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A votar por Fernando Aquino
Si bien es cierto que la comunidad dominicana es una de las más grandes y numerosas de la ciudad de Nueva York, en términos de aportes, iniciativas emprendedoras y actividades comunales, eso no se ha traducido en poder político y en mayor representatividad de los intereses de nuestros connacionales.
Y no ha sido así producto de que nos ha faltado un liderazgo social más responsable, pujante y dinámico que sintetice nuestras aspiraciones y promueva intereses más afines a nuestra comunidad.
En este sentido, no hemos sabido convertir el peso que tenemos en la ciudad en participación activa en las tomas de decisiones relativas a los asuntos que nos conciernen y nos tocan directamente. De ahí la necesidad de pasar de actores pasivos (que se conforman con lo que hay y con lo que le ofrece el statu quo) a actores activos que asumen su rol y compromiso para mejorar su situación y obtener mayores conquistas ciudadanas.
No hemos sido capaces de colocarnos a las alturas de nuestras circunstancias, nos hemos mantenido en una inercia social propiciada por un espíritu de indiferencia y apatía frente a nuestras necesidades vitales y problemas que más nos inquietan.
En pocas palabras, no hemos sido conscientes de nuestra propia fuerza y de nuestra propia importancia para convertirlas en un capital político y social que contribuya al bienestar general de la comunidad dominicana.
Para cambiar esa situación, debemos empoderarnos de nuestro destino, distinguiendo siempre que el empoderamiento no se da por el mayor número de miembros que tenga una comunidad sino por la calidad y representación que se tenga en las posiciones de mando y decisiones.
Hacia esto último es que debemos dirigir nuestros esfuerzos de empoderamiento para lograr que nuestros representantes nos representen de verdad y no que representen asuntos ajenos a los intereses de la comunidad. Esta representación de calidad por la que abogamos, significa que nuestros líderes deben ser personas comprometidas a servirnos con alma, corazón y vida, y que ello se refleje en resultados concretos y palpables en mejorías para la colectividad dominicana que reside aquí.
Ejemplo de esto último, es Fernando Aquino, un líder natural de los dominicanos de la diáspora, cuya vida y trayectoria nos honra, por lo cual merece ser considerado como representante de nuestra comunidad. Y tiene la calidad para ello: moral, intelectual y profesional.
Echemos un vistazo a sus condiciones y cualidades que lo avalan: Fernando Aquino reside en la ciudad de Nueva York desde 1991, por lo que conoce a fondo los problemas y necesidades que más nos desvelan.
Como profesional de la comunicación, reportero y columnista de importantes medios neoyorkinos, ha puesto en la agenda social de la ciudad los anhelos y esperanzas de los dominicanos, siempre al servicio de sus mejores causas.
Fernando Aquino ha sido secretario de Prensa y portavoz de la Conferencia Demócrata del Senado Estatal de Nueva York; director de Desarrollo de Mercado de los Mets de Nueva York; portavoz y secretario de Prensa de la Fiscalía General del Estado de Nueva York.
Fernando Aquino ha sido objeto de decenas de reconocimientos, dentro de los que podemos citar, la Asociación Nacional de Periodistas Hispanos de los Estados Unidos (NAHJ), incluidos los primeros lugares en Reportajes Políticos del 2000 y el 2003, cuando laboraba para el diario La Prensa, la Asamblea del Estado de Nueva York, el Concejo Municipal y prestigiosas organizaciones cívicas y comunitarias, incluyendo el Colegio Dominicano de Periodistas.
Además de su rectilínea trayectoria, Fernando Aquino se graduó Magna Cum Laude en Ciencias Políticas, egresado de la Universidad de City College, Ciencias Políticas del CUNY Graduate Center (Centro de Postgrado de City University of New York –CUNY-) y es Candidato a Doctorado en Ciencias Políticas.
En la actualidad, es profesor adjunto de Lehman College y John Jay College of Criminal Justice.
Viendo a Aquino en todo este contexto de preparación y calidad humana, lo más consecuente es que los dominicanos hagamos nuestra su candidatura para representar el Distrito 14 del Concejo Municipal de la ciudad de Nueva York, que cubre los vecindarios de Morris Heights, Fordham, Kingsbridge y University Heights, en el Bronx.
En este sentido, el poder contar con Fernando Aquino como uno de nuestros representantes en los organismos del poder político, significa que tendremos una voz alta que se escuchará más fuerte, y no solo eso, sino que se esforzará para que nuestras demandas sean atendidas y respondidas positivamente.
Unas preguntas que debemos de hacernos para saber si los que están nos representan bien y responden a la calidad de la representación que requerimos es: ¿Hasta qué punto nuestros intereses son adecuadamente servidos? ¿Hasta qué punto sentimos que participamos a través de ellos en las decisiones que nos atañen? ¿Hasta qué punto nuestros problemas e inquietudes más prioritarios son tomados en cuenta y solucionados? ¿Hasta qué punto han logrado que nuestra colectividad sea mejor valorada? ¿Hemos logrado a través de ellos políticas más inclusivas de parte de las autoridades con relación al tamaño y a la calidad de nuestra comunidad?
Dependiendo de cómo respondan a estas interrogantes sabremos si podemos tener confianza en quienes dicen que nos representan. Y Fernando Aquino se la ha ganado para representarnos. ¡A votar por Fernando Aquino en las primarias del Partido Demócratas!
JPM
Fernando reúne todas esas cualidades, pero… mi candidata es Yudelka Tapia, una mujer Dominicana con una gran trayectoria dentro de la comunidad Dominicana.
To’el mundo en apoyo Fernando. Ese es mi gallo.
Una persona que no honra a sus padres, no es digno de ocupar un na posición política en un partido tan solidario.