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Culturalmente nos estamos haitianizando
La cultura de un pueblo no se define únicamente por su música, su gastronomía o sus tradiciones festivas, sino por el modo en que sus ciudadanos se relacionan, respetan las normas y asumen la convivencia social.
En la República Dominicana, estamos viviendo una transformación preocupante que va más allá de la economía o la política: una degradación cultural visible en el comportamiento colectivo, especialmente en el irrespeto a las reglas básicas de orden, seguridad y convivencia.
Cuando afirmo que “culturalmente nos estamos haitianizando”, no lo hago desde un discurso de rechazo hacia nuestros vecinos, sino desde una alerta sobre cómo las prácticas de informalidad, desorden y anarquía social están reemplazando los valores dominicanos tradicionales de respeto, cortesía y cumplimiento de la ley. Nos estamos acostumbrando al caos como forma de vida.
En las calles ya no se respetan los semáforos, las aceras son ocupadas por motores y vendedores informales, y el ruido se ha convertido en el nuevo lenguaje urbano. Las normas de tránsito, las reglas de convivencia y hasta las instituciones que deben hacerlas cumplir parecen haberse rendido ante la cultura del desorden. Es como si el civismo hubiese pasado de moda.
El resultado es un país donde la inseguridad no solo se expresa en la delincuencia, sino en la falta de confianza en el otro. El ciudadano ya no siente protección ni respeto, y se defiende de su entorno con miedo, desconfianza y violencia. En ese contexto, la sociedad se animaliza, pierde los límites y sustituye el respeto por la ley del más fuerte.
Esa tendencia —de vivir al margen del orden— se está normalizando culturalmente. Lo que antes se veía como una excepción hoy es parte del paisaje: bocinas ensordecedoras, basura arrojada en cualquier lugar, insultos al volante, corrupción cotidiana y una indiferencia social que mata en silencio.
El peligro
El peligro más grande no es que existan estos comportamientos, sino que los aceptemos como algo normal. Cuando la anarquía se vuelve costumbre, el tejido moral se deshilacha, y con él desaparece la noción de nación organizada.
Esa es la verdadera haitianización cultural: la adopción inconsciente de un modelo donde las normas dejan de importar y el Estado se diluye entre la informalidad y la impunidad.
Recuperar el respeto por las reglas y por el otro no es tarea exclusiva del gobierno, sino de todos. La educación, la familia y los líderes comunitarios deben volver a poner el orden, la decencia y el respeto en el centro de la vida nacional.
Solo así podremos frenar este proceso silencioso que está transformando nuestra identidad dominicana en una mezcla caótica sin valores ni dirección.
jpm-am
Sr. Morel permítame corregirlo: No nos estamos haitianizado, los últimos 4 presidentes traidores, nos están haitianizando.
Qué cómodo es encontrarle un culpable a nuestras inconductas. Resulta y viene a ser que todos los males que padecemos se debe a la presencia haitiana. El caos, la música alta, saltarse los semáforos, el lenguaje vulgar, el dembow, los juegos de azar, el romo, la cuereria, los apagones, la basura, la baja escolaridad, la corrupcion, el alto costo de la vida, el teteo, etc., etc. son comportamientos adquiridos de los vecinos.
EL PRINCIPAL MAL QUE NOS OCACIONA HAITI ES EL AUMENTO DEL DESEMPLEO QUE GENERA POBREZA EN NUESTRO PUEBLO QUE PAGA IMPUESTOS Y NO TIENE LA CULPA DE QUE LOS HAITIANOS NO SE ENTIENDAN ENTRE SI CREO QUE PRONTO LOS LLAMAREMOS «EL CABALLO DE ATILA» PORQUE POR DONDE PASAN LOS HAITIANOS NO CRECE LA LLERVA UN EJEMPLO ES EL PROPIO HAITI Y LAS COSAS NO CAMBIARAN ESO ESTA EN SUS GENES VIENEN A TRABAJAR POR BAJO SALARIOS Y VER SI CONSIGUEN PAPELES Y SI LO LOGRAN NO TRABAJAN MAS COMO EN HAITI QUE SOLO TRABAJAN LAS MUJERES
No se trata de un rechazo al intercambio, sino de un urgente llamado a rescatar lo dominicano en un mundo que borra fronteras con facilidad.
Señor Morel, el título de su artículo es un insulto para el país vecino. Si habla de una cultura del caos, de la desorganización, de la desaparición del civismo que parece instalarse en su país, ¿por qué mencionar a Haití?
Sin duda, es una falta de compasión por su parte hacia los haitianos, que llevan décadas viviendo una situación infernal.
LA SOBERANIA Y EL TEJIDO SOCIAL DOMINICANO SE VEN SERIAMENTE LESIONADOS CON LA INMIGRACION ILEGAL DE UNA POBLACION PRIMITIVA
CON DEFICID EN TODOS LOS INDICADORES SOCIALES QUE RECHAZA LOS VALORES NOBLES DE CONVIVENCIA DONDE VA CON UN ORGULLO DE NEGRITUD
QUE NO LES PERMITE ACEPTAR OTRAS CULTURAS COSA QUE NI EN LOS PAISES AFRICANOS SE DA ,UN VICTIMISMO REAL O FABRICADO CREANDO CRISIS EN SU PAIS PARA JUSTIFICAR DERECHOS EN OTROS PAISES MOSTRANDOSE MUY ALTIVOS EN RECLAMO DE DERECHOS PERO COBARDES PARA LUCHAR POR SU PAIS
NO QUIEREN RECONOCER QUE EL PRINCIPAL ENEMIGO DE HAITI ES EL PROPIO HAITI Y NO MIRAR HACIA AFUERA BUSCANDO CULPABLE
La cultua del desorden se esta institucionalizando en RD, Eso es un echo ….. Gobierno van y Gob vienen y lo mismo, no hay cambio en el Modelo ni en el modo de ejecutarlo, ya que la Ineptitud, falta de vision, planificacion , cambios y reformulacion han fallado rotundamente ante la realidad de unas autoridades, ciegas, ineptas, vagas, apaticas. pasivas y medalaganarias, pero no eso tenemos un Congreso lleno de narcos, riferos, delincuen
II ) Tes, analfabestias, titiriteros que no saben lo que tienen entre manos y el resultado es un pais, que es un solo desorden en los cuatros puntos Cardinales. Leyes van y leyes vienen y es mas de lo mismo, porque no se va a la raiz del problema, que es la educacion constante, la que se ha descuidado, para darle paso a la Politiqueria, la chercha y el relajo, y asi no vamos a avanzar. por otro lado cuando se vayan a implementar los metodos se debe ser muy estricto para evitar el relajo y la corrupcion de los… Leer mas »
DESDE QUE SALIO DE NUESTRAS ESCUELA LA EDUCACION CATOLICA,LA MORAL Y CIVICA ASI COMO LA TERJIVERSACION DE
NUESTRA HISTORIA,LA PROHIBICION DEL HIMNO NACIONAL,PONER BANDERAS SIN ESCUDOS Y LOS UNIFORMAES DE NUESTROS ATLETAS Y MILITARES CON EL COLOR DE LA BANDERA HAITIANA .
LO PEOR LOS DONINICANOS SIN PROPOSITO Y FUTURO QUE VENDEN LA PATRIA AL MEJOR POSTOR ,LA INGENIERIA SOCIAL PARA DESTRUIR NUESTRA NACION HA SIDO EXITOSA