¿Habrá más PLD?
Para diversos sectores económicos, políticos y sociales la vida política nacional de hoy se caracteriza porque todas las salidas parecen conducir a una nueva victoria del Partido de la Liberación Dominicana en las elecciones del 20 de mayo del 2016.
El ambiente político y los movimientos erráticos y miopes en términos de estrategia política de algunos partidos políticos de oposición que pudieran ser opción de poder para la contienda cívica del próximo año vienen a reafirmar, según dicen esos sectores, que el predominio y continuidad del peledeismo gobernante seguirá.
Para nadie es un secreto que hace apenas unas semanas el panorama político partidario traslucía una sensación de que en la República Dominicana era inminente el desplazamiento del PLD de la conducción del Estado y hoy en cambio, la realidad es otra cosa.
Sin embargo, todo ese sentimiento y percepción que se observaba en la población hace un tiempo se ha venido borrando como por arte de magia y todo parece indicar que no habrá sorpresas. La maquinaria política e ideológica peledeísta se afianza en el escenario político de cara a las próximas elecciones nacionales como opción victoriosa, al parecer.
Hay que decir, no obstante, que ese giro favorable que se observa hacia el partido de la estrella amarilla no se produce por generación espontánea sino que obedece a una serie de factores coyunturales que han sido finamente trazados y manejados por el liderazgo experimentado de esa organización.
Por ejemplo, la táctica peledeísta y del Gobierno de aliarse a un sector de la oposición, en este caso, del Partido Revolucionario Dominicano para lograr los votos necesarios en la Cámara de Diputados para producir la reforma constitucional y establecer la un nuevo mandato al presidente Danilo Medina fue un elemento importante.
Luego, también lo fue el anuncio público hecho por el presidente del PRD, Miguel Vargas, donde daba cuenta de que ciertamente entre el partido morado y el blanco se habían establecido compromisos concretos para un acuerdo político de unidad nacional.
Esas y otras jugadas políticas que aún no se conocen llevadas a cabo por el Partido de la Liberación Dominicana, unidas a la ausencia de un liderazgo opositor racional y progresista que haga ¨Diana¨ con los anhelos y sentimientos de los electores son elementos que vienen a conjugarse para uno preguntarle a ustedes, amigos lectores, ¿Habrá más PLD 2016? …