OPINION: El salario de los jugadores de Ligas Menores

En los últimos artículos he tratado el tema de los jugadores criollos que firmaron por poco dinero y algunos que llegaron a la cúspide, también sobre los descuentos impositivos en las Mayores y ahora abordaré el tema del salario de los jugadores de Ligas Menores.

Para los que piensan en  hacer carrera beisbolística, y para quienes andan como agujas detrás de los jugadores estelares que accionan en el invierno, sepan que fuera de las Grandes Ligas, Japón o Corea, estos muchachos solo consiguen dinero para sobrevivir.

Comencemos con la Liga Mexicana de Béisbol (LMB). En México para este año el tope salarial será de unos 150 mil pesos mexicanos mensuales para los jugadores nativos (casi 8 mil dolares al mes). Los importados están en rango por temporadas. Comienzan ganado unos 6, 500 dolares, puede subir hasta 8 mil. Llama la atención que antes el tope era 10 mil dolares. En México, a diferencia de USA no se paga  impuestos federales ni estatales.

Lo interesante del béisbol Mexicano, similar a las Ligas Invernales, es que esos 8,000 dolares pueden subir hasta 12 mil o 14 mil dolares mensuales con incentivos no establecidos en contrato. Tengo entendido que la LMB se maneja con mucho hermetismo  cuando se trata de dinero y presentar sumas al público.

En las Ligas independientes de Estados Unidos solo se vive del sustento y del sueño de volver al béisbol organizado. Los peloteros no saben hacer otra cosa que jugar béisbol, se van a esas ligas a pasar todo el trabajo del mundo, en busca de volver a las Mayores como lo hizo Scott Kazmir quien lanzó invierno con el Escogido en el 2011, estuvo todo el 2012 en Liga Independiente y a final del 2015 consiguió 48 millones por 3 años con los Dodgers.

La Liga del Atlántico, la más ¨prestigiosa¨ de las Ligas Independientes, tiene un salario que puede alcanzar los 3,000 dolares mensuales,  en la Frontier Legue el tope está por los 1,500 dolares al mes, salario que apenas da  para sobrevivir. Rubén Sosa, el MVP del torneo LIDOM pasado tenía un pago de unos 2,200 dolares mensuales. Chimbala, como todo el que produce dinero en USA, debió pagar sus impuestos, obviamente deducibles de su salario.

Cuando se ha jugado Grandes Ligas, o se está protegido en un equipo de Liga Grande, de acuerdo al estatus del jugador se perciben unos salarios bastante decentes. Desde el primer año de protegido en roster de 40 se alcanzan los 45 mil dolares por temporada.

El segundo año perciben sobre los 80 mil. Los veteranos y con experiencia de Liga Grande pueden conseguir salarios anuales  de hasta 120 mil dolares, esos contratos que incluyen invitación a Entrenamientos de Primavera, obviamente con muy pocas posibilidades para ese tipo de pelotero de hacer el equipo grande (unos 24 mil dolares mensuales, eso los jugadores de primer nivel).

Hasta ahí el negocio no se ve tan mal, sin embargo desde la Summer League hasta la Clase A los sueldos mensuales van desde unos 700 dolares hasta unos 1, 700 dolares al mes. Por eso es que tienen que juntarse varios peloteros para rentar un apartamento, comprar comida y hasta un vehículo común para moverse en las ciudades donde juegan béisbol. Los Rookie van a vivir a casas de familia, no por gusto, sino que lo que se gana no alcanza para vivir. A algunos jugadores en Liga Novatos se les envía dinero desde RD.

En Doble A se puede llegar a los 1,700 dolares mensuales y en Triple A, si no se está protegido, se alcanzan los 2,700 dolares por mes. El que no está protegido en roster de 40 o tiene experiencia de Grandes Ligas y no logró un bono millonario, ve el invierno como su salvación, pues al menos en Dominicana se ganan buenos salarios, sin cargas impositivas.

Los jugadores  de las Menores no tienen liquidación ni pensión y muchos viven de la limosna cuando esas carreras llegan a su fin. Alrededor de un 2 % de los dominicanos firmados alcanzan las Grandes Ligas y una pensión para la vejez.

Se ve hermoso llegar a las Mayores, ganar todo el dinero del mundo, aun con los descuentos impositivos, sin embargo los Ligas Menores tienen que guayar la yuca,  ganar poco dinero, en una carrera que no te garantiza pensión  y que te saca de competencia con un simple resbalón o una metida de pata.

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