Miguel Reyes: perseverancia revolucionaria
En el San Francisco de Macorís rebelde y combativo de los primeros años de la década de los 70, el de las contundentes movilizaciones estudiantiles, los constantes micro mítines relámpagos, las ocupaciones de tierra y las grandes jornadas huelgarias que estremecieron la conciencia nacional, el Macorís que con coraje enfrentaba la sangrienta represión balaguerista de post guerra, el San Francisco de gentes democráticas y solidarias, que protegían con esmero a los que combatían por la libertad y el progreso, conocí a El Enllave o Santo, empapado en sudor, caminando presuroso por una calle entonces polvorienta del sector Rabo de Chivo, al concluir su participación en un micro mitin de los realizados en la etapa clandestina. Cuadro fundador de la Línea Roja del 14 de Junio, organización que debido al trabajo de Milton Diloné, Yiyo Sánchez y Ernesto Polanco había ganado prestigio y logrado establecerse en la ciudad del Jaya como una de las organizaciones mas firmes y consecuentes en defensa del ideal revolucionario abrazado por una gran parte de la juventud de la época, El Enllave fue uno de los cuadros revolucionarios que procedentes de otras regiones fueron a residir al Macorís bajo las garras del terror, para dirigir y fortalecer el trabajo de esa entidad madre del PTD . En la clandestinidad, con entrega y firmeza, con entusiasmo y arrojo, Santo desarrolló su labor revolucionaria en S.F.M,. bajo condiciones difíciles y los sobresaltos de la tenaz represión, obteniendo logros importantes en la consolidación de su organización y en el crecimiento de la influencia de la misma en el movimiento sindical, estudiantil, campesino, clubístico y barrial; en múltiples ocasiones expuso su vida y su seguridad, pero nunca flaqueó ni retrocedió, junto a refuerzos como Mario (Macana), Vinicio y Chago, entre otros, dejó sus huellas para siempre en San Francisco de Macorís, constituyéndose en el único cuadro de los enviados que logró sobrevivir al terror y permanecer en esa ciudad. Santo, El Enllave o Santiago José Miguel Reyes Márquez -Guelo- como lo conoceríamos después en la lucha legal, fue uno de esos jóvenes que se incorporó temprano a la lucha política en el Movimiento Revolucionario 14 de Junio, bajo el liderazgo de Manolo Tavárez Justo, participando en la guerra de abril del 1965, en la fundación de la Línea Roja del MR 1J4 y en la fundación del Partido de los Trabajadores Dominicanos –PTD- del cual fue miembro de la Comisión Política y de su Dirección Nacional hasta el día de su muerte. Apasionado en la defensa de sus ideas socialistas y constructor de sueños por un mejor país, quienes compartimos responsabilidades políticas con él, en la clandestinidad y en la legalidad, en San Francisco y en otras ciudades, conocemos de su trabajo, de su empeño, de su ejemplo de incorporar la familia a la lucha y de su capacidad para interpretar la realidad de la nación y elaborar y definir políticas en función de las nuevas realidades cambiantes; su trato afable y su humildad les permitieron jugar un rol de buen dirigente campesino integrado al campo, buen soldado constitucionalista en las trincheras del honor en 1965, buen organizador clandestino, buen sindicalista, buen propagandista y agitador de ideas, buen ejecutor de las tareas electorales, buen productor de programa televisivo, buen padre, buen esposo, buen amigo, buen compañero, buen vecino y respetado dirigente revolucionario. En la postrimería de su carrera política, afectada su salud, mermadas sus fuerzas físicas por el peso de las enfermedades, Miguel Reyes -Guelo- no podía laborar con el ímpetu y rendimiento de antes, pero nunca dejó de luchar, nunca dejó de defender lo que creía, nunca dejó de serle fiel a sus ideales, sus sueños y anhelos de juventud; su vida fue dedicada a servir a los de abajo, a labrar un futuro luminoso para los desposeídos, aportando su granito de arena para la construcción de una Republica Dominicana y un mundo mejor, con independencia, justicia social, libertad, soberanía, progreso y bienestar para las mayorías; por eso, aunque ha dejado de existir físicamente su lucha, sus esfuerzos en pos de la causa revolucionaria, su ejemplo, su constancia, su acción de toda la vida viven en nuestros recuerdos y nos sirven de banderas. Sin lugar a dudas dos palabras definen con exactitud su trayectoria, Miguel Reyes es sinónimo de perseverancia revolucionaria. arzenosilvio@hotmail.com