Los mercados eléctricos (OPINION)
Es preocupante que el tema de la crisis eléctrica en la República Dominicana sea un tópico de palpitante interés, que este sea sostenible en el tiempo o que sea recurrente y hasta cansón, molesto, desagradable y hasta de interés comercial o negocio en contra de las grandes mayorías o adverso a los más humildes.
El pasado 7 de agosto de 2024 la señora Elcin Akcura, economista senior especializada en energía, publicó en el blog del Banco Mundial un artículo acerca de los datos sobre electricidad, siguiendo la transformación de los mercados eléctricos en el mundo.
En dicho artículo la señora Akcura señala que la estructura de los mercados eléctricos ha evolucionado mucho en las últimas décadas en el mundo.
Destaca que hace 40 años en general se consideraba que el sector de electricidad cumplía una función de utilidad pública.
Desde entonces se han implementado diseños alternativos a los monopolios integrados, entre ellos la libre entrada, la competencia por el mercado y la competencia en el mercado.
Señala que hay carencia de datos al analizar la organización de estos en 230 economías entre 1989 y 2024.
El objetivo de la base de datos es presentar diferentes diseños estudiados a nivel mundial sobre la estructura de los mercados de energía. Además de esta información, la base de datos documenta la desagregación del sector, la existencia de un ente regulador sectorial y la entrada de un productor independiente de energía eléctrica.
La base de datos existente destaca que muchos países aplicaron diferentes estructuras para mejorar la eficiencia del sector y, al mismo tiempo, mejorar el acceso, la asequibilidad de la electricidad.
La señora Akcura dice que en la actualidad, 71 economías mantienen la organización que tenían en 1989. Por el contrario, 159 economías utilizaron diferentes estructuras en los últimos 35 años.
La tendencia dominante ha sido la adopción de diseños de mercado que, en diversos grados, ampliaron el papel del sector privado en el sector eléctrico.
En 1989, el modelo de empresa de suministro integrado verticalmente, en el que una entidad única desempeñaba todas las funciones en el sector eléctrico, era la estructura de mercado predominante adoptada por 215 economías.
Pero esta forma de empresa en algunos casos experimentó retrasos en la inversión, falta de competencia, desempeño financiero deficiente, niveles de eficiencia bajos y pérdidas más elevadas.
Pero algunos mercados que utilizaron esta estructura pensaban que las decisiones y operaciones de inversiones podrían garantizar que estuvieran coordinadas y alcanzar los objetivos de seguridad energética y social, como la electricidad rural.
En la actualidad el modelo de comprador único es la estructura del mercado eléctrico más utilizada en el mundo: el sector eléctrico de 89 países y territorio funciona de esta manera. En virtud de los modelos SBM, el Estado autoriza a los productores independientes de energía eléctrica (PIE) del sector privado a generar electricidad y venderla a la compañía eléctrica nacional o a una agencia de compras mayorista.
Este diseño del mercado permite una competencia por el mercado limitada, en el que los generadores privados compiten para suministrar electricidad a los compradores centrales a través de contratos.
Relativamente es fácil de implementar y adaptar a los contextos de los países, sin embargo, pueden producirse resultados subóptimos en el sector si el comprador único no tiene solidez financiera y no puede cumplir con los términos de sus contratos con los generadores de energía.
Algunos países han intensificado aún más la competencia en el sector eléctrico al permitir las participaciones en el mercado de las empresas de generación de luz eléctrica públicas y privadas, las empresas de distribución y suministro, y los usuarios finales.
Los precios de la electricidad determinados por el mercado ayudan a habilitar la determinación de precios y permiten señales transparentes para las inversiones, al tiempo que abren oportunidades para el sector privado.
Este tipo de competencia en el sector eléctrico solo estaba presente en Chile pero ha aumentado hasta 69 países.
La autora del artículo resalta que los mercados bien diseñados pueden incentivar las inversiones a la escala que se necesita para lograr una integración generalizada de la energía renovable y el acceso a la electricidad limpia, asequible y confiable.
Conforme la base de datos, la cual se puede descargar en Excel, de unos 2,500 países en el cual se arrojan muchas informaciones valiosas donde se encuentran la cantidad de los países que llevan uno u otra estructura de mercados.
RD
La República Dominicana aplica la estructura de mercados donde interviene el Estado como el Sector Privado, estimulándose la competencia e inclusive las inversiones en energía limpia, pero el sistema no ha podido ser eficiente ya que las distribuidoras eléctricas se encuentran en manos del Estado, lo cual lleva a muchos usuarios a no pagar la energía eléctrica, creyéndose que por ser del Estado está libre de pago.
Las empresas de distribución eléctrica o EDES presentan cada mes un pronunciado déficit financiero por el bajo cobro del servicio brindado, ahondando la situación debido a que no existe un régimen de consecuencias, que lleve a los pillos de energía eléctrica al banquillo de los acusados.
Recientemente, la Vicepresidenta de la República, Raquel Peña, exhortó a la población a pagar sus facturas del servicio eléctrico para que contribuyan con los cambios que se requieren en el sector eléctrico y recordó que es un servicio que ha significado un costo elevado para el gobierno y la ciudadanía.
La funcionaria reconoció que los apagones en el país se deben a la falta de inversiones en el sector eléctrico durante más de diez años.
También atribuyó a los cortes eléctricos entre otros factores, como el aumento en la demanda, el crecimiento económico y la intensa ola de calor que afecta al país.
Sin embargo, aseguró que el gobierno, a través de su equipo eléctrico, está realizando las inversiones necesarias para garantizar un servicio más seguro y estable.
Como se advierte, esta situación de crisis del sector eléctrico que además de los factores aquí mencionados obedece a la falta de las acciones que han debido tomar los diferentes gobiernos del pasado, inclusive aquellos que les ha tocado gobernar por más de 20 años y no fueron lo suficientemente responsables de ponerle coto a esta desesperante calamidad.
Es oportuno reconocer que no se le ha dado el frente como ha debido ser para terminar de una vez y por todas con esta situación mediante una efectiva reforma donde tanto el Estado como el Sector Privado, mediante una alianza mancomunada, puedan ponerle fin, ya que no es un secreto que si no se cuenta con un sistema eléctrico estable no se puede hablar de crecimiento y desarrollo sostenibles.
felix.felixsantana.
jpm—am