Miguel Guerrero, vivir en libertad, trayectoria de un ejercicio periodístico

“La razón buena no conoce la cobardía filosófica: analiza todo lo que siente: estudia todo lo que ve.” José Martí

SANTO DOMINGO DE GUZMÀN.-  Entre los creadores de la conciencia nacional dominicana hay economistas, filósofos, poetas, sociólogos, educadores y entre ellos diversos periodistas que le han dado lustre a la Patria y han continuado martillando para que  la Nación se mantenga en los cimientos en que fue fundada.

Miguel Guerrero es un dominicano de acción y pensamiento. Un laureado escritor que desde el siglo pasado viene aportando al país de Duarte, Sánchez y Mella sus mejores manojos en la compilación histórica y periodística.

A lo largo de nuestra accidenta historia democrática, Miguel Guerrero nos pone a transitar en esos caminos de libertad que les ha costado la vida a muchos ciudadanos. Haber vivido en breves trechos y periodos de libertad con las prácticas de las disciplinas sociales indispensables para cimentar una armonía y civilizada convivencia. En múltiples ocasiones dentro del marco de una trayectoria larguísima el escritor oriundo de Santa Cruz de Barahona ha expresado su esperanza de que los dominicanos deben buscar formas de vivir auténticamente democráticas y buscando las buenas relaciones humanas.

Un libro vertebrado en 26 capítulos donde se discuten temas de importancia. Desde la prensa dominicana a través de los años; el abismo entre periodismo y literatura; la crisis venezolana y Carlos Andrés Pérez; la intelectualidad al servicio de la tiranía; hasta aterrizar en el proceso electoral de 1996 visto desde Madrid. El libro que es un estandarte de la verdad y muestra esplendente de las convicciones democráticas del autor. El doctor Bruno Rosario Candelier en el prólogo que escribe nos recuerda que la obra es reveladora de una larga y fecunda experiencia periodista.

Rosario Candelier afirma que Guerrero en el libro tiene un claro olfato para sentir y entender el comportamiento político de líderes y gobernantes. Desde la época de Trujillo hasta Danilo Medina, el autor de “Vivir en Libertad” analiza y valora el legado histórico, político, económico y cultural con objetividad. Guerrero conocedor de la política del patio y también de la internacional, del ejercicio constante de los gobiernos y la conducta de un pueblo que cifra sus esperanzas en la cultura occidental, democrática, civilista y cristiana.

Sin lugar a dudas “Vivir en libertad” es una obra que enfatiza el desarrollo de la conciencia nacional a través de la historia y el autor que ha escrito numerosos libros de reflexión crítica sobre los procesos, sociales, históricos y culturales de la República Dominicana,  siempre  ha hecho bien uso de la palabra con el rigor de la objetividad y el aporte del pensamiento formador en procura de nuestro desarrollo para que procedamos con apego a los mejores intereses nacionales a la luz d la vedad que ilumina y la sabiduría que edifica, termina diciendo Don Bruno en su magistral prólogo dedicado a esta magnífica obra.

Guerrero nos vuelve a martillar en lo más profundo de nuestra conciencia y nos afirma en forma de dicterio: “Esta sociedad requiere de una reflexión profunda: que sus líderes en la política, en la religión en los negocios y en la sociedad civil, echen a un lado interés y prejuicios para encontrar con buenos modales las salidas que los problemas demanden. Una agenda sin condiciones, sin venidos y vencedores, porque al final, cuando esto ocurre de forma rutinaria, la semilla de la confrontación que muchos guardan en sus corazones germina y perdura, y esa no debería ser la causa que nos mueva. Sólo un ambiente de respeto mutuo hará que un día, gobierno y oposición se pongan de acuerdo para adelantar aquellos proyectos con los que usualmente están de acuerdo. En una democracia, el valor de la oposición puede ser tan importante omo el del gobierno. Las elecciones del 2020 brindan otra oportunidad para encarar ese gran desafío.”

El mismo escritor en la presentación de su más reciente entrega nos dice: “La credibilidad continúa siendo la más valiosa credencial de un medio y de un periodista. En sus hebras Guerrero deja siempre la nota de gratitud hacia Don German Ornes. La obra recoge momentos estelares del ejercicio profesional del autor de “Vivir en libertad.” Escaló varios peldaños desde reportero, corresponsal de revistas, diarios y agencias internacionales de prensa, comentarista y productor de televisión y columnista de medios nacionales e internacionales.

Miguel Guerrero realiza una tarea y en cada una de ella nos deja una lección. Trabaja con la inteligencia en busca de la verdad. Vive en una constante en un infatigable ideal de cultura.  Ha creído en el saber, en los valores espirituales, en el derecho, en la justicia, en la libertad, en Dios. Siempre este hijo de Barahona sueña con la fraternidad de los pueblos. Se desprende de sus aportes periodísticos y literarios que todo es posible si los corazones lo aspiran realmente. La grandeza de este escritor es que cuando alumbra zonas inéditas del saber, donde divulga sus conocimientos, la estampa inconfundible de este dominicano de buena cepa es la sencillez y la modestia de un verdadero escritor sabio y de un hombre bueno. Es un sembrador que ha sembrado sin ruido. Escribe sin alarde. Es un hombre que a pesar del tiempo no ha conocido el odio, y no le ha hecho mal a nadie, sin sentir en la conciencia la sombra de un remordimiento. Por tal razón, se ilumina su mirada con tanta serenidad como esta mirada de “Vivir en libertad.”

Les recomiendo la obra a todos los lectores. No se me olvida que la grandiosidad del lenguaje invita a la grandiosidad del pensamiento. Enhorabuena, Miguel.

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