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Buscando soluciones al tránsito vehicular
La República Dominicana enclavada en la parte Este de la Isla de Santo Domingo, es la más poblada de América Latina y cada día se congestionan más las vías de comunicación y se observa un taponamiento imposible de sortear, no obstante los policías, semáforos, circunvalaciones, elevados, túneles y readecuación de vías (cambio de circulación de vías y todos los cruces con dobles sistemas de control de tránsito).
Desde la década de los años 90s Joaquín Balaguer había iniciado dos ejes o avenidas principales como forma estratégica del descongestionamiento del tránsito en la ciudad de santo domingo con la construcción de la avenidas Gregorio Luperón, Av. Colombia, Charles de Gaulle la ampliación de la 27 de febrero y la Quinto Centenario, lo cual arrojo un gran descongelamiento del centro de la ciudad.
En los gobiernos de Leonel Fernández se construyeron soluciones con el Metro de Santo Domingo, los túneles y los elevados más importantes de la provincia de Santo Domingo, la ampliación de la carretera de Villa Mella, los corredores 27 de Febrero y Av. John F. Kennedy, la creación de los autobuses OMSA y la Oficina Metropolitana del Transporte (AMET) y cada día más, vemos como se agudiza el tránsito en toda la provincia, no obstante haber descentralizado los servicios públicos.
Hoy, frente a estas grandes soluciones seguimos sufriendo el mismo problema. Es tiempo de que se busquen soluciones a este problema que está afectando la vida de todos los ciudadanos que vivimos en la provincia de Santo Domingo y también a todos aquellos que visitan la ciudad, afectando de manera transversal principalmente el turismo de nuestro país.
Debe hacerse un estudio, donde se pueda probar la puesta en servicio de un carril exclusivo para la circulación de los vehículos de transporte de pasajeros, impedir que los vehículos de transporte de pasajeros transiten por los túneles y los elevados y, poner una tarifa alta a todos los vehículos de lujo que estén circulando con menos de tres personas al cruzar los peajes, de tal forma que aquellas familias que disponen de más dos vehículos absorban el costo del entaponamiento y l contaminación ambiental.
Debe tomarse una medida radical con relación a la importación de vehículos, prohibiendo la importación de chatarras, Sacar de circulación todos los carros del concho que están en malas condiciones y otorgar empleo a sus propietarios.
Gravar con una tarifa más alta la entrada de vehículos de lujo, para evitar la forma inmisericorde de tanto vehículos de esta clase que están pagando impuestos similar a los vehículos de trabajo, como son los Conchos, Taxis y los de simples servidores privados y públicos.
El Estado necesita más ingresos para dar mantenimiento a las calles, avenidas, túneles, carreteras y autopistas, de tal manera que el uso de los vehículos de lujo deben castigarse, así como también a los vehículos pesados que son una amenaza para nuestras vías de comunicación e incluso trayendo grandes contaminaciones ambientales que dañan la salud de las personas.
Hay que modificar la ley 141 de Tránsito Terrestre, dándole una nueva orientación a las funciones de la policía nacional de amet, adecuando las funciones de la OTTT y OMSA, así como mantener el papel preponderante que tienen los ayuntamientos en la intervención de las vías de comunicación tanta a nivel de tránsito y señalización así como también en el ordenamiento de la ciudad.
El Poder Ejecutivo debe responsabilizar a los ayuntamientos a cumplir con las funciones que le otorga la ley 176-07 para que estos sean más vigilantes en el ordenamiento de la ciudad, en términos de rutas de vehículos, sentido de las vías de comunicación, operación de semáforos y mantenimiento de las calles ambientalmente manejadas.
Es tiempo de luchar contra la contaminación y el entaponamiento de las principales vías de comunicación, es tiempo de regular, es tiempo de crear mayores impuestos a la importación de vehículos de lujo, es tiempo de hacer un receso en la entrada de tantos vehículos a este país, que es uno de los más poblados de América.
Hay que reorganizar la circulación de vehículos e impedir el congestionamiento del tránsito y evitar mayor contaminación ambiental.