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Recomposición de fuerzas
La República Dominicana está viviendo ahora un momento preelectoral, en que las organizaciones y los líderes en el campo político buscan nuevos espacios, rompiendo viejas alianzas o creando nuevos acuerdos con miras a asumir posiciones en el Estado. De ahí las dificultades que experimenta el Bloque Progresista del PLD para mantener su unidad y los esfuerzos que se realizan desde el PRSD por la reunificación del PRD. En ese campo de ideas se suma la interesante propuesta –ya criticada- hecha por el dirigente de la tendencia de Luís Abinader, Antonio Peña Guaba . Según dicha propuesta, el PRD que encabeza Miguel Vagas Maldonado y la Convergencia que maneja Hipólito Mejía, deben pactar acuerdos electorales para enfrentar al PLD. Si semejante propuesta se materializara y operara bajo la experta conducción de Hatuey De Camps, sería una fórmula ganadora, puesto que atraería no solo a los partidos de oposición sino además a la mayoría de los sectores sociales disgustados con el gobierno. Lo contrario sería seguir avanzando hacia una derrota segura.Aunque en estos momentos dicha proposición parece una utopía por el antagonismo imperante entre las partes y el soplo insidioso de sectores del PLD, si se deja de lado el sectarismo, levantado como muro que separa a la oposición del poder, la misma es posible. Sería un arreglo entre perredeístas y aliados. De no hacerlo, pronto tendremos un PRD ya no dividido, si no en descomposición, con sus masas en desbandada.Las enseñanzas del Doctor Peña Gómez en ese sentido fueron tan profundas que, en busca de asegurarle a su partido la parte de poder posible, no vaciló en estar de acuerdo con pactar con el presidente Leonel Fernández Reyna, la composición del Congreso, sin importarle que fue en su favor que se elaboró aquella diabólica fórmula de Balaguer y Bosch para cerrarle el camino de la victoria y pretender llenar de lodo su nombre.Según el Dr. Peña Gómez, en conversación con el Lic. Temístocles Montás, por encargo del presidente Leonel Fernández, “se analizó la posibilidad de una alianza mayor entre nuestros dos partidos que tomará en cuenta al Reformista Social Cristiano”. “Se trata de un tema de trascendental importancia que hemos comenzado a analizar, aunque convencidos de que lo mejor para el país y para la democracia fuera una concurrencia separada de cada partido a las elecciones”. “La apertura de un diálogo entre el PRD y el PLD o entre el PRD y el presidente Leonel Fernández tiene el mayor interés para el país y para la democracia, porque se trata de dos organizaciones políticas que no obstante tener el mismo origen, han sido adversarias irreconciliables.” Entonces, teniendo las partes en que se divide el PRD el mismo origen y la misma necesidad de acceder al poder e imponer un programa común en beneficio de la sociedad, no debe ser imposible que acuerden su unidad, creando una nueva correlación de fuerzas en que, por encima de la popularidad del presidente Medina , el Estado y los tesoros acumulados legalmente o por la corrupción, se pueda vencer al PLD. b_gamundi27@yahoo.es
