INAPA se olvidó del municipio de Las Yayas

Las Yayas de Viajama, además de ser un pueblo secuestrado por la usura administrativa de los fondos públicos, hoy, El Alto de las Flores, uno de sus más empobrecidos barrios, siente con crudeza la ausencia de agua potable.  Una tragedia por más 20 años.

La historia trágica del Alto de las Flores, es una más de las tantas repetidas en pueblos condenados al calvario  de la democracia representativa. Este sistema ha permitido que, por ejemplo, el Municipio de Las Yayas haya elegido a los peores miembros del Partido Revolucionario Moderno: una alcaldesa que pretende reelegirse con las más vergonzosas maniobras de la usura política y un cuerpo de regidores  subyugado a los manejos turbios de un ayuntamientos moral y económicamente quebrado.

En todo esta horrible escena  se encuentra un tanque de agua nuevo instalado hace más  de tres años y no hay manera de que las autoridades locales de Las Yayas hayan podido exigirle a INAPA que termine con más  de 20 años de calamidad en el sector del Alto de las Flores.

Allí la primavera se fugó para dejar hernias y huesos quebrados en  mujeres, niños y ancianos que tienen cargar agua a una altura de más trescientos metros. Una tragedia que es una vergüenza publica para el gobierno central y la gestión del presidente Luis Abinader en la provincia.

Hace mucho  tiempo que el Municipio de Las Yayas perdió totalmente la esperanza en las autoridades locales: el pueblo eligió unos  los dirigentes del Partido Revolucionario como  verdugos, amparados en las más vergonzosas maniobras  de la usura política.

El pueblo de Las Yayas sabe que los empleados de INAPA en el muncipio de Las Yayas son  servidores públicos ejemplos de dignidad laboral.  No hay quejas de la dirección de servidores de INAPA en Las Yayas.

Sin embargo, el caso del Alto Flores destapa serios cuestionamientos a la dirigencia  provincial y los directivos políticos del Partido Revolucionario Moderno. Lo único que el Ayuntamiento de Las Yayas ha gestionado son unas mangueras para tapar esta grave situación que afecta a uno de barrios más productivos del pueblo.

 Las Yayas tiene un ayuntamiento que ya es experto en remiendos como una forma de manejar el pastel de los fondos públicos como una parcela privada.

El pueblo sabe que no puede contar con esos dirigentes del Partido Revolucionario Moderno,  más empecinados  en saldar cuentas con la usura política  que en hacer diligencias para que el Alto de las Flores sea abastecido del preciado líquido.

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