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BOSTON.- Igualando el récord de triples en la NBA, los Boston Celtics comenzaron la defensa del título machacando 132-109 a los New York Knicks en el juego inaugural de la nueva temporada.
Jayson Tatum lideró el bombardeo verde con 37 puntos, 10 asistencias y y 8 triples, en una vibrante noche en el TD Garden que comenzó con la entrega de los anillos de campeones de la pasada temporada.
Los 29 triples que anotó la franquicia verde empataron la anterior mejor marca de la NBA, que poseían los Milwaukee Bucks desde diciembre de 2020.
La exhibición de los Celtics fue todo un golpe de autoridad ya que los Knicks son el equipo que más se reforzó en esta temporada baja, con los sonados fichajes de Karl-Anthony Towns y Mikal Bridges.
«Hoy fue una noche emocional. Fue una celebración de lo que conseguimos el año pasado y darle la vuelta después y ganar de esta forma a un gran equipo, me hace estar muy orgulloso», declaró Tatum.
Para comenzar el viaje, los 20.000 aficionados del TD Garden disfrutaron de una jornada de ensueño en la que fue alzada al techo la bandera del 18º título, que convierte a Boston en la franquicia más ganadora de la liga.
Tatum no tardó en marcar el ritmo en un primer cuarto en el que anotó 15 puntos. La velocidad de juego y el acierto exterior de los locales abrumaron a unos Knicks en los que sólo plantaban cara el base Jalen Brunson y el escolta suplente Miles McBride, ambos con 22 puntos.
Por los Celtics, Derrick White terminó con 24 puntos y 6 triples y Jaylen Brown con 23 y 5.
Los locales nunca bajaron el pie del acelerador y llegaron a tener 35 puntos de ventaja, asestándole un golpe moral a unos Knicks que tienen grandes aspiraciones para esta campaña.
LEBRON Y BRONNY JAMES HACEN HISTORIA
LOS ÁNGELES — Cuando LeBron James hizo historia hace dos temporadas, superando a Kareem Abdul-Jabbar como máximo anotador de todos los tiempos de la NBA, su hijo mayor, Bronny James, estaba sentado en un asiento junto a la cancha, junto a la línea de fondo.
El martes por la noche, en el partido inaugural de la temporada de Los Angeles Lakers contra los Minnesota Timberwolves, LeBron y Bronny hicieron historia al estar juntos en la cancha.
Se convirtieron en el primer dúo padre-hijo en la historia de la NBA en aparecer juntos en un juego cuando se registraron en el juego al mismo tiempo con 4:00 restantes en el segundo cuarto.
Cuando la pareja se levantó del extremo del banco y caminó hacia la mesa de anotadores, la multitud del Crypto.com Arena comenzó a zumbar, estallando en vítores cuando LeBron y Bronny se quitaron sus pantalones de calentamiento para pisar oficialmente la cancha.
Bronny, seleccionado por L.A. en la segunda ronda con la selección número 55 en junio, tuvo problemas en la pretemporada, promediando 4.2 puntos con un 29.7% desde el campo. Pero terminó con una nota alta, anotando 17 puntos en 7 de 17 tiros con 4 rebotes y 3 robos.
Sin embargo, el entrenador de los Lakers en su primer año, JJ Redick, apoyó al base novato, haciéndolo jugar en los seis partidos de exhibición de L.A., incluyendo una prueba de una alineación con Bronny y LeBron juntos brevemente en el segundo cuarto contra los Phoenix Suns el 6 de octubre.
Antes del partido contra los Wolves, Redick dijo que estaba «emocionado de ser parte» de la ocasión «histórica» de que LeBron y Bronny comenzaran la temporada en el mismo equipo.
Redick dijo que consultó con el padre y el hijo para obtener su opinión sobre cómo preferirían que se desarrollara su primer juego juntos.
«Tuvimos un par de conversaciones al respecto», dijo Redick. «Creo que todos estamos de acuerdo. Queremos que tenga sentido y que suceda de manera natural y en el transcurso del juego».
Sentados en la misma línea de base donde Bronny vio a su padre romper el récord de Abdul-Jabbar estaba otro dúo de padre e hijo que hicieron historia juntos.
«Saber que esos muchachos estarán presentes esta noche mientras Bronny y yo estamos en el mismo equipo es un momento genial en la historia de los deportes», dijo LeBron después de la práctica matutina de tiro de Los Ángeles.
El martes fue la cuarta vez en los deportes profesionales en que ocurrió el incidente padre-hijo.
Además de los Griffey, a los James se les une el gran jugador de hockey Gordie Howe, que jugó con dos de sus hijos, Mark y Marty, para los Hartford Whalers en 1980, la primera vez que la hazaña familiar ocurrió en la NHL. Tim Raines y Tim Raines Jr. también saltaron al campo juntos para los Baltimore Orioles el 4 de octubre de 2001.
Los Griffey jugaron juntos para los Seattle Mariners durante dos temporadas en 1990 y 1991, y anotaron memorables jonrones consecutivos el 14 de septiembre de 1990.
of-am