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OPINION: Verdadera motivación de la reforma constitucional
En el ciclo democrático de la post guerra fría, que se inició en República Dominicana en 1978, las elecciones se decidieron por mayoría simple, hasta que en el año de 1996 se inauguró el sistema de doble vuelta que aún prevalece en estos momentos.
Pero a pesar de la existencia del nuevo sistema electoral de Balotaje, solamente en el 1996 fue necesario hacer una segunda vuelta para definir el ganador, ya que en lo adelante la definición se ha producido en la misma primera vuelta, incluso en el caso de las elecciones del año 2000 en que el candidato triunfador no alcanzó el 50% más uno en la primera vuelta.
Existen básicamente tres elementos que determinan una victoria en la primera vuelta de un partido o de un candidato que esté en el gobierno. Una buena obra de gobierno , una amplia política de alianza y una oposición dividida.
La derrota del PLD y su candidato pencoso en las elecciones presidenciales del 2020 se debió a dos de esos tres factores que acabo de mencionar. Las alianzas se derrumbaron por el mal manejo político del Presidente Danilo Medina con los partidos pequeños, y la división que provocó en el PLD el fraude electoral en las primarias de octubre 5 del 2019.
Lo anterior favoreció la victoria en primera vuelta del actual presidente Luis Abinader Corona.
La pregunta que debe estarse planteando en el gobierno en estos momentos es cuál será la estrategia para ganar la reelección en Primera o Segunda vuelta en el 2024.
Lo primero sería hacer un buen gobierno, lo cual está un tanto difícil por la crisis económica y fiscal que ha dejado la crisis sanitaria de Covid19.
El segundo punto sería desarrollar una amplia política de alianzas que proporcione los votos para una definición en la primera vuelta, pero ahí no hay mucho que hacer porque hay fuerzas que ya están comprometidas con el PLD y otras con la Fuerza del Pueblo.
Entonces el elemento clave para una victoria en primera vuelta en el 2024 sería atizar la división de la oposición a los fines de evitar que sus votos terminen en un solo palo en una posible segunda vuelta electoral en la que el favorito sería el Dr. Leonel Fernandez.
La habilitación política del Lcdo. Danilo Medina sería la pieza clave, ya que eso fomentaría la confrontación entre él y el Dr. Leonel Fernández y facilitaría la victoria de Abinader en primera vuelta con los votos del sector independiente de la sociedad.
Entonces ahí está la verdadera motivación de una reforma constitucional con la que el Danilato colaboraría con el gobierno a cambio de que se le habilite a su líder para ser candidato en el 2024 aun consciente de que no tendría ninguna posibilidad de ganar ni de pasar a una segunda vuelta,pero evitaría una polarización entre el candidato del gobierno y el Dr. Leonel Fernández.
La Fuerza del Pueblo llevaría las de perder en esa Reforma Constitucional, tal y como le sucedió al PRD en el Pacto por la Democracia del 1994.
El plan del gobierno ahora es menguar las fuerzas que soportan a Danilo Medina para luego habilitarlo para que debilite al Dr. Leonel Fernández. A eso apostó Balaguer en el 1990 cuando le entregó el PRD a Peña Gómez para que debilitara al Profesor Juan Boch en las elecciones presidenciales de ese año.
El Caramelito de un Procurador General independiente no es más que una trampa elegantona para justificar la modificación presidencial y habilitar al Lcdo. Danilo Medina. Si los actuales procuradores son independientes eso significa que la constitución actual no es el problema para que el procurador o los procuradores sean o no sean independientes, y aun en el caso de que sean escogidos por el CNM el Presidente siempre tendrá la suficiente influencia para influir de manera determinante en su elección.
JPM