas las opiniones encontradas sobre el asunto pues cada vez que se habla de reformar los gastos, pero principalmente los ingresos es motivo de muchas tertulias pues el tema a veces resulta espinoso pues de hablar de tributación es referirse a extraerle más dinero de los exiguos ingresos percibidos por el pueblo trabajador.

Más aún cuando se trata de una tributación regresiva cuando el que gana menos paga más impuestos que el engrosa con más dinero sus bolsillos, no así cuando es progresiva que paga más impuestos que el que más gana como debe ser.

Cuando se explica a la población de forma pormenorizada o se socializa en detalles todo cuanto el gobierno debe de hacer con más dinero recaudado por impuestos y estos son razonablemente justificados.

Entonces el pueblo puede aceptarlo conforme y más aún cuando esos recursos se aplicarán de forma inteligente y racional en obras de bien común, así como cuando se rinden cuentas a los organismos de fiscalización interna (Contraloría General de la República), externa (Cámara de Cuentas y el Congreso Nacional) y por supuesto al pueblo dominicano de forma transparente, fiable y oportuna.

Cuando un país crece y se desarrolla necesita de más ingresos, es decir, de un aumento de la presión fiscal respecto al Producto Interno Bruto (PIB), en otras palabras, quiere decir que se requiere de más recursos financieros para cubrir las necesidades insatisfechas de toda una nación.

De igual manera, sucede cuando una familia crece y los bienes y servicios aumentan de precios, entonces, se requiere que los miembros de esa familia procuren ingresar más dinero al hogar.

Ahora bien, también hay que observar: en qué se gasta, cuándo se gasta y cómo se gastan los ingresos, porque como se sabe, el problema no son los ingresos, sino los gastos, es decir, que depende mucho del estilo de vida de un país y de una familia.

Los impuestos afectan tanto la eficiencia como la distribución de la renta. En los últimos años, la repercusión en la eficiencia se ha convertido en la principal preocupación de la política impositiva, al estudiar los economistas y los responsables de la política económica la influencia de los incentivos en la conducta de los individuos, de las empresas y de una nación.

La política impositiva, se refiere principalmente a la manera en que responden los individuos a la cuantía de los tipos impositivos marginales.

La influencia de los tipos impositivos en el número de horas trabajadas no está clara debido a que el efecto-renta y el efecto-sustitución de las variaciones de los salarios son de signos contrarios.

Cuando los impuestos son progresivos, algunas personas prefieren disfrutar de una mayor cantidad de ocio en vez de trabajar más. Otras pueden trabajar más para conseguir el dinero que desean.

Los impuestos influyen considerablemente en la actividad económica, esto así porque los tipos impositivos afectan las decisiones de ahorro e inversión de los individuos.

Cuando los impuestos son altos en un sector, los recursos pueden desviarse hacia áreas de menos impuestos.

Por ejemplo, en vez de invertir en acciones comunes de una empresa que son afectadas por una doble tributación lo hacen preferiblemente en bienes raíces o en bonos exentos de impuestos o invertir en viviendas o propiedades financiadas con préstamos hipotecarios cuyos intereses son deducibles.

De manera que unos elevados tipos marginales pueden desviar simplemente la actividad económica hacia los sectores que pagan pocos impuestos.

Es importante que cuando se implante un nuevo régimen impositivo es recomendado que se haga de manera sorpresiva a los fines de que se evite el desvío de ahorro e inversión a los sectores de menores impuestos y alterar la cronología de los flujos de renta.

Es común la repatriación de inversiones locales a los famosos paraísos fiscales cuando se anuncia con bombos y platillos el cobro de más impuestos.

Hay que tener prudencia y evitar imponer impuestos muy altos que se pueden considerar injustos lo que podría abonar un ambiente convulso que propiciaría la desestabilización de una gestión de gobierno.

Es por ello la importancia de sopesar con mucha claridad la difícil elección que hay que hacer entre la eficiencia y la equidad al elaborar la política económica (Samuelson, 1996).

La teoría moderna de los impuestos eficientes analiza el modo en que el Estado puede recaudar los impuestos necesarios de la forma más eficiente, es decir, con la menor pérdida de excedente del consumidor.

Los impuestos de Ramsey plantean que deben gravarse más los factores y los productos cuya oferta o demanda sean más inelásticas respecto al precio ya que si una mercancía tiene una oferta o una demanda muy inelástica, la  aplicación de un impuesto sobre esa mercancía apenas influirá en el consumo y en la producción no así cuando se gravan aquellos que son elásticos en relación al precio, estos deben gravarse con menos impuestos.

Sin lugar a dudas la nación dominicana necesita con urgencia una presión tributaria de más de un 14% respecto al PIB, por lo menos de un 18% para poder solventar el incremento de las necesidades de la población que todos los días demanda de más y mejores bienes y servicios.

Se sabe que la próxima reforma fiscal debe ser integral mediante la cual se analicen los gastos y se estimen más, mejores, equitativos y justos impuestos pero que estos sean de menores tipos impositivos y si es necesario ampliar la base que esta no abarque la canasta del primer quintil o canasta de menores gastos en bienes y servicios.

