Percepción corrupción institucional en RD alcanza 65% población
SANTO DOMINGO (EFE).- La percepción de corrupción en las instituciones públicas en la República Dominicana aumentó hasta niveles del 65 % de la ciudadanía en 2016, aunque se mantiene por debajo de los niveles de la región, donde este indicador se sitúa en un 80 % del total de la población.
Así lo pone de manifiesto el informe Perspectivas Económicas de América Latina 2018 «Repensando las Instituciones para el Desarrollo», presentado hoy por el Ministerio de Economía del país Caribeño.
El informe está elaborado de manera conjunta por el Centro de Desarrollo de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), la Comisión Económica para América Latina y el Caribe de las Naciones Unidas (Cepal), y el Banco de Desarrollo de América Latina (CAF), en colaboración con la Comisión Europea.
En la República Dominicana, la calidad de gobierno se mantuvo estable durante la última década, con una puntuación de 0,32 en el Índice de Calidad del Gobierno, calculado con base en indicadores de corrupción, ley y orden, y calidad de la burocracia.
Esto sitúa al país debajo del promedio de la región latinoamericana (0.44), y de la OCDE (0.78). Aun así, el 55 % de la población expresó confianza en el gobierno nacional en 2016, superando considerablemente el promedio regional, del 29 % y el de la OCDE, del 37 %.
El estudio indica que la satisfacción de los ciudadanos con la educación pública es alta, con un crecimiento aproximado del 25 % entre 2010 y 2015 en la proporción de la población que dijo estar satisfecha o muy satisfecha al respecto, alcanzando un nivel del 82 % de la población.
En el mismo periodo, la proporción de la población que dijo estar satisfecha o muy satisfecha con los hospitales públicos se mantuvo constante, y la percepción de seguridad también aumentó.
Puntualmente, la proporción de la población que percibe que la seguridad ciudadana es buena o muy buena creció más de nueve puntos porcentuales desde 2005.
Los aumentos de la satisfacción de los ciudadanos son coherentes con las tendencias positivas en la movilidad social en la República Dominicana, donde se observa una creciente clase media e índices de pobreza en disminución.
El tamaño de la clase media (individuos con ingresos per cápita diarios entre 10-50 USD PPA) creció de un 19 % a un 29 % en el periodo 2009-2015.
Pese a este progreso, el gobierno aún tiene margen para mejorar, según el documento, donde se señala que es posible que la mejora en la capacidad redistributiva del país y la calidad de los servicios federales estén limitadas por la escasa capacidad de recaudación fiscal del gobierno.
Con una recaudación tributaria del 14 % del PIB, la República Dominicana se encuentra debajo del promedio regional (23%), y también es uno de los países de la región con la menor proporción de ingresos fiscales.
Para el conjunto de América Latina, el informe indica que, a día de hoy, el 23 % de la población aún vive por debajo del umbral de la pobreza, y alrededor del 40 % pertenece a la clase media vulnerable.
Sin embargo, también destaca la rápida expansión de la clase media como una de las principales transformaciones socioeconómicas de los últimos tiempos e indica que el 34,5 % de la población se podría considerar como clase media consolidada en 2015, por encima del 21 % en 2001.
El informe subraya que la confianza en las instituciones, así como la satisfacción con los servicios públicos se han deteriorado, debilitando de esta manera el contrato social en la región.
Por ejemplo, la proporción de la población satisfecha con los servicios de salud cayó de un 57 % en 2006 al 41 % en 2016, ubicándose muy por debajo de los niveles de la OCDE (cercanos al 70 %); también la satisfacción con el sistema educativo cayó del 63 % al 56 % para ese periodo.
El informe plantea que es necesario reconectar a las instituciones con los ciudadanos, respondiendo de mejor manera a sus demandas y aspiraciones, para fortalecer un modelo de crecimiento inclusivo y sostenible en América Latina y el Caribe.