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¿Merecen los congresistas de Baní repetir en el 2016?
En la provincia Peravia, para bien o para mal, hemos elegido al señor Wilton Guerrero como senador en tres periodos no consecutivos 90-94, 2006-2010 y 2010-2016, por lo que lleva cerca de 14 años como congresista.
Al decir de los banilejos, Guerrero era un pequeño comerciante y un político de la izquierda. No era rico ni heredó fortuna. Hay quienes dicen que tienen pruebas de que Wilton antes del 1990 andaba pidiendo favores y hasta ayuda económica para asuntos políticos.
Sin embargo, 25 años después de ser senador por primera vez (1990), 19 años de ser nombrado director del Instituto Agrario Dominicano (1996), y 9 años de repetir como senador (2006), tiene una fortuna acumulada y es propietario de 5 tiendas “la maravillita”, de una iglesia que se construye frente al parque y de varias casas de lujo.
Entre su salario mensual y lo que recibe para gastos de representación, viáticos, hospedaje, ingresos por sesión, por dirección de comisiones y de fondo social,le ingresa cerca de 10 millones anuales. Si este lo sumamos por el tiempo que tiene en el Senado ha administrado más de 140 millones.
A pesar de todos esos recursos que no resisten una auditoria, de su reparto clientelar para rendir culto a su personalidad, de tener la alcaldía y de influir en todos los problemas médicos, policiales, y de la justicia en Baní, el senador -como Danilo Medina- no ha resuelto uno solo de los problemas sociales.
También elegimos a tres diputados. Por un lado Santos Ramírez y Carmen Leyda con dos periodos y (10) diez años como diputados y por otro lado Milciades Franjul con tres periodos y catorce (14) años como diputado.
Estos diputados podrán servir para administrar sus salarios, el barrilito y los privilegios. Podrán ser buenos para montar juegos de azar, para traficar con su influencia y conseguir contratas y para montar iglesia y engañar pero no sirven para producir las leyes que requiere la provincia peravia.
Los tres diputados, dos del (PRM) y uno del (PRD) ganan 175 mil mensual cada uno. También reciben el salario 13 (doble sueldo) de 175 mil y el salario 14, un bono por 175 mil por lo que reciben 1 millón 50 mil anual. También reciben 392 mil para gastos de representación, viáticos, dietas, plan de ayudas y el fondo social. Es decir, se ganan más de 14 millones anuales.
Si usted escoge el salario base y los privilegios de estos (4) cuatro congresistas resultan que se ganan más de 33 millones anuales. Estos ingresos no incluyen la gasolina, secretaria, chofer, incentivo por asistir a secciones o por dirigir comisiones. Tampoco incluyen las dos exoneraciones.
Estos congresistas parten y reparten y se quedan con la mayor parte. Pero lo que le reparten a la gente es una miseria que solo sirve para apaliar la pobreza por un día mientras ellos siguen disfrutando todo el año.
Todo el dinero y la ayuda que entregan estos congresistas para los gastos fúnebres, médicos, de construcción y demás no provienen de su bolsillo sino del presupuesto que pagamos todos con nuestros impuestos.
De 45 leyes que aprobó el congreso en el 2015, según la fundación del directorio legislativo, 23 por iniciativa del poder ejecutivo y 22 por algunos legisladores, los congresistas de Bani no han propuesto ni una sola de estas leyes y solo asistieron a las secciones para justificar su cheque y el barrilito.
Son tan cara dura que tanto el senador como los diputados aprobaron el presupuesto sin leer el proyecto ya que protestaron cuando vieron por la prensa que no se asignó un solo centavo para la provincia peravia en el 2015.
Por estos flamantes congresistas hoy está el acueducto de Bani paralizado y el pueblo sufriendo las consecuencias del agua. Hoy esta desprotegida toda la cuenca del rio Bani y una población sufriendo del abandono del estado.
Sin embargo, tanto el senador como dos de los tres diputados aspiran a repetir en el cargo y hay un diputado que quiere ser senador.
¿Merecen estos congresistas repetir como senador y diputados en el 2016?. Claro que no!
jpm