Veranear en N. York

imagen

NUEVA YORK.- Más allá de Central Park, la Quinta Avenida y los rascacielos de Nueva York, para este verano el destino estadounidense propone días bajo el sol a la orilla de la costa en Jamaica Bay y Rockaway Beach, en los barrios de Brooklyn y Queens.
Practicar surf, kayakismo, avistamiento de aves, andar en bici en medio de un paisaje pintoresco o probar las delicias gastronómicas locales, son algunas de las actividades más populares en el paseo marítimo, de acuerdo con NYC & Company, la organización oficial de marketing y turismo de la Ciudad de Nueva York.
Para llegar hasta Jamaica Bay y Rockaway Beach, zonas relativamente cercanas al Aeropuerto Internacional John F. Kennedy, los viajeros pueden usar metro, autobús, automóvil, ferry y hasta bicicleta.
JAMAICA BAY
La bahía situada al sureste de Manhattan está poblada de sitios para navegar. Principiantes y expertos pueden participar en las excursiones que se proponen todo el verano a bordo de canoas, kayaks y embarcaciones de vela.
A quienes entusiasme la naturaleza, seguro les gustará Fresh Creek Nature Preserve, el sitio ideal para buscar mariposas, aves y peces.
Otro punto para el avistamiento de aves migratorias es Jamaica Bay Wildlife Refuge, refugio de 332 especies. En el Centro de Visitantes, los pajareros experimentados y los ocasionales pueden conseguir un check-list de las aves del refugio para todo un día de exploración en busca de ejemplares de mascarita común (Geothlypis trichas), águila pescadora (Pandion haliaetus), o candelita norteña (Setophaga ruticilla), entre muchas otras.
ROCKAWAY BEACH
Aquellos que busquen playa deberán dirigirse a Jacob Riis Park, que de frente al Atlántico tiene un tramo de un kilómetro para nadar y ofrece a los visitantes instalaciones recreativas.
Rockaway Beach también es un punto muy socorrido para contemplar los atardeceres. Sus playas, que van desde la calle 67 a la 69 y de la 87 a la 92, son las preferidas de los surfistas por su oleaje, mientras que la playa de la calle 73 es más frecuentada por familias.
Una alternativa de alojamiento en esta zona es Playland Motel, un hotel de tan solo 12 habitaciones -cada una creada por un diseñador diferente- cuyo concepto pone énfasis en el arte y la música a la orilla de la playa. La experiencia se complementa con su taberna especializada en cocteles y que este verano se asoció con el restaurante Bolivian Llama Party.
Fuente: AM
jt/am

Compártelo en tus redes:
0 0 votos
Article Rating
Suscribir
Notificar a
guest
0 Comments
Comentarios en linea
Ver todos los comentarios