El cólera es todavía una emergencia en Haití
HAITI.- La epidemia de cólera en Haití es aún «una emergencia» y creer que ese problema ha sido superado puede tener consecuencias «trágicas», alertó el coordinador de la ONU para esa cuestión, Pedro Medrano. «Me preocupa que los progresos enormes que hemos alcanzado hagan pensar que el problema está resuelto. No está resuelto. Pensar que lo está no solamente es un error, sino que además puede tener consecuencias trágicas», dijo el diplomático chileno en Washington. El diplomático, representante especial del Secretario General de la ONU, Ban Ki-Moon, para coordinar la respuesta a la epidemia de cólera, destacó los «espectaculares» progresos logrados por Haití en controlar el brote de la enfermedad. «El país tenía el año pasado 200.000 casos de cólera. De enero de este año a agosto, tuvimos 8.600, es decir que ha habido una reducción dramática de casos. Pero 8.000 casos de cólera es una emergencia», dijo.»Un caso ya produce pánico, pero Haití tiene 8.000″. Para Medrano, el programa de control de la epidemia de cólera está muy adelantado con relación al estado en que esperaban encontrarse en esta fecha, en parte por la participación del estado haitiano. El brote de cólera comenzó en Haití en octubre de 2010 y hasta marzo de 2013 ya había provocado la muerte de 8.592 personas, con más de 700.000 personas afectadas. El equipo de Medrano se había propuesto reducir el número de casos en 2014 a unos 45.000, pero redujeron aún más esa previsión, a unos 15.000, e incluso la tasa de mortalidad ya se situó por debajo del 1%. El problema fundamental del cólera, apuntó Medrano, es que su eliminación completa y definitiva requerirá un esfuerzo monumental para reconstituir y completar la infraestructura sanitaria del país, que ya era precaria y resultó destruida con el devastador terremoto de 2010. «En la década de los 90 hubo un brote de cólera que comenzó en Perú. Afectó 19 países y dejó 10.000 muertos. Pero en 10 años hicieron inversiones en sanidad, agua potable y atención en Salud. En Haití no tenemos eso», dijo. Por ello, Medrano está convencido que «la comunidad internacional tiene una oportunidad histórica de resolver problemas estructurales del país». Si no se mantiene un volumen constante de inversiones en la infraestructura haitiana, el caso «puede tener consecuencias serias para la paz y la estabilidad futura del país».En un documento, la oficina de la ONU en Haití alertó que si la respuesta de los donantes internacionales disminuye, «los avances conseguidos tan duramente quedarán comprometidos, y el cólera persistirá en áreas específicas». Medrano recordó que el gobierno de Haití delineó un plan de 10 años para erradicar definitivamente el cólera actuando tanto en la prevención y atención médica como en la modernización de su infraestructura sanitaria.Ese plan tiene un costo estimado en unos 2.000 millones de dólares. «Pero al ritmo que los aporten están llegando, vamos a precisar 50 años. Es necesario urgentemente aumentar el ritmo de los aportes para poder cumplir con el plan». FUENTE: la estrella de panamá