Y conoceréis la verdad y la verdad os hará libres

imagen
EL AUTOR es político, periodista y mayor general retirado de la Policía. Reside en Santo Domingo.

“Y conoceréis la verdad y la verdad os hará libres” Juan 8:32

Hace 8 años escribí esta reflexión: “Nos crían pidiéndonos que digamos siempre la verdad, pero cuando la decimos todos se quejan, se enojan por esa verdad y pocos la soportan. Simbolizamos la diplomacia: el arte de mentir con elegancia, hablar bonito sin decir nada. Aquí radica la causa de los conflictos humanos, solo la verdad nos permite entendernos, las mentiras nos confunden y nos destruyen. No hay doctrina y filosofía más sublime que la verdad.”

El Estado y sus autoridades están obligados a usar la comunicación como un vínculo con la verdad para su pueblo. La comunicación establece ser un acto de entendimiento que nos ayuda a relacionarnos con amor al prójimo y de la misma debe promoverse la educación cívica con solidaridad social. Lamentablemente se usa como manipulación cínica para engañar, mentir y desinformar a la sociedad, patrocinada principalmente por las autoridades políticas y grupos de poder, pagando miles de millones de pesos que contaminan y corrompen a la mayoría de los comunicadores y sus medios, y alejando al pueblo de la verdad y la transparencia.

En su gran mayoría los políticos, los funcionarios públicos, religiosos, los empresarios, docentes, los padres o tutores, los comunicadores con sus medios y manejadores de redes sociales han prostituido la comunicación y el manejo de las informaciones, poniendo precio a la más mínima opinión como instrumento de manipulación social.

Podríamos decir que la Biblia más allá de ser un libro sagrado con pasajes legados por Dios, es un libro de interpretación usado para la manipulación y adoctrinamiento de masas y así facilitar pastorear a las personas por los grupos de poder que siempre han existido y de los cuales gran parte de las religiones se incluyen.

Las religiones y sus representantes o predicadores siempre han sido parte de los poderes formales o fácticos que dirigen el mundo, formando parte activa del control social, de la explotación, abusos e injusticias que subyugan la humanidad, impidiendo vivir en democracia plena donde prevalezcan los derechos y libertades en igualdad de condiciones.

La democracia está amenazada y la patria en peligro. Invitamos al pueblo a unirse para enfrentar la tiranía, las mentiras, la corrupción y el robo público con impunidad que se apoya en la cúpula peledeísta y los principales actores de los poderes fácticos, perjudicando la mayoría de la población que aspira a vivir en un país decente y con justicia transparente.

En cada esquina y en muchos hogares de cada pueblo de nuestra República existen conspiradores que apuestan a los privilegios y otros a permitirlos con servilismo, por migajas, justificando la explotación y esclavitud voluntaria que daña a las mayorías y promoviendo las injusticias sociales.

Hemos decidido hacer política duartiana con el compromiso de servir y trabajar por el bien común sustentado en la ley, la verdad y la decencia. Si tú me das tu voto, yo haré realidad tus sueños, nos comprometemos a liderar una gran revolución social para que desde el Estado trabajemos juntos en construir una República Dominicana de éxitos que garantice las libertades y derechos; donde cada quien sienta la satisfacción de sus necesidades en igualdad de oportunidades y condiciones.

Las mentiras y los engaños también la practican los filántropos y ONG. Lamentablemente la mayoría de las personas que supuestamente dicen o se promueven trabajar por el bien común a través de la filantropía, lo usan para vivir de ello, como un instrumento de beneficio, no con real vocación de servicio y amor al prójimo, sino todo lo contrario, son falsos profetas, falsos patriotas y falsos filántropos.

Alguien dijo: “Entiendo que la disyuntiva para las elecciones del 2020 no es que si Leonel o Danilo, los dominicanos estamos cansados de esta perversidad desde el poder. Propongo que votemos en contra del PLD, sin importar quien sea su candidato(a) preferido”. No comparto ese criterio, es tiempo de que la República Dominicana y cada elector vote con conciencia y de manera inteligente exigiendo transparencia y probidad a los candidatos, que la ética y la moral se usen como principios de unidad o coalición de los opositores.

Un voto no tiene precio, valora tu voto porque en cada voto está contenido tu futuro, el de tu familia y el de las generaciones venideras.

Nuestro pueblo merece y necesita un hombre que venga de las entrañas del pueblo, confiable, responsable y comprometido con el pueblo, para el pueblo y por el pueblo. Sobe todo que garantice las oportunidades para desarrollar los talentos en igualdad haciendo realidad los sueños de cada dominicano y cada servicio o necesidad básica en calidad y excelencia sin exclusión. Electores del 2020 no se equivoquen, recuerden que la mayoría de la imagen pública que presentan los candidatos a puestos electivos en la República Dominicana es falsa, inventada, simulada, engañosa y llena de mentiras.

Hablemos siempre con la verdad y hagamos de la verdad nuestra filosofía de vida. La mentira es sinónimo de político tradicional, orcopolita, miedo, engaño, estafa, robo, corrupción, abuso, injusticia, frustración, sufrimiento, violación de derechos y libertades.

of-am

Compártelo en tus redes:
ALMOMENTO.NET publica los artículos de opinión sin hacerles correcciones de redacción. Se reserva el derecho de rechazar los que estén mal redactados, con errores de sintaxis o faltas ortográficas.
0 0 votos
Article Rating
Suscribir
Notificar a
guest
0 Comments
Comentarios en linea
Ver todos los comentarios