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La oposición de titulares y la prensa
Pasada la revuelta de abril del 1965 y tras ella la llegada del doctor Joaquín Balaguer al poder en 1966, en República Dominicana empezó la fatídica era de los 12 años, época olvidada por pocos. El otrora partido de la esperanza nacional, el Partido Revolucionario Dominicano, entonces dirigido por el profesor Juan Bosch, a pesar de haber nacido envuelto en crisis, se dedicó a hacer una oposición política constructiva para el país. Hacer oposición, no es más que demandar del gobierno de turno las soluciones políticas definitivas a los principales problemas nacionales, además de poner sobre la mesa cual es la mejor forma de lograrlo. Precisamente esa era la practica llevada a cabo por el PRD de Bosch y, luego por el Partido de la Liberación Dominicana también de Bosch. Leíamos con atención y orgullo como, en cada problema del país, ya sea eléctrico, de salud, transporte, educación, la economía, vivienda, justicia, entre otros, el PLD era crítico constante de las políticas aplicadas; pero, sobre todo, hacia planteamientos lógicos y prácticos de que debía hacerse en cada área mencionada. En la actualidad estamos disfrutando de la peor generación política en la oposición. El PRD envuelto en una división que no es sorpresa para nadie en el país, donde la oposición interna es el pan de cada día. El repartimiento de los más de cuatro mil puestos electivos a disputarse en mayo de 2016 más la candidatura presidencial, es lo único que les quita el sueño a sus dirigentes. Ni que decir de los llamados partidos emergentes que no son capaces de llevar un candidato común a la presidencia de la república, muchos de ellos envueltos en negocios abiertamente con el gobierno, además de hijos y familiares desempeñando funciones públicas, con el chantaje político a flor de piel. La izquierda burra, (de Cardozo) aún no se entera que Stalin murió, que cayó el muro de Berlín y desapareció la URSS; peor aún, no saben que existe el BRICS, CONASUR y el ALBA. Es tiempo de prebendas. Reunirse con el presidente casi siempre es difícil, pero cuando logran hacerlo, apueste peso a morisqueta que no es para llevarle soluciones a los tantos problemas que padecemos, sino a exigir espacios y reclamarle cuota política a cualquier precio. Según Galeano el oportunismo de hoy se llama pragmatismo, la traición se llama realismo, los pobres se llaman personas de escasos recursos, el saqueo de los fondos públicos por algunos políticos se les llama enriquecimiento ilícito. Y agrego y cuando los altos dirigentes de diferentes partidos se reúnen, están consensuando, cuando se reúnen los de bajo, están traicionado. La Prensa La prensa responsable de antaño, que era parte importante del proceso, es como las películas del oeste estadounidense, debemos acudir a los recuerdos de niño para recrearla en la memoria. Ahora se habla se habla de prensa globalizada, que como dice Fidel, es el desarrollo de las fuerzas productivas, que se traduce así: si los medios cayeron en manos de las grandes corporaciones, los periodistas también, por ello adquirieron categoría de globalizados. De manera pues, que si no queremos sufrir de censura debemos crear nuestros propios medios; porque para ser empleado de alguna cadena globalizada no debemos hablar ni del Cardenal, ni del presidente, ni de los candidatos de las principales fuerzas políticas. Solo nos falta que nos prohíban de Jack Veneno. lsaamadis@gmail.com