Nueva forma de hacer periodismo
Muchas personas que viven en este país se resisten a aceptar de que el mundo cambió, que ésta es una nueva generación que está estrenando un nuevo y desafiante siglo XXI.
Las cosas ya no pueden ser igual que hacen cuarenta años, que no se pueden seguir arrastrando y manteniendo las mismas mañas, violaciones, ilegalidades, pactos de silencio, injusticias y complicidades. Ya no es posible.
Inevitablemente esta es una nueva generación que comienza a surgir y no puede ni debe reproducir las malas prácticas, vicios y apañamientos de los actores y sectores que interactuaron en la generación pasada.
Pero ante este cambio que ha experimentado el mundo hay personas y sectores de diferentes ámbitos que se resisten a entender esto, que no quieren aceptar que estamos ante una nueva realidad, con nuevas reglas de juego y quieren permanecer igual.
Por ejemplo, hay una legión de personajes que están irrumpiendo desde hace tiempo en el ejercicio del periodismo sin haberse graduado de licenciado en comunicación social en una universidad de la Republica Dominicana.
Pero lo más lamentable de todo esto es que la mayoría de esos usurpadores de la profesión de periodistas quieren hacer ver esto como algo normal. Se resisten al cambio porque quieren continuar con sus descaradas prácticas de extorsión y chantaje.
Y yo pienso, me pregunto y digo, ¿cómo puede prevalecer en pleno siglo XXI un comportamiento tan pasivo y hasta cierto punto cómplice de actores que pueden detener esa odiosa mala práctica que ha mantenido patas arriba tan noble profesión?
Los medios de comunicación, fundamentalmente, televisión y radio están copados de esta especie que cada día crece de manera descontrolada y parece que nadie puede ni quiere detener.
Ante esa situación pienso que es posible comenzar a cambiar esta realidad y una de esas manera podría ser, por ejemplo, que todo dominicano o dominicana que solicite rentar un espacio para ejercer el periodismo, dígase, hacer entrevistas, comentarios de opinión, reportajes; los propietarios y directores de esos medios de comunicación le exijan una copia de su diploma que lo acredite como periodista graduado. Tan simple como eso. Seguiremos con el tema.
jpm