PANAMÁ: Anticastristas y defensores Gobierno cubano se van a los golpes
PANAMÁ.- Disidentes cubanos y defensores del Gobierno de Cuba protagonizaron en Ciudad de Panamá un incidente en el que cruzaron insultos y también algunos golpes en una actividad previa a la VII Cumbre de las Américas de este viernes y sábado en la capital panameña.
El percance se dio la tarde de ayer en las inmediaciones del Parque Porras, en el centro de la capital y donde están ubicadas las embajadas de Cuba y de España, cuando los anticastristas agrupados en la denominada Alianza de la Resistencia Cubana se preparaban para un acto de homenaje a José Martí.
Los anticastristas fueron rodeados por simpatizantes del Gobierno cubano que los acusaban de ser «terroristas», «miembros de la CIA», «asesinos», «cabrones» y «gusanera».
El forcejeo y los intercambios de golpes se produjeron cuando los simpatizantes castristas exigieron a los miembros de la Resistencia Cubana que abandonaran el lugar, según se pudo apreciar en las imágenes de la televisión local.
Presidente advierte no tolerará más incidentes
El presidente de Panamá, Juan Carlos Varela, pidió «respeto» a los funcionarios y grupos opositores cubanos que protagonizaron los incidentes violentos que acabaron con la detención temporal de cerca de una veintena de personas.
«Somos un país que acoge a todos, y pedimos respeto a todos, anoche se liberó a todos los detenidos con la advertencia que si se repiten los incidentes se les aplicará sanciones», declaró Varela a los periodistas antes de inaugurar el foro de rectores de América paralelo a la VII Cumbre de las Américas.
El gobernante refirió que «fue muy lamentable e inaceptable» lo ocurrido frente a la embajada de Cuba en Panamá y señaló que también se llamó la atención «a sectores del personal cubano por la falta de tolerancia y la provocación», que acabó con un enfrentamiento a puños y patadas en el que fueron detenidos una veintena de personas.
Aunque no se ha identificado a ninguno, el encuentro violento fue entre personal y afectos al gobierno de la isla y los opositores del exilio cubano invitados al foro de la Sociedad Civil, inaugurado el miércoles con retraso por los incidentes también suscitados en el hotel donde se celebró el encuentro.
Varela reconoció que entre los cubanos «hay heridas profundas» y destacó que los foros en Panamá son «una oportunidad de acercamiento», pero que los incidentes provocaron que «se refuerce la seguridad en todos los foros», y «una advertencia a todos, porque el país va a ofrecer las garantías a todos los gobernantes que asisten a la cumbre».
Por su lado, el secretario de Comunicación del Estado, Manuel Domínguez, especificó que «si se produce un nuevo incidente, la policía hará uso de la fuerza» para impedirlo y reiteró que solo se permitirán manifestaciones dentro del marco de la ley, que contempla la expulsión o deportación del país del que use la violencia.
Esta es la primera Cumbre de las Américas que reúne a todos los países miembros de la Organización de Estados Americanos (OEA), pues Cuba, que estuvo ausente de las seis ediciones anteriores, sí asiste a esta cita en Panamá.
jt/am