CARICOM condenó política migratoria RD; no dijo nada sobre Bahamas
BRIDGETOWN.- La Comunidad del Caribe (Caricom) cerró este sábado su cumbre anual con una condena a la política migratoria de República Dominicana, que implica deportar a descendientes de haitianos, pero no dijo nada sobre medidas drásticas que el gobierno de Bahamas ha puesto en practica para evitar la presencia de ilegales haitianos en su territorio.
El presidente de turno del CARICOM y primer ministro de Barbados, Freundel Stuart, dijo que los líderes de esta comunidad «estamos muy preocupados por las acciones del Gobierno dominicano, que han dado lugar a una crisis humanitaria que acecha sobre nuestra región».
Dijo que los líderes regionales emitirán en breve una declaración completa sobre el asunto, pero el primer ministro de San Vicente y las Granadinas, Ralph Gonsalves, adelantó a la prensa que Caricom mantendrá la presión sobre República Dominicana para que revierta su política de deportación de personas a un país donde no tienen vínculos.
Gonsalves dijo también que estaba decepcionado porque los compromisos asumidos por República Dominicana durante una reciente reunión en Bruselas no se hayan mantenido.
Advertencia a Venezuela
Caricom también advirtió a Venezuela de que su reclamo sobre el Esequibo puede «envenenar» las relaciones con la región.
En una conferencia de prensa posterior al cierre de la 36 cumbre anual de Caricom, y coincidiendo con la celebración hoy del 42 aniversario de la creación de esta organización, su presidente de turno y primer ministro de Barbados, Freundel Stuart, reconoció que los líderes de la organización no habían logrado consensuar un candidato para el cargo de secretario de la Commonwealth.
«Nos hemos centrado en buscar estrategias para sacar mejor provecho de nuestra participación en conferencias internacionales, reforzar nuestros sistemas educativos y lograr una recuperación social y económica», resumió Stuart en una conferencia de prensa en la que sin embargo la atención se centró en el conflicto entre Guyana y Venezuela y la política migratoria de República Dominicana.
Respecto al primero, dijo que los líderes de la región estaban de acuerdo en que el reclamo venezolano podría «envenenar las relaciones» con la agrupación de integración regional y mostró su confianza en hallar una solución pacífica al conflicto.
«Caricom respalda muy firmemente a Guyana», pero también es consciente, dijo, de las «buenas relaciones» que Caracas tiene con la región.
«No estamos al punto de interrumpir esa relación o contaminarla de ninguna manera», aclaró Stuart, quien apuntó que Venezuela «se ha comprometido a mantener la paz y la tranquilidad en esta región» y confió en que se alcance una «solución amistosa».
El presidente de Guyana, David Granger, quien durante esta cumbre ha pedido a sus homólogos que enviaran a Caracas una condena «enérgica», dijo que estaba satisfecho con esta declaración de Caricom.
Añadió que cuando regrese a su país informará a la población de que Caricom «se compromete a garantizar que la región sigue siendo una zona de paz y hará todo lo posible para asegurar que nada perturbe la paz en la región».
Recientemente Exxon Mobile descubrió una «significativa» reserva de petróleo de alta calidad en el Esequibo, el territorio en disputa. Venezuela reclama a Guyana que detenga la exploración, mientras el Ejecutivo guyanés trata de recabar el apoyo internacional para lograr que Caracas desista en su reclamo.
Desde Caracas, el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, anunció hoy que el lunes expondrá ante el Parlamento local la que llamó una «agresión» contra Venezuela desde Guyana.
Durante esta cumbre, el secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, mantuvo una reunión bilateral con Granger, quien aseguró tras el encuentro que el funcionario del organismo multilateral le manifestó su disposición mediar y enviar una misión a Guyana.
En la cumbre de tres días celebrada en Barbados también hubo ocasión para debatir sobre la decisión de la Unión Europea (UE) de incluir a trece países del Caribe en la lista de paraísos fiscales.
Los mandatarios coinciden en que se trata de una inclusión «injusta» que «perjudica a nuestras economías», por lo que reclaman la revisión del listado, según dijo Stuart al resumir los acuerdos alcanzados en una reunión a la que asistió el presidente de Panamá, Juan Carlos Varela.
Al dirigirse hoy a sus homólogos caribeños, Varela propuso que su país se convierta en observador de Caricom e iniciar con ella conversaciones para alcanzar un acuerdo de libre comercio, así como para firmar un memorando de entendimiento para la creación de un Centro Regional de Seguridad.
No dijeron nada sobre Bahamas
El gobierno de Bahamas, un miembro activo de la Comunidad del Caribe (CARICOM), ha deportado en los últimos siete meses 3,369 inmigrantes ilegales y solamente en los primeros 23 días de junio repatrió a 369 haitianos, vía aérea, tras mantener algunos de ellos enjaulados, según han destacado versiones de prensa.
El impacto de estas deportaciones se ha sentido en Haití a tal extremo que el diario digital “Haití Libre” comentó en su edición del pasado domingo que el gobierno del archipiélago ha sido “más severo” que el dominicano en la ejecución de sus leyes migratorias.
“Si uno considera injusta y racista la política de inmigración en la República Dominicana, en Bahamas se aplica mucho más severamente la ley, ya que no es siquiera una cuestión de regularización del estatus migratorio de la gente”, expuso el medio.
“Desde la puesta en práctica a principios de noviembre (de 2014) de las nuevas medidas migratorias adoptadas por el Gobierno de las Bahamas, nuestros compatriotas en situación irregular viven con el temor de ser arrestados y deportados”, indicó el diario Haití Libre.
La determinación del gobierno bahameño es de acabar con la migración ilegal que contrasta con las políticas que aplica el gobierno dominicano que, además de dotar de identidad a cientos de miles de haitianos, no ha iniciado repatriaciones masivas, redadas, arrestos en las calles y o rastreos en viviendas, destaca por su parte el periódico dominicano.
La Comunidad del Caribe (CARICOM) (en francés: Communauté Caribéenne) (eninglés: Caribbean Community) (enneerlandés: Caribische Gemeenschap) fue fundada en 1973 por el Tratado de Chaguaramas (Trinidad y Tobago) y sustituyó a la Asociación Caribeña de Librecambio que había sido creada en 1965.
Es una organización de 15 naciones del Caribe y dependencias británicas. Los miembros de pleno derecho son: Haití, Antigua y Barbuda, Barbados, Belice, Dominica, Granada, Guyana, Jamaica, Montserrat, Saint Kitts y Nevis, Santa Lucía, San Vicente y las Granadinas, Trinidad y Tobago. Las Islas Vírgenes británicas y las Islas Turcas y Caicos son miembros asociados.
Las Bahamas pertenecen a la Comunidad pero no al mercado común creado en su seno, mientras que Aruba, Colombia, Curazao, México, Puerto Rico, Sint Maarten y Venezuela son países observadores.