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El rey del sur
El Sr Castillo se define como un triunfador porque «salio de abajo, paso por el medio y llego arriba», obviando mencionar que en el proceso arraso como huracan con todo lo que encontro a su paso. Segun esta reseña periodistica, «quiere ser presidente para devolverle al pueblo algo de lo mucho que ha recibido”.
Bueno, este señor si que tendria mucho que devolvernos, ya que en terminos de enriquecimiento personal durante su gestion en Obras Publicas, su capital corporativo aumento inexplicablemente.
Sin embargo, para la gran mayoria de los dominicanos, peledeistas de base y de otras banderias, este señor no cuenta con un apice de integridad. Estoy seguro que es una persona agradable y carismatica, pero no estamos en un concurso para elegir al mas simpatico. Auto calificarse como «triunfador» es una afrenta a la gente seria y pensante de este pais.
Veamos. Sus empresas estaban al borde de la quiebra cuando subio el Sr. Medina al poder. La pregunta colectiva de la nacion es, de donde provienen los recursos que conviertieron a su empresa de transporte aereo (entonces en quiebra, o al al borde de) en la mayor empresa de su tipo en toda la America Latina? Sr. Castillo, abra sus libros de activos y pasivos, sus estados financieros al escrutinio de la nacion, ya que de seguro deberian aparecer multiples emprestitos bancarios que justifiquen el crecimiento exponencial de su flotilla de aviones. Cuando satisfazga estas interrogantes, el pueblo estara mas tranquilo, y obtendra el endoso de muchos.
Ahora bien, difiero de su caracterizacion de lo que constituye ser un triunfador. Para una persona decente, ser triunfador lo constituye una vida profesional caracterizada por la integridad y excelencia academica y laboral, adornada por la honestidad, pulcritud y transparencia en su desempeño. Otro marcador seria una contribucion, por pequeña que sea, al pensamiento humano en sus diferentes vertientes. Otro seria un acto heroico, ya sea comprometiendo sus bienes, o inmolando su vida por una causa noble y justa. Y finalmente, el principal marcador, a mi entender, lo seria una fe inquebrantable en Dios y el apego incondicional a sus enseñanzas, preceptos y mandamientos. No el dinero ni la posicion politica, Sr Castillo, esos son anti valores.
A mi juicio, su paso por la carrera publica dejo mucho que desear. Exhibe una marcada sociopatia narcisista, unos aires de importancia y mesianismo infundados por la obnubilacion. La tergiversacion de valores que emanan de sus discursos raya en lo absurdo y primitivo. Al no contar con meritos de integridad, sobriedad, entereza, intelectualidad, el aprecio de la colectividad o logros que lo califiquen para la candidatura a la presidencia del PLD, le presagio una derrota segura el dia 6 de octubre. Juan Bosch se sentiria apenado con el proceder del grupo de cuestionables que le rodean. Lo conoci, y al igual que mi padre, tenia una moral ferrea e inquebrantable que rayaba en la intransigencia.
Solo basta examinar el desastre de su funcion en la administracion publica: carreteras que se desmoronan al mes, sobrevaluaciones que colocan el kilometro de construccion multiples veces mas caro que en Europa y escuelas cuyos techos colapsan, hiriendo a niños y que la prensa no reporta porque esta comprometida con el regimen. En fin, a juicio de la gran mayoria pensante del pais, usted no califica como candidato del futuro, sino como desecho del pasado.
En cambio, Leonel Fernadez vino de abajo y llego arriba, pero en el proceso logro cultivar el aprecio del pueblo y de lo mas granado de la reserva moral e intelectual de este pais. Recuerdo a don Juan, a mi padre y a otros asi exaltar sus virtudes y calificaciones en 1995. Acumulo experiencia de estadista y goza del respeto y aprecio de presidentes, intelectuales, profesores y lideres empresariales a nivel mundial.
A Ud en cambio se le conoce como El Rey del Sur, el hombre de los aviones, el escogido de un gobierno desacreditado por la corrupcion y supuestos nexos al narcotrafico internacional.
