Paraguay, una terrible guerra en Latinoamérica (1)
Brasil, Argentina y Uruguay contra Paraguay
La más sangrienta y prolongada contienda militar librada entre países de América Latina duró seis años (1864-1870). Cambió la realidad de una parte considerable del llamado Cono Sur, dejando además graves consecuencias psicológicas especialmente entre los paraguayos.
Los contrincantes fueron Brasil, Uruguay y Argentina (la Triple Alianza) y Paraguay, la tierra del lago Ypacaraí, situado cerca de su ciudad principal y mundialmente famoso por la célebre guarania que invoca su nombre en clave de sonsonete.
Los primeros hechos vinculados con ese conflicto surgieron por la invasión que en el 1864 hizo Brasil al Uruguay para derrocar al presidente Atanasio de la Cruz Aguirre Aguado (del partido blanco) para sustituirlo por el general y caudillo político Venancio Flores Barrios (afiliado al partido colorado), que luego fue asesinado el19 de febrero de 1868.
Presidente López
Antes de su derrocamiento Aguirre Aguado pidió y obtuvo el auxilio del presidente del Paraguay, general Francisco Solano López, lo cual no impidió su caída.No tuvo igual suerte cuando trató de conseguir el apoyo de Francia, entonces bajo el control del ambicioso Napoleón III, el sobrino del célebre Napoleón Bonaparte, a quien pretendió imitar sin tener sus atributos personales. Eso permitió que entre bambalinas los británicos movieran sus hilos en favor de las fuerzas que resultaron victoriosas, obteniendo luego grandes beneficios.
El presidente Solano López decidió tomar la iniciativa de penetrar (de paso) con tropas en el territorio de Misiones, Argentina, y ocupar una porción de Río Grande del Sur, Brasil, causando gran disgusto a la casa imperial de ese vasto país. Estaba claro que el presidente paraguayo tenía una actitud diferente al perspicaz guerrero Héctor, el personaje mitológico troyano de la Ilíada de Homero, que no era partidario de la guerra que finalmente le costó la vida a manos de Aquiles; aunque la consideraba inevitable por la actitud de los aqueos.
La dramática decisión del referido jefe de Estado sudamericano contó con el asesoramiento y apoyo de los más reconocidos estrategas militares paraguayos de la época, entre los que cabe mencionar a los generales Bernardino Caballero Melgarejo, Elizardo Aquino Jara, José Eduvigis Díaz Vera y José María Bruguez Ríos. Todos ellos sobredimensionaron la capacidad bélica de su ejército, que no tenía la envergadura necesaria para llevar con eficacia dichas operaciones militares.
Luego se supo que el motivo de esa decisión era la creencia de Solano López, y de la cúpula de poder cívica y militar que lo sustentaba, que el emperador brasileño Pedro II (luego de ocupar Uruguay) actuaría en su contra y afectaría la soberanía de su país, con lo cual se alteraba la dinámica de los países que orbitan alrededor del inmenso Río de la Plata.
Presidente Bartolomé Mitre Martínez
La movilización de tropas paraguayas fue el pretexto invocado por el presidente argentino Bartolomé Mitre Martínez (que hasta entonces aparentaba no querer involucrar a su país en el conflicto ya en desarrollo) para firmar en mayo de 1865 un acuerdo con Brasil y Uruguay llamado la Triple Alianza.
Ese acuerdo de tres contra uno desató los demonios del infierno de la guerra más mortífera conocida en la América no anglosajona.Analizando los hechos y sus consecuencias no queda más que pensar que los motivos de los países participantes de ese conflicto quedarían encuadrados en lo que hoy se conoce como la geopolítica.
Historiadores y ensayistas opinan
La anterior no es una opinión novedosa de quien escribe. Por ejemplo, un estudioso de esos sangrientos hechos, el historiador argentino León Pomer, sostiene que el acuerdo que dio origen a la Triple Alianza se remonta a mucho antes de la formalidad de su firma el 1 de mayo de 1865.
Dicho autor explica con despliegue de conocimientos los detalles que le hicieron razonar de esa manera. (La Guerra del Paraguay-Estado, política y negocios. León Pomer).
Igual criterio se observa en los ensayos del brasileño Joaquim Nabuco de Araujo, experto también en ese trágico tramo de la historia sudamericana, que además agrega en sus reflexiones la tesis de que en Brasil se temía para la época que el presidente paraguayo Solano López derribara el imperio de Pedro II, descendiente de los Braganza, la antigua familia real portuguesa.
Pomer y Nabuco han sido reforzados en sus aludidas opiniones por el especialista brasileño en historia militar Francisco Monteoliva Dorotiatto, que en su ensayo titulado Maldita Guerra, publicado en el 2010, no escatima esfuerzos intelectuales para demostrar todos los factores de poder en que se ramificó aquella sangrienta confrontación entre cuatro países latinoamericanos.
jpm-am
desgraciadamente, el vil imperio de inglaterra fue el gran incitador y ganador de tan trágica gerra de la triple alianza. la población de paraguay, estimada en 500,000 habitantes al comenzar el conflicto, había quedado reducida a la mitad.