La tranquilidad interior

Las ciencias de la psicología y de siquiatría, han sido utilizadas por profesionales, quienes buscan ayudar en los traumas y demás procesos mentales, nerviosos, entre otros que han estado afectando negativamente al ser humano, debido a la Pandemia.

Pero, en realidad, el hombre no puede superar esta situación hasta que se tenga una definición definitiva de su origen, sus consecuencias y de su eliminación total. El cerebro humano ya la ha codificado en su sistema, y desde ahí alimenta la mente para alertarla. Hay que descodificarlo con la interpretación del fin de la pandemia.

La violencia que ha generado la Pandemia, en el seno familiar y en la misma sociedad, es producto de la intranquilidad interior del ser humano. Aunque se observe una posible tranquilidad, éste explota con mucha facilidad en cólera, generando pleitos y demás conflictos familiares. Esto no es un juego, como algunos piensan, ésta ha generado una guerra interna y externa del individuo y la familia. Esta puede superarse en gran medida, promocionando una seguridad y protección en los individuos y familias.

Algunos que son contrarios a la fe en Dios, reclaman que nuestro Dios, si existe que quite la Pandemia, lo cual refleja una preocupación interna, que se manifiesta atacando a los cristianos y a Dios. Si Dios lo hiciera, quitando la Pandemia, dirían que fue otra causa que la quitó.

Sin embargo, Dios dotó al hombre de inteligencia, fuerzas motoras y la facilidad de adquirir sabiduría para buscar la solución con las vacunas y otras medidas; pero, éstos no reconocen esas riquezas dadas por Dios al hombre. Lamentablemente su inquietud mental, no es satisfecha.

El peor de los casos es que ninguna nación del mundo estaba preparada para enfrentar una Pandemia como ésta. Las crisis políticas, sociales y económicas se han manifestado, en estos difíciles momentos. El aumento en la canasta familiar, materiales de construcción, medicamentos y pagos de servicios laborales son evidencias muy fuertes del fracaso de una mayoría de las naciones.

Saber que esto es un problema global, trae grandes turbulencias mentales en la humanidad. No hay para donde ir, estamos atrapados en este globo terráqueo.

¿Cuántas personas se contagian diariamente? Nunca se sabrá. Unos ocultan que están contagiados, por los rumores que corren por todas partes, de que es mejor quedarse en sus casas. Pero, además, otros lo ocultan para evitar el rechazo social y otros, por ignorancia del peligro que corren. A eso se le agrega que, la población no sabe exactamente cuántos mueren por día, se dice murieron tanto, pero sólo tanto de las últimas 24 horas. Todo eso trae mayor inquietud mental.

Ahora se agrega el problema de ¿cuál vacuna ponerse? ¿Cuál es la mejor? Siempre una incertidumbre. No hay forma de que el cerebro no se agite con esta problemática. Más grave son los rumores de las posibles consecuencias que dejarán las vacunas. De ahí, que algunos dicen que no se van a vacunar; otros, dicen, que no se puede obligar vacunarse, ¿Y entonces? Los gobernantes deben tener equipos que eduquen sobre la importancia de la vacuna, para que el efecto psicológico halle cabida en el ser humano. Vacunas para todos, solución psicológica.

El fanatismo religioso y la ignorancia de la palabra de Dios, también trae su efecto psicológico. Estos hablan de un supuesto «chip» que se le va a poner a las personas. Eso es falso, pero los religiosos sensacionalistas explotan las emociones y morbos humanos. A todo lo nuevo les hacen una interpretación religiosa, comprometiendo así el valor real del cristianismo y sobre todo, poniendo algunos a blasfemar de Dios. El religioso no tiene que aportar nada a Dios, sino recibir lo que Dios da, y pedir misericordia de Dios por la humanidad. Seamos hombres de fe, pero fundado en lo que dice Dios, no en cuentos ni sueños ni chistes religiosos.

