El descrédito como recurso de defensa
De la misma forma en la que un ciudadano plantea que hay gente que quiere justicia a su medida, igual parece que hay quienes desean opiniones a su talla, acorde por completo con su modo de pensar, si lo hacen o de ver las cosas, si de verdad las ven.
Un tema que levanta reacciones, sensatas y desaforadas es el Ministerio Público. Cualquier crítica a ese estamento, hace que fluya la personalidad irrespetuosa de algunos que no pasan de groserías y que al final no aportan nada concreto, contundente a favor de ese órgano y queda así sin sentido su defensa.
La justicia es justa y ya, cuando es un traje entallado, pierde ese nombre. Es amiga de la libertad de expresión, por tanto, no lo es de la difamación, y por antonomasia ni de esos que cuando no son complacidos con el abordaje, recurren al insulto, al desprestigio de gente que no conoce y lo hacen desde el anonimato.
Lo esencial es que los lectores que siguen a un articulista conozcan sus posturas y puedsn evaluarlas y llegar a conclusiones asidos de la verdad.
En mi caso, esta voz mia, muy mía, no está en venta, mi silencio tampoco. Por esto critico lo que está mal en el Estado sin importar quien esté al frente. Lo mismo con el sector privado. De igual modo, elogiar las acciones buenas sin que importe de dónde vengan.
Ojalá que todos los gobiernos me den motivos para resaltarlos siempre, que lo hagan significa que trabajan para cumplir con la población que los escogió y eso incluye la justicia, obvio.
Un buen deseo que creo todos anhelamos sea realidad es que toditos los funcionarios cumplan con su labor y sean bien portados, lo mismo el empresariado.
Amén.
jpm-am