En defensa de Hipólito Mejía

En algunos medios de comunicación digitales y muy específicamente en las redes sociales, ha aparecido un artículo escrito por el señor Miguel Espaillat, el cual después de leerlo un par de ocasiones, me ha motivado a expresar mi humilde punto de vista, pero claro, no es fácil responderle a un “intelectual” de fuste como le han definido al responsable del artículo “Hipólito Miguel hacia la tercera derrota”. Iniciar un artículo con el criterio de que el ex presidente Mejía es un hombre dichoso y que él no lo sabe, descalifica enseguida a este escritor para continuar elaborando una hipótesis carente de objetividad. Quiere presentar que Hipólito es un individuo carente de capacidad como para evaluar cada circunstancia, en las que ha tomado participación activa durante su vida pública y privada. Cuando presentan una hipótesis partiendo de una visión subjetiva, definitivamente, que la tesis o resultado final será una conclusión con una visión completamente al margen de la realidad histórica.Refleja el escritor Miguel Espaillat, en este panfleto, que su personalidad refleja un gran prejuicio, y por tanto buscan solo como objetivo fundamental descalificar al ex presidente Mejía, para que juegue el papel importante que en el actual proceso político que vive el país está desarrollando el ex presidente Hipólito Mejía.El resentimiento del escritor brota por sus poros, y no puede ocultar y dejar a un lado el alto grado de frustración que experimenta como militante político que él es. Su contradicción, es clara, cuando pretende demostrar que Hipólito Mejía ha ocupado el espacio que han debido ocupara otros intelectuales, con mayor formación que el ex presiente, y retuerce los hechos para descalificar al ex presidente como Social Demócrata, ya que según Espaillat, no ha jugado el papel que otros presidentes de América Latina han asumido. El resentimiento, la frustración, las perturbaciones y las pasiones, son situaciones que no permiten a un escritor coherencia y concatenar los hechos históricos al momento de analizarlos, y eso ha llevado al señor Espaillat a emitir una hipótesis, carente de objetividad, y considera que retorciendo los hechos históricos puede lograr su objetivo. Ninguno de los que han sido presidentes o están al frente de los destinos de los países de América Latina, que señala en su artículo de marra Miguel Espaillat, han dicho que son social demócratas, y mucho menos las organizaciones políticas a las que ellos pertenecen son miembros de la Internacional socialista. Participan en los Congresos de la internacional socialista como observadores. Pero que título académico, tuvo Hugo Chávez, Evo Morales, Ignacio Lula, y otros grandes presidentes que la señala? Ninguno…El subjetivismo vuelve y lo atrapa, cuando afirma que Hipólito Mejía llegó a ser Secretario de Agricultura por la muerte del hijo del presidente Guzmán, y no dice que el gran trabajo realizado por Mejía, al frente del Instituto del Tabaco, lo proyectó con una imagen de buen agrónomo y administrador dentro del sector agropecuario. La lealtad del Ing. Hipólito Mejía a Don Antonio Guzmán y posteriormente a José Fco. Peña Gómez, condiciones que parece no tiene el escritor de marras, fueron las razones que llevaron a los perredeístas primero en el año 1999 a otorgarle el 75% de los votos emitidos por quienes participaron en una convención interna abierta, democrática y transparente, por lo tanto con cualquiera no ganaba el PRD en el año 2000, pues para ser candidato debía primero ganar esa convención. Cualquiera no fue quien ganó la convención, la ganó quien había logrado impactar dentro de las bases del perredeísmo. Los liderazgos no se hacen por decreto como pretende el escritor prejuiciado de Miguel Espaillat que ocurra. Hasta este momento, quien luce con más posibilidades de encarnar un liderazgo en la oposición dominicana, es Hipólito Mejía, a quien este frustrado escritor, tiende a subestimar en parte porque Hipólito con frecuencia abusa de la espontaneidad. Lo que no quiere reconocer Miguel Espaillat, es que si hoy por hoy, el ex presidente Mejía, aparece encabezando el liderazgo de la oposición es por su capacidad para acercarse a la gente, porque hace reír, porque proyecta sencillez, humildad, porque no robó ni mató y por sus extraordinarias energías para la actividad política. La crisis económica, durante el período que administró los destinos del país el ex presidente Mejía, no se originaron en su gobierno, sin embargo los propios críticos políticos de esa época, en los últimos años, han admitido que la manejó muy bien, eso incluye al consejo nacional de la empresa privada. Solo a Miguel Espaillat, quien en cada párrafo que escribió demostró un alto grado de frustración, se atreve a decir que Hipólito es el responsable de la derrota, en las elecciones del año 2012, pues el señor Espaillat, olvida, que el ex presidente Hipólito Mejía registró el 47 por ciento de los votos en las elecciones presidenciales de ese año 2012, a pesar de que luchó contra un frente de 14 partidos, encabezado por el de la Liberación Dominicana, quienes utilizaron todo el Estado, llegando a producir un déficit fiscal por encima de los 200 mil millones de pesos del presupuesto nacional, además del caballo de Troya que representó, Miguel Vargas Maldonado presidente del PRD, el partido que postuló a Hipólito Mejía. Hipólito Mejía ha sido por más de una década sometido a una campaña de calumnia y difamación ejecutada por el Partido de la Liberación Dominicana y sectores vinculados a este, por lo cual hay muchos videos como señala el señor Espaillat quien hoy en una acción perversa, programada con premeditación y alevosía, y ajustada a un guion escrito por dirigentes interesados buscan distorsionar la imagen pública del líder de la oposición dominicanaPero Miguel Espaillat ha decidido buscar el camino más corto, y se ha sumado a la campaña mediática, elaborada por el PLD y Miguel Vargas, para distorsionar la imagen del ex presidente de la Republica Dominicana, Ing. Hipólito Mejía. Pero, como señala el viejo y popular refrán, “más rápido cae un mentiroso que un cojo”, y la calumnia rueda por el suelo más temprano que tarde. Los aguijones de Miguel Espaillat, demuestran su impudicia y malignidad, la cual tiene como único propósito hacer que los dominicanos se confundan por medio de la mentira a través de hechos e informaciones sacados de contexto.

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