Una tendencia peligrosa
La generación de hombres y mujeres que habitan en la República Dominicana en la actual coyuntura de esta segunda década del Siglo XXI, están viviendo en una etapa de desinterés a su propia realidad que eso mete miedo.
Esos colectivos de dominicanos y dominicanas, al parecer, no se quieren detener a meditar los rápidos e incesantes cambios en forma y fondo, que se vienen experimentando en todos los ámbitos de la sociedad global y local.
Los compatriotas están como en el aire, viviendo en una burbuja, como si nada estuviera pasando a su alrededor, como si nada le importara, como si lo que pudiera acontecer en su medio social no le fuera impactar de manera directa su presente y su futuro.
Lo que se percibe es peligroso, preocupante, una indiferencia colectiva que espanta hacia fenómenos sociales, políticos y económicos que de no ponérsele atención podría acarrear situaciones inmanejables de serias consecuencias.
Por ejemplo, estoy viendo con profunda preocupación como ante los ojos de todos y todas el Estado dominicano se esté convirtiendo en el principal atractivo para emplearse cuando su función fundamental no es esa.
No se puede continuar aceptando y mucho menos estimulando este tipo de comportamiento, es al sector privado, cúpula empresarial que le corresponde ese papel de generador de puestos de trabajo. El Estado no puede estar en eso.
La mayoría quiere tener un cheque en Gobierno, quiere estar en la nómina del Estado, sin darse cuenta que lo que se está alimentando es la posibilidad de un colapso del presupuesto nacional porque no hay cama para tanta gente.
No se puede seguir dándole de lado a este problema que es cada día más creciente, hay que propiciar de manera urgente desde el Estado y la oligarquía dominicana, un plan de políticas, facilidades y estímulos reales para el emprendimiento de pequeñas y medianas empresa.
Hay que detener este espiral cada día más ascendente de ciudadanos y ciudadanas de entender que sólo en el Estado y el Gobierno de turno está la posibilidad de conseguir el sustento diario y el progreso en esta media isla.
of-am