Turismo de RD: expuesto a la decisión de la FED (OPINION)
Es innegable que la dinámica del turismo internacional, incluido el de la República Dominicana, está sujeta a factores externos como las fluctuaciones monetarias, especialmente del dólar, y a nuestro comportamiento económico.
Desde mayo, varios miembros del Comité Federal de Mercado Abierto de la Fed han advertido sobre un posible endurecimiento de la política monetaria si persisten los riesgos inflacionarios. Aunque en la reunión del 30 de abril al 1 de mayo la Fed mantuvo la tasa de interés entre 5.25% y 5.50%, el presidente Jerome Powell sugirió que un nuevo incremento es improbable, recomendando posponer cualquier recorte en las tasas si la inflación continúa.
Este contexto de incertidumbre económica, tanto global como local, podría tener repercusiones para el país si no se implementan reformas adecuadas. Miguel Collado Di Franco, vicepresidente ejecutivo del Centro Regional de Estrategias Económicas Sostenibles (CREES), anticipa que la Reserva Federal de EE.UU. intervendrá antes de septiembre, dada la debilidad económica y las caídas en los mercados globales.
El economista Collado prevé que el Sistema de la Reserva Federal (FED) reducirá las tasas de interés para evitar una posible estanflación, caracterizada por bajo crecimiento económico, deterioro del empleo e inflación alta. Cualquier ajuste podría afectar sectores clave del país como el turismo, las zonas francas y las remesas, manteniendo altos los precios nacionales.
Atención
Estas consideraciones obligan a estar atentos a cómo una reducción de tasas de la FED podría impactarnos, aunque también podría hacer más atractivos los activos en pesos dominicanos, permitiendo al Banco Central reducir su tasa de interés. Esto aliviaría la presión sobre el dólar y mejoraría las condiciones de financiamiento, beneficiando tanto a negocios como a familias.
Por ejemplo, si la FED adecúa su política monetaria, los efectos sociales y económicos podrían ser significativos tanto a nivel nacional como global. Entre los impactos posibles se incluyen la estimulación del crecimiento económico, fluctuaciones en el mercado de valores y cambios en la moneda, con implicaciones para el comercio internacional y los precios de las materias primas.
Socialmente, estas adecuaciones podrían influir en la creación de empleo, el poder adquisitivo y la confianza del consumidor, aunque también podrían aumentar las desigualdades socioeconómicas, dependiendo de cómo se implementan las políticas.
Es sabido que el turismo opera con un modelo de ventas anticipadas, con reservas que se realizan con hasta un año de antelación. Si la FED cambia su política monetaria a partir de septiembre de 2024, el impacto podría extenderse a las temporadas turísticas de 2025 y 2026, afectando las reservas futuras. Un aumento en las tasas de interés podría encarecer los costos de financiamiento para los viajeros norteamericanos, nuestro principal mercado emisor, reduciendo su capacidad de gasto y su interés en realizar reservas anticipadas. Esto podría disminuir las proyecciones de ingresos para las próximas temporadas, impactando la estabilidad financiera del sector.
En vista de que el turismo es un sector primordial para la economía dominicana, las llegadas de turistas desde América del Norte, que hasta junio de este año alcanzaron los 2,626,603 visitantes, podrían disminuir si la política monetaria estadounidense reduce el poder adquisitivo de los viajeros. Esto podría afectar negativamente los resultados al final de este año en comparación con el año pasado.
En 2023, sectores como el turismo, las remesas y la inversión extranjera directa generaron más de 24,367 millones de dólares para la economía dominicana, solo el turismo generó US$10,000 millones.
Cualquier modificación en la política monetaria de la FED podría producir efectos significativos en estos sectores primordiales. Por lo tanto, es imperativo que el sector turístico, clave para la economía dominicana, se mantenga alerta a cualquier variación.
Es imprescindible anticipar los efectos potenciales y cómo podrían alterar nuestra estabilidad financiera y turística en los años 2025 y 2026. En definitiva, cualquier cambio en las directrices en las políticas de la FED podría comprometer el futuro del turismo y, por ende, de la economía dominicana en general.