¿Puede Dios acabar la Pandemia? Sí, pero no tiene que hacerlo. ¿Ha cambiado el hombre su mal comportamiento ante Dios? No, ni tiene que hacerlo, si no quiere. Dios es dueño de sí mismo, es Soberano, pero el hombre tiene albedrío para tomar su decisión. Lo correcto es que hubiese un encuentro entre Dios y el hombre mediante Jesucristo. «Porque hay un solo Dios, y un solo mediador entre Dios y los hombres, Jesucristo hombre» 1Ti. 2:5.

Para que haya una tranquilidad interna, se requiere que el hombre se haga consciente de su responsabilidad ante la pandemia, que obedezca la palabra de Dios, y entonces recibirá a la solución de esta desgracia que afecta al mundo. Ninive, en los tiempos de Jonás, se arrepintió, reconociendo sus pecados y buscando de Dios, y así no le vino el mal que ya estaba determinado. Cuando hay un cambio en la conducta humana, Dios encamina la situación hacía una solución. Nuestra tranquilidad está fundamentada en esa íntima relación con Dios.

Ahora con la posibilidad de las clases presencial o semi presencial que algunos abogan. en algunas naciones, trae un elemento más de preocupación psicológica a los millones de padres, de alumnos, de maestros y de personal administrativos en las escuelas.

Sin que la población se haya vacunado, no es buena idea inicial las clases presenciales, especialmente los de primaria y secundaria. Los niños no podrán protegerse debido a su primera necesidad: Jugar. Los adolescentes su necesidad primera es socializar (camadería).

Sugiero a mis autoridades educativas, continuar y terminar este año de la manera virtual, con el apoyo respectivo: Todo va bien. Tranquilos.

JPM

Compártelo en tus redes:
ALMOMENTO.NET publica los artículos de opinión sin hacerles correcciones de redacción. Se reserva el derecho de rechazar los que estén mal redactados, con errores de sintaxis o faltas ortográficas.
0 0 votos
Article Rating
Suscribir
Notificar a
guest
7 Comments
Nuevos
Viejos Mas votados
Comentarios en linea
Ver todos los comentarios
Luis de New York
Luis de New York
3 Años hace

Sr,Pina.Usted me dice,Dios creó al ser humano y lo dotó de inteligencia, para que pueda resolver sus problemas. Dios puede acabar con el coronavirus, pero no lo hace, porque si lo hace el ser humano no se arrepiente y el ser humano tiene que arrepentirse y pedirle perdón a Dios. Sr. Pena. Usted no cree que Dios es un verdugo y un verdugo más cruel que haya tenido la humanidad. Un verdugo con todos los poderes para resolver todos los problemas Sig

Luis de New York
Luis de New York
Responder a  Luis de New York
3 Años hace

pero no lo hace, porque primero hay que pedirle perdón a Dios, Que ego se gasta ese Señor?

MAGA
MAGA
Responder a  Luis de New York
3 Años hace

Luis, dime pendejo, ya te tomaste la gotas milagrosas del narcotraficante y dictador de Maduro? ¿ O estás esperando en New York ponerte la Moderna o Pzifer y seguir escribiendo **** sin sentido?

Luis de New York
Luis de New York
Responder a  Luis de New York
3 Años hace

Maga.Lo que se puede sacar de tu prosaico comentario es simple.Vivo aquí porque los capitalistas de este país viven donde yo nací.No he ido a tomarme las gotas milagrosas a Venezuela, por que no tengo con que hacerlo.De lo escrito sin sentido. Quien realmente escribe cosa con sentido prosaico ere tu,porque realmente no tienes sentido de lo que,yo estoy tratando.Educate para que pueda rebatir,sin tener que recurrir a lo obscenidad.

Luis de New York
Luis de New York
Responder a  Luis de New York
3 Años hace

La ignorancia, es el peor enemigo de la humanidad

BLAH BLAH BLAH
BLAH BLAH BLAH
3 Años hace

El mismo blah blah blah. Este tipo o es pendejo o es un degenerao. necio o vividor de los incautos que caigan en su verborrea.

PONTE A ABRIR SANJAS Y CORTAR CAÑA PA’ QUE SEPA LO QUE ES TRABAJAR.

MAGA
MAGA
Responder a  BLAH BLAH BLAH
3 Años hace

Rosa, gonorrea en lo que tu tienes en el micro cerebro.