El debate electoral debe ser institucionalizado en RD (2 de 2)
A propósito de declaraciones hechas por aspirantes a la jefatura del Estado, esta pregunta obligada: ¿Por qué hay candidatos, en el panorama político de República Dominicana, que se niegan a participar en debates públicos? .El aspirante que crea tener la más adecuada política electoral para aplicarla en caso de llegar a la Presidencia, no debe temer en ir a debates. Porque si usted cree que es la mejor opción para dirigir el Estado, entonces preséntela ante el pueblo votante. ¡Vaya al debate público!
Además de los debates, que son normales -parte de la institucionalidad democrática- en la política de Estados Unidos, las polémicas electorales en países de América Latina forman parte del sistema democrático.
Les di seguimiento a las recientes campañas electorales -que transmitió la cadena noticiosa CNN en Español- de Uruguay, Argentina y México…durante esos procesos electorales hubo encendidos debates por televisión en los que los candidatos presentaban sus propuestas.
En efecto, los debates son el escenario más idóneo, combinado con las caravanas y declaraciones públicas, en el que los aspirantes presidenciales pueden tener la oportunidad de convencer a sus seguidores.
En la primera entrega de este artículo plantee que el debate político-electoral debe institucionalizarse y que para que se logre tan importante objetivo democrática, el Congreso Nacional debería legislar y aprobar ese urgente proyecto político político-electoral.
Felicito -es la única institución dominicana que ha tenido esa iniciativa- a la Asociación Nacional de Jóvenes Empresarios (ANJE) por auspiciar el debate político.
Guillermo Julián, pasado presidente de ANJE, considera que el debate político es, como se plantea en este trabajo, necesario para fortalecer la democracia. Que en el debate, en los procesos electorales, radica el fortalecimiento del sistema democrático dominicano.
Que las personas que se proponen llevar los destinos de la nación tienen la obligación moral sobre sus propuestas y cómo abordarían los problemas básicos de la sociedad dominicana».
Entonces, que los aspirantes presidenciales vayan, sin miedo, al debate público. Que presenten sus propuestas, pero, además, que sepan que. en un debate público electoral se pueden ganar o perder unas elecciones.