Egolatría, la peor enfermedad política
De diferentes maneras, muchos grandes intelectuales y figuras públicas alrededor del mundo y en diferentes épocas, han coincidido en que la ignorancia es atrevida.
Una persona inconsciente, dice y hace cosas terribles, sin medir las consecuencias, pues su falta de conocimiento no le permite estimar el alcance de sus actos.
No sucede lo mismo con los ególatras. Estos, regularmente son sumamente inteligentes y todos sus actos son minuciosamente analizados, pero partiendo de la premisa de que ellos y solo ellos son el centro del universo.
De ahí, que constantemente y a pesar de sus excelentes facultades cognitivas comentan errores. Uno detrás del otro.
El expresidente Leonel Fernández es un excelente ejemplo de este tipo de personas.
Otrora “una mina de oro” de donde se sacaban grandes lingotes intelectuales, sociales y políticos, hoy es solo un cascarón, donde algunos viejos mineros, pico y pala en manos, siguen desesperadamente hoyando con la esperanza de encontrar algunas pepitas que les sirvan para sobrevivir.
¿Puede alguien imaginarse al doctor Leonel Fernández anunciado que la Fundación Global Democracia y Desarrollo tiene que cerrar sus puertas por falta de fondos?
“Mejor muerto que sencillo” Como dice mi amigo Papatón.
El Dr. Fernández, en su apogeo político, no se conformó con instaurar esta fundación en Santo Domingo, sino que estableció hermanas gemelas en las ciudades de Washington y Nueva York, esta última, en el condado de Manhattan, para ser exactos.
Para que los dominicanos tengan una idea de cuanto cuesta un alquiler en este condado, el más caro de todos los Estados Unidos, les vamos a decir que en Washington Heights, uno de los barrios más pobres de esta ciudad, situado en la parte norte de la isla, la renta de un apartamento de dos o tres dormitorios anda en los alrededores de US$3,000.00 mensuales.
Esto ha provocado que los dominicanos y latinos en general estén migrando hacia el condado del Bronx, donde es más barato vivir.
¿Saben ustedes donde están localizadas las oficinas de la “Global Foundation for Democracy and Development”? Nombre en inglés de la Global, nada más y nada menos que en el 780 de la 3ra. Avenida, en el lujoso East Side de Manhattan, New York, a unos 600 metros de las Naciones Unidas.
Y la de Washington está en el 1629 K St NW, Washington, DC ¡A 600 metros de la Casa Blanca!
¡Ego al cubo!
¿Cuánto cuesta mantener unos locales de estas características, el personal de apoyo, materiales, etc.? ¡Una millonada en dólares!
Fuera del poder, por casi 8 años y solo sacando, no hay “Acumulación Originaria” que aguante.
Por lo tanto, se hacía perentorio buscar fuentes de ingresos a la mayor brevedad posible. ¿Qué hacer?
¡Voilà! Un partido político. Esa es la solución.
En ninguno de los cuatro grandes partidos se podía hacer. Mucho menos en el PLD de donde él era su presidente, entonces, renunciemos del partido morado de la estrella amarilla y busquemos una entelequia barata y con eso vamos a las elecciones.
Obtenemos el 5% de los votos y nos metemos en el mangú de los fondos de la Junta Central Electoral.
¡Capicúa! Conseguimos los fondos necesarios para seguir a flote y, al mismo tiempo, le hacemos la vida imposible a Danilo, tratando de desarmarle el país.
¡Que bellaco se ha dado la minita!
JPM/of-am