Importaciones de vehículos nuevos y estropeados arruinará la paz pública
Las avenidas, calles y autopistas más transitadas de la capital y las provincias más pujantes de la República Dominicana están repletas de agencias de venta de vehículos nuevos y usados. La 27 de febrero parece que ocupa la supremacía en exhibición de automóviles, que se observan sonrientes en cada mirada.
Marquesinas de residencias de clases alta y media se apretujan con dos y tres carros, y todo jovencito que echa un pedazo de barriga de inmediato aspira a comprar una nave terrestre, por necesidad, pedantería o para adquirir categoría social.
En el 2011, el parque vehicular de nuestro país era de 2 millones 700 unidades, lo que significaba un automóvil por cada 3.4 habitantes, o sea, que demasiadas personas estaban montadas. En el 2022 había 5 millones 463 mil 996 vehículos, de los cuales 2 millones 874 mil 590 eran motocicletas. En el índice de motorización de América Latina, la República Dominicana escala el segundo lugar, superado apenas por Brasil.
Los automotores de ruedas (carros, jeeps, motocicletas, camionetas, autobuses, todoterrenos, volteos, máquinas pesadas, ambulancias, camiones, entre ellos de bomberos) atraen como las abejas a la miel, acomodando a sus propietarios como si moraran en las ciudades comerciales de la época dorada de Roma o el “Siglo de los Santos” (27 a. C-235 d.C).
La mayoría de esos aparatos (el 70%) son de segunda mano y una parte está destartalada, lo que quiere decir que contaminan el medio ambiente. Una proporción tiene motores de seis y ocho cilindros, que gastan torrentes de carburantes.
El uso del gas natural, los autos híbridos y eléctricos ni la triplicación de los agentes de la Dirección General de Seguridad de Tránsito y Transporte Terrestre (Digesett) ayudan, pero sus sombreros no garantizan el descongestionamiento del tráfico vial. La clave está en no seguir siendo un almacén de desechos de Japón, Estados Unidos, Alemania, Corea del Sur, China y otras naciones.
Pero, en un símil con el soplo de los vientos de guerra, tantos vehículos no caben, definitivamente, en las calles, avenidas y autopistas. No sólo representan pérdidas de tiempo y el consumo de hidrocarburos, sino que, con los embotellamientos, están retorciendo las tripas, hinchando los tuétanos y haciendo caer los pelos de conductores y acompañantes, en episodios cotidianos que emocionalmente dejan a muchas personas hechas un botijo.
Estos soplamocos temporalmente vienen de lejos, resultante de la irresponsabilidad y el populismo. Desafortunadamente, hemos llegado al climax: las calzadas no tienen más capacidad de recepción, y ahí radican los tapones. Esta apreciación se puede comprobar con el desahogo de las vías públicas los días feriados, así como en los países donde se ha dispuesto que los de placas pares circulen un día y los impares en la fecha siguiente.
La lógica plantea la imperiosidad de prohibir, por un largo tiempo, la importación de automóviles nuevos y usados, estos denominados carabelitas, y especialmente los de alto cilindraje, y cumplir estrictamente la Ley 12-01, que justamente proscribe la importación de los de más de 5 años de fabricación.
Terminantemente, la saturación y la urgencia de la racionalización harán volar a otra estación el tiempo para que no abunden los todoterrenos, las jeepetas de lujo, Lamborghini Urus, Maserati, McLaren, Land Rover, Mercedes Benz clase G, Lexus, Porsches Cayenne, Bentley y otros rodantes con los que se burlan las calles llenas de hoyos, a los cercanos y otros ciudadanos.
En su reemplazo conviene que el gobierno traiga más autobuses nuevos para el transporte colectivo, y acelere la construcción de otras líneas del Metro, el Teleférico y el Monorriel. Otra alternativa sería sacar de circulación los carros muy viejos y poner los horarios laborales públicos/privados y escolares entre 7 de la mañana y 3 de la tarde, y desde las 9 de la mañana hasta las 5 de la tarde.
Con estas obras se evita que prosigamos sintiendo arder la sangre al lucero del alba, mirando estrellas con espinas en los tapones y mordiendo el cordel que genera calambres provenientes de las alfombras de los automóviles; ellas representan un ahorro de divisas en la compra de petróleo y una reducción de la contaminación ambiental. Cierto.
Ahora, los buenos amigos dealers y los también muy cercanos amigos concesionarios sacudidos se preguntarán: ¿dejar de cobrar impuestos en Aduanas y la DGII?, y ¿perder empleos por el cierre de nuestros negocios? La paz ciudadana y el bien colectivo para la mejoría de la calidad de vida de la mayoría están por encima de las utilidades privadas o particulares, así como de las amistades. ¿Estamos?
El exceso de vehículos se ha convertido en agua de cerrajas, y en un fenómeno duro de pelar. En esa cazuela, ¿estamos en un callejón aparentemente sin salida? El presidente Luis Rodolfo Abinader Corona nos ha impactado con su equilibrio, serenidad e inteligencia para afrontar los álgidos impasses/apuros que han sobrevenido en su gestión gubernamental. Este sería otro.
Estando a pocos metros del jefe de Estado, en el salón Las Cariátides del Palacio Nacional, oí diáfanamente sus palabras sobre esta problemática. Refirió en La Semanal del lunes 4 de marzo de 2024 que cuando lee o escucha que en “esta feria de vehículos rompimos récord” en venta “yo no sé si alegrarme, reírme o llorar”. Interpretamos que está consciente de que ya no caben más vehículos, y sutilmente dejó entrever que se trata de una calamidad con derivación funesta para el medio ambiente y la economía nacional.
