Tinte racial en campaña entre Espaillat y Rangel
NUEVA YORK.- La reñida contienda en las elecciones primarias de los demócratas entre el representante Charles Rangel y el senador Adriano Espaillat ha llegado a un nivel desagradable con acusaciones de política racial en un distrito negro que tiene ahora una mayoría latina.
Sus debates de este mes llevaron a que el alcalde de Nueva York Bill de Blasio y el reverendo Al Sharpton pidieran a los candidatos abstenerse de basar la contienda en diferencias raciales antes de las elecciones primarias del 24 de junio en el 13er Distrito del Congreso.
Rangel, quien cumplió 84 años esta semana y está buscando su 23er periodo, acusó a Espaillat, quien sería el primer integrante nacido en República Dominicana en ser elegido al Congreso, de hablar más de sus vínculos étnicos y del orgullo de sus orígenes que de sus antecedentes como funcionario.
«Quiere ser el Jackie Robinson de los dominicanos en el Congreso», dijo Rangel en un debate en junio, agregando que Espaillat debería contarle a los votantes «qué demonios ha hecho, aparte de decir que es dominicano».
Espaillat, de 59 años, se dijo decepcionado por los ataques de Rangel afirmand «Me entristece que el congresista tenga que rebajarse a este tipo de ataques desafortunados».
Pero Espaillat también ha metido la etnicidad a sus campañas anteriores. En 2012, la primera vez que se postuló, su campaña era responsable de un volante que acusaba a otro funcionario dominicano de «traicionar a su comunidad» por apoyar a Rangel.
Espaillat ha dicho sobre ese volante que «se dijeron algunas cosas… que no son correctas para ninguna persona», pero Rangel no ha dejado el asunto ahí, y lo abordó en su más reciente debate del miércoles.
«Simplemente está mal decir que cuando alguien que habla como tú y se ve como tú tiene la obligación de votar por ti bajo la amenaza de ser un traidor», dijo Rangel.
Los asuntos sobre los orígenes étnicos han surgido porque los límites del distrito cambiaron tras el más reciente censo decenal, que quitó algunas de las parte del sur alrededor de la Universidad de Columbia y agregó una pequeña parte del Bronx.
Los hispanos, incluyendo una comunidad dominicana cada vez mayor, son ahora la mayoría de los residentes del distrito mientras que la población negra se mantiene estable y la población blanca se ha reducido.
«Lo que vemos es a dos grupos luchando por el control a través de la contienda en el Congreso entre Rangel y Espaillat», dijo Fredrick Harris, profesor de ciencias políticas en la Universidad de Columbia.
Fuente: EL NUEVO HERALD
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