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La ruta hacia el pasado 6 de octubre
El 6 de octubre del 2019, año que se aproxima a su final, habrá de tener un capítulo aparte en la historia política de la República Dominicana, en el segundo decenio del siglo XXl; esto así, porque ese día estallaría una crisis definitiva entre los dos liderazgos más fuertes del principal partido político del país.
Nadie que desconozca la realidad dominicana, podría entender, como dos sectores que se habían facilitado el poder el uno al otro, podían llegar a puntos tan encarnizados que decidieran romper la estructura partidaria que les había facilitado la obtención de sus metas políticas.
Por esa razón, es necesario contar la historia a la luz de los hechos; nada se origina en las primarias internas del año 2007, como se lo creen muchos y como lo han pregonado algunos interesados; somos testigos de excepción de la campaña electoral del hoy Presidente Medina para las elecciones de mayo del 2000, donde fue derrotado por el Ex presidente Mejía.
Aun habiendo renunciado a la Secretaría de la Presidencia, el Lic. Danilo Medina, para dedicarse a su campaña presidencial, dejó en el Palacio Presidencial una fuerte estructura de apoyo para sus labores electorales, bajo la dirección de la Señora Margarita Sánchez, con el respaldo irrestricto del Secretario Administrativo de la Presidencia, el Lic. Simón Lizardo.
Esa estructura, manejó la logística del Estado que respaldaba los diferentes eventos electorales que apoyaban su candidatura presidencial; pero el escenario de la justa por venir, no se parecía en lo más mínimo a lo acontecido en el pasado 1996; para este certamen del 2000, teníamos a un Hipólito Mejía encabezando la boleta de un fuerte PRD, que ya había conseguido una victoria contundente en las congresuales y municipales de 1998.
Además, teníamos un Dr. Balaguer que había decidido recoger sus huestes, y jugar su último papel en la historia electoral dominicana; bajo estas circunstancias, el PLD que apoyaba la candidatura de Medina, no le quedaba otro remedio que rascarse con sus propias uñas.
Tan difícil fue esa campaña para el hoy Presidente Medina, que se enojaba cuando en un mismo día, en diferentes escenarios, tenía que ver las caras de los mismos compañeros; ¡qué carajo hace usted aquí!, si ya nos vimos a mediodía en Color Visión en la Capital; nos increpó, a su llegada a los Blancos en el municipio de Enriquillo, a solo tres horas y media del encuentro de la mañana.
Y era razonable, que con la baja simpatía que despertaba el Candidato, el Partido hubiera tenido que volver al esquema del 1986, con aquellas marchas y mítines enlatados, donde participaban a una convocatoria todos los miembros y circulistas disponibles en el momento.
Luego de la derrota, contemplaríamos desarrollar diferentes tesis, tratando de culpar al Presidente Leonel Fernández de aquel fracaso; y es ahí en verdad donde comienza la ruta hacia el 6 de octubre del 2019; para las elecciones del 2004, ese grupo que ya encabezaba el Presidente Medina, en una profunda reflexión, llegó a la conclusión, de que solo desde el poder y con el respaldo absoluto del Estado, él, Danilo Medina podía romper sus limitaciones personales y de empatía con el electorado dominicano.
Es así, como deciden usar nuevamente al Dr. Leonel Fernández para volver al poder; pero sus intenciones quedan claras, cuando para el evento electoral del 2008, quieren romper la vía legal y natural, impuesta por la Constitución, que había habilitado a Hipólito Mejía en el 2002, para un segundo intento de continuar dirigiendo el gobierno.
Era legal, que Hipólito que había hundido el país en una profunda crisis económica, intentara reelegirse; pero según el grupo de Danilo Medina, Leonel Fernández que había rescatado a la Nación de esa crisis, no podía hacerlo; tenía, según el propio Danilo que cederle la oportunidad a él.
En este corto episodio, no podemos incluir la larga cadena de acciones y hechos que fueron concebidos para tratar de desacreditar y destruir la figura política del Dr. Leonel Fernández; eso será parte de una próxima entrega en nuestra ruta al pasado 6 de octubre del 2019.
No se pierda, las trapacerías de Chucky Joao Figuereo y sus cardos palaciegos.
JPM/of-am