Más que un barrunto, estamos seguros que la continuación de las importaciones de vehículos nuevos y estropeados arruinará la paz pública: llegará el momentum en que, por los atascos, los de cuatro ruedas no podrán dar hacia adelante, y tampoco hacia atrás…
jpm-am
que el señor renuncie a su vehí****(s) y opte por el excelente servicio que tenemos en república dominicana es muy bueno hacer soluciones por artí****s periodísticos y desde una cómoda jeepeta .
seÑor presidente, prÉstele atenciÓn a esto de la importaciÓn de vehÍ****s, resolvamos ya con los que tenemos, a convertirlos a elÉctricos e instale paneles solares que estÁn baratÍsimos en los lugares publicos y ahÍ tendremos el combustible, casi gratis.
soluciÓn presente con visiÓn al fututo prohibir importar mÁs vehi****s, los actuales irlos convertirlos a elÉctricos o gas natural, gana la tierra y todos los que las habitamos.
la construccion de nuevas avenidas y puentes, como estaba planificado en el pasado, la reorganizacion de la ciudad con nuevas areas en las arrabalizadas y de miseria con apartamentos y locales no debe esperar, asi como se hizo la prolongacion mexico, v centenario y otras ..habia 3 puentes en proyecto unir el este incluyendo uno en el malecon interes de lo que ahora controlan todo, combustibles etc..es que mientras mas caos hay,mas le conviene a
si les incautan los vehi****s a los infractores con 2 o mas infraciones ,le suspenden las licencias, los multan economicamente, otro gallo cantaria., ademas el estado en vez de poner mas autobuses es construir mas metros y funiculares para asi eliminar cientos de chatarras ambulantes
veo que las mayoría de opiniones tienen sentido pero hay algo que no se ha tocado en todo esto y es algo sencillo, y pequeño, pero es quizás el peor de los problemas. señores es que en república dominicana no hay educación para manejar vehí****s. hay que hacer una campaña y un sistema de aprendizaje que comience en las escuelas primarias, intermedia y secundaria. esto es parte de la solución.
vuelvan a la época de los burros, partía de imbéciles, lean entre lineas el artí**** o es que no se han dado cuenta del propósito del mismo, su autor esta haciendo de vocero de los importadores de vehí****s nuevos ….a la **** aprendan a leer un artí**** y sobre todo quién lo escribe!!
y el seguro anda en un burro:
don oscar lópez todos en la vida tenemos la esperanza de algún día adquirir un vehí**** nunca se puede criticar ese derecho ahora los pueblos tienden a expandirse y a multiplicarse mi preocupación es que ningún gobierno a querido acabar con esas vergonzosas chatarra que pululan en nuestras calles principalmente en la capital a la vista de los turistas y gentes que nos visitan y sabemos que los dealer se oponen a este cambio el gobierno es culpabl
Única soluciÓn, proh.ibir la importaciÓn 100×100% de todo tipo de vehÍ****, los actuales irlos convirtiÉndolo a elÉctrico o gas natural, asÍ todos ganamos. naturalmente para eso se necesita un consenso nacional o una ley.
en el caso de pto rico, en el expreso de mayor paso vehicular, ellos quitaron la division del expresso que dividia los que hiban de los que venian. e hicieron la division movible de ocho carriles, dejaron cinco para los que salian de san juan en la mañana, y por la tarde movian la division , para que los seis carriles funcionaran para los que regresaban por ser mucho mas que los que regresaban que los que salian, eso resolvio el problema y aun
el señor dijo todo lo que hay en esta capital sobre atascos y tapones pero es lo mismo en todos las paises .en la república la diferencia es mas culpables los motoristas que estan fuera de control. irresponsablidad extremo y peligroso, la majoria como lo veo no respetan nada de semáforos ni pasos peatones.fue a la feria ayer para la entrado habia un peatonal ( pedestrian crossing) ninguna pararon ni la policia patrullando la zona.
somos un país del tercer y medio mundo y hace tiempo que la paz pública se arruinó.
el problema vehicular, es uno de los grandes problemas del pais. si no se toman medidas urgentes y draconianas el pueblo pagara los platos rotos. esta situacion es desesperante, volatil y muy dañina para la salud de todos. hay que tomar el toro por los cuernos y organizar una comision, para que estudie, investigue y redacte un plan…urgente ya que el pueblo no aguanta mas incapacidad, desinteres, anarquia y falta de accion.
seÑor oscar y todos los que opinan,que se debe prohibir la importacion de vehi****s, esa no es la solucion. lo que hay que hacer es sacar todas esas chatarras que andan en las calles y llevar hehi****s en mejores condiciones y educar a la poblacion.
oscar esta usted en lo cierto y lo grande es que no hay educación.vial tienen que prohibir las importaciones de vehí****s
estoy de acuerdo
totamente cierto… hubo un tiempo en que ningun gobierno podia regular la entrada de vehi****s al pais. ni pensar en la colectivizacion del transporte. un programa asi, no tenia el visto bueno de las transnacionales estadounidenses. un gobierno que se atreviera a esa regulacion, corria el riesgo de ser derrocado. no se ahora. ¿se entiende?
totalmente de acuerdo con la solución planteada