Voces de la calle: Rumor en voz alta de un cine criollo que crece
POR FATIMA ALVAREZ
Motivada por apreciar la actuación de un amigo, fui a ver ”Voces de la calle”, quedando gratamente impresionada. Sin pretensiones de crítica de cine, este trabajo cinematográfico recoge múltiples experiencias que se viven cotidianamente en los barrios marginados, entre jóvenes que buscan mejorar sus condiciones de vida a través de las opciones que más a mano tienen, como es el caso de la música urbana. Solo que para alcanzar el éxito al que aspiran, el entorno social les exige mucho más que condiciones vocales o de composición musical, arrastrando en múltiples ocasiones, y contracorriente, a jóvenes inexpertos, sin guías y con desmesurado afán de alcanzar fama a toda costa.
Las actuaciones de Deivy de León, Axel Mansilla y Vladimir Acevedo, principales protagonistas, se conjugan de forma efectiva con las de Melymel, Vicente Suriel y una batería de artistas urbanos, para dar vida a tres jóvenes de un barrio pobre que unen su talento artístico, con el objetivo de “dar el salto” y salir de la pobreza.
Los chicos, con objetivos, valores y principios distintos, pero con un mismo interés de destacar, se ven envueltos en una red de corrupción que abarca a mandos medios de la Policía Nacional, que utilizan su poder para acorralarlos, promotores artísticos que se venden y venden los jóvenes a empresarios disqueros perversos, emisoras radiales que abren puertas solo si obtienen payolas y todo un sinnúmero de realidades que viven en primera persona y sin cámaras de cine miles de jóvenes marginados de nuestra sociedad.
Las actuaciones de Vicente Suriel y Melymel resultan convincentes y dan un equilibrio que resulta diametralmente opuesto al de los jóvenes protagonistas. A mi juicio, ambos actores fueron seleccionados para sus respectivos papeles, debido a que han demostrado poseer en sus personalidades cierta similitud con las de sus respectivos personajes: arrojo, desenfado y dispuestos al riesgo.
Como cine en crecimiento, me gustaría empezar a ver personalidades cinematográficas deslindadas de sus personalidades reales, lo que, a mi juicio, permitiría perfilar de forma cada vez más profesional, como ocurre en el teatro dominicano, al personaje de la persona.
En cuanto al papel de los chicos, me parece interesante que el director ahonde más en el pensamiento y sentimiento, en la historia personal de estos tipos de personajes, lo que los haría mucho más creíbles, de lo que ya lo es, debido a la identificación que humanamente podría generar.
En conjunto, Voces de la calle es una buena muestra del crecimiento de nuestra industria cinematográfica.
Ficha Técnica:
Hans García – Director
Emilio Pérez y Robert Lamarche – Guión
Jaime Gómez – Fotografía
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