Afortunadamente, la República dominicana puede pavonearse al poder decir que se gasta hoy en día un gobierno como el del presidente Luis Rodolfo Abinader Corona: honrado, transparente, trabajador, humilde y que el mínimo centavo la población sabe que se gasta en lo que se debe gastar sin opulencia, si vanidad y con un sentido de la frugalidad o estilo de gobernar económico admirable.

De manera pues, que las autoridades actuales disponen ya de un momento envidiable para concertar una excelente reforma fiscal integral para ser aplicada el próximo año 2022 y que de seguro la población ha de apoyar por el crecimiento y desarrollo económico y social de la República Dominicana, en razón de la confianza que el pueblo ha depositado en el actual gobierno.

felix.felixsantana.santanagarc@gmail.com

JPM

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Dr: E Rodríguez
Dr: E Rodríguez
2 Años hace

Mientras no se rompa con la burocracia que mantiene la industria de los empleos en el País ningún Gobierno podrá quitar las exenciones de impuestos a la industria Dominicana. En los Estados Unidos existe el pago por desempleo y ya, aquí no, usted invierte un millón de pesos y a los 4 meses ese dinero es de sus empleados porque hay que pagar, vacaciones, preaviso, sesantia, bonificación, maternidad, etc, etc. El trabajo se convierte en vagancia.

julio cesar
julio cesar
2 Años hace

Caballero, lo que sucede es que todo en teoria se ve muy bien pero la vaina es la practica.En una parte de su escrito usted dice que el que gane mas es el que mas impuesto debe de pagar no asi el que gane meno,ok esto se ve medio jjusto,pero resulta que si yo tengo una empresa con mas de 2500 empleados yo estoy colaborando con la economia del pais,y a la misma ves con el empleo de esa nacion.

julio cesar
julio cesar
Responder a  julio cesar
2 Años hace

2.Entonces si me aumentan los impuestos porque aparentemente soy rico pues lo que yo haria es bajar la nomina de 2500 a 2200 empleados.Hay otros empresarios que lo que hacen es aumentar los precios de sus trabajos y asi sucesivamente si se aumentan los precios de los trabajos pues el que lo compra tambien aumentaria su precio para venderlo,y entonces,a donde cae el aumento de ese articulo?. cae en los mas necesitados.Yo entiendo que una vuelta se le tiene que buscar al asunto,pero porque usted no dice que mejor se quite el barrilito,las exoneraciones de vehiculos a los di****dos y… Leer mas »

julio cesar
julio cesar
Responder a  julio cesar
2 Años hace

3.Porque usted no dice que se bajen los sueldo a cada funcionario que no sean mas de 150,000 pesos mensuales,y se haga una revicion DEL SUELDASO QUE GANA EL PRESIDENTE DEL BANCO CENTRAL,SUPERINTENDENCIA S DE BANCOS, Y OTROS DEPARTAMENTOS.El problema es que el gobierno tiene muchos gastos en sueldos y tiene que buscar todos esos miles de millones mensuales para cubrir esas nominas.

julio cesar
julio cesar
Responder a  julio cesar
2 Años hace

4.Al aumentarle los impuestos a los que mas ganan eso afecta a todo el mundo, ya yo lo explique mas arriba.UNA VEZ MAS EL CASO ES QUE EL GOBIERNO EN SU REFORMA A LA CONSTITUCION TIENE QUE QUITAR EL BARRILITO Y TODOS ESOS BENEFICIOS QUE TIENE LAS SANGUIJUELAS DEL CONGRESO.TAMBIEN REFORMAR LOS SALARIOS,QUE CADA FUNCIONARIO TENGA UN SALARIO FIJO Y QUE SI POR EJEMPLO TIENE QUE VIAJAR,PUES YA AHI SE LE HACE UN AJUSTE Y SE LE CONDECE LA PARTE QUE VAS A GASTAR.PORQUE LOS FUNCIONARIOS TIENEN QUE MANEJAR YIPETONES?EL GOBIERNO PUEDE HACER UN ARREGLO CON LA FORD PARA QUE… Leer mas »

julio cesar
julio cesar
Responder a  julio cesar
2 Años hace

5.Se puede arreglar los gastos es verdad,pero no se debe sacrificar ni a los mas ricos ni lo mas pobres cuando el gobierno tiene una nomina d miles de millones de peSos mensuales en gastos a un grupo de SANGUIJUELAS que no les importa cobrar has 2 millones de pesos mensuales en sueldos,ESO ES UN ABUSO,ESO NO ES MAS QUE UN VERDADERO ABUSO Y EL GOBIERNO TIENE LAS HERRAMIENTAS PARA PODER FRENAR TODO ESO.

julio cesar
julio cesar
Responder a  julio cesar
2 Años hace

6.PERO FIJESE,NINGUN PARTIDO POLITICO A DICHO QUE EN LA REFORMA SE QUITEN TODOS ESOS BENEFICIOS A LOS FUNCIONARIOS DI****DOS Y SENADORES.