Los libros impresos dominan la predilección

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EL AUTOR es periodista. Reside en Santo Domingo.

La reciedumbre de la tradición histórica de la hoja de papel, vigente desde 1450 con la primera obra impresa tipo móvil de Johannes Gutenberg, no ha podido ser desplazada por los emergentes y preponderantes booksinfluencers (personas que difunden contenidos de libros en las redes sociales), BookTube (videos libros) ni otras transhumancias virtuales de manuales, o por la inteligencia artificial, especialmente su big data. Terminantemente, el libro no torcerá la cabeza.

En vez de sustituir a los textos escritos, los formatos digitales, como los audiolibros y los podcasts, refuerzan a los primeros. Increíblemente, los libros impresos dominan la predilección, aún en los segmentos juveniles, como en Estados Unidos y España.

Las cartas de papel se guardan en los safaris románticos e imprescindiblemente se estampan en las referencias históricas y sociopolíticas, en tanto que los periódicos menguan drásticamente su circulación. En cambio, los libros análogos montan una tenaz resistencia a los electrónico: la mayoría de los pobladores del planeta selecciona los libros de papel, conforme diversos estudios.

La You-Gov, compañía internacional de investigación de mercados y análisis de datos basada en Internet, con sede en el Reino Unido y operaciones en Europa, difundió una encuesta en septiembre de 2022: “El 64% de la ciudadanía española prefiere los libros en papel a la hora de leer”, y podría “extrapolarse al resto de países del mundo, ya que, por ejemplo, el 68% de la población italiana y el 78% de la ciudadanía francesa también prefieren leer en papel”.

Otra firma, New Survey Shows Readers Overwhelmingly Prefer Physical Books, en agosto de 2022 divulgó: “Una nueva encuesta realizada entre 2,400 lectores de libros de todas las edades en Estados Unidos, Reino Unido, Francia y Alemania revela que la gente sigue prefiriendo mayoritariamente los libros físicos por su aspecto, su tacto e incluso su olor”. El 70% del grupo más joven (de 16 a 24 años) encuestado dijo que acoge los físicos frente a los electrónicos.

Veamos otras estadísticas: el 65% se inclina hacia los libros orgánicos, el 21% a los electrónicos y el 14% a los audiolibros, lo que revela palmariamente que las tradiciones no se suplantan por decretos ni por modismos.

Las transformaciones son más paulatinas, y por esa razón en plena era digital tres de cada usuario platea los impresos, e incluso apenas el 16% de los jóvenes de la generación Z lee los dos formatos. Más, los de los digitales confiesan que esa elección está motivada por la facilidad en el transporte (59%), el bajo costo (42%) y comodidad de la lectura (37%).

Otra tendencia muy pronunciada en los citados y otros estudios sobre el top  temático son la supremacía de la novela histórica, los textos de fantasía y ciencia ficción, las novelas de suspenso o misterio, las aventuras y los romances.

Oh¡ El 42% conserva los libros cuando concluye su lectura, el 26% los presta o regala, el 26% los vende y el 5% los recicla o desecha. Por igual, las mujeres leen más que los hombres.

Todos nosotros moriremos, menos el libro. Sobrevivirá a todas las borrascas, sea impreso o ya sea digital. Sin él, la vida vagabundeará en el dolor y la nostalgia, por la carencia de referencias históricas y data de la contemporaneidad.

La Feria Internacional del Libro de Santo Domingo invita a la lectura de obras sobre historia, ciencias políticas, derecho, economía, mercadeo, comunicación social, novelas, cuentos, ensayos y poesías.

                     oscarlr1952@gmai.com

jpm-am

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Domingo Jerez
Domingo Jerez
8 meses hace

Excelente articulo, hoy más que nunca necesitamos fomentar la lectura en nuestro país, creo que estamos avanzando, ya que la feria del libro deja sus huellas.