Andar en Metro por NY
NUEVA YORK.- La ciudad de Nueva York no necesita mucho prólog es el sueño moderno de Occidente, la entrada al Nuevo Mundo. Para entender la metáfora es suficiente mirar como los edificios intentan “rascar el cielo”, es el titánico esfuerzo humano detrás de una pretensión semejante.
Pero la Gran Manzana no solo se explora hacia arriba; el juego se proyecta hacia abajo. En las profundidades se extiende la ciudad subterránea de túneles y estaciones de Metro que conectan a la megaciudad.
Como un pulpo diligente, el sistema con más de una docena de líneas une a todos los universos que le permiten a la metrópoli jactarse de su multiculturalidad. Es un juego de teletransportación que permite, cada vez que sale a la superficie, aparecer en un mundo distinto. Nueva York no se circunscribe solo a Manhattan: Brooklyn, Bronx, Queens y Staten Island son los cuatro boroughs (distritos) que completan el collage.
Hay muchos lugares que puede conocer, solo necesita bajar al subterráneo y comprar su ticket. ¿El punto de encuentro? El reloj de la Grand Central Station/Terminal. La estación más grande del mundo y el lugar de cita de muchos neoyorquinos.
Harlem
En el norte, lejos del área financiera, los rascacielos y las avenidas lujosas, está Harlem. Es considerado parte de la isla de Manhattan y es el barrio afroamericano por excelencia. Allí se concentra una buena parte de la historia y la cultura que han dado vida a Nueva York. También es el hogar de la gastronomía Soul Food, comida típica que proviene del sur de Estados Unidos.
Con los años se han mejorado las condiciones de seguridad y se ha dado acceso a la actividad turística. Ahora las agencias ofrecen excursiones por el General Memorial, Puente George Washington y el Apollo Theatre; el escenario que vio triunfar a varios de los grandes: Michael Jackson, Ella Fitzgerald, Billie Holliday, entre otros.
Pero el plato fuerte es asistir un domingo a las 11:00 am a una ceremonia gospel en la Abyssinian Baptist Church. Una experiencia auténtica de canto, aplausos y fe. ¡Aleluya!
Brooklyn
Después de Manhattan, es el distrito más popular. Brooklyn es la zona más poblada, hay de todo para todos los gustos. Varios personajes famosos han nacido o vivido en sus vecindarios, es el paraíso de los hipsters y los artistas.
El borough está lleno de cafés, restaurantes, galerías y mercados de productos orgánicos o de antigüedades. Entre algunas de sus atracciones están: Coney Island, el Brooklyn Museum of Art y el Brooklyn Brewery, una fábrica de cerveza.
Abril es una época interesante para visitar esta zona, el Brooklyn Botanical Garden tiene una colección de cerezos en flor. Con la llegada de la primavera se engalanan y, al igual que en Japón, se celebra el espectáculo en un festival llamado Hanami.
Bronx
Tradicionalmente conflictivo y con una historia controvertida de violencia y criminalidad, el Bronx parece ser uno de esos lugares para no visitar. Sin embargo, en los últimos años el distrito ha dado un giro importante y el factor seguridad ha mejorado exponencialmente.
La cuna del hip hop tiene algunos imperdibles como el Bronx Zoo, el mayor parque zoológico de Estados Unidos. Si es amante de la buena comida, Arthur Avenue es una buena opción. Este secreto bien guardado por muchos neoyorquinos es actualmente considerado la real Little Italy de Nueva York. Sus locales han sido reseñados con elogios por la Guía Zagat.
Para los fanáticos del beisbol está el Yankee Stadium. Pero tomen sus previsiones si se acercan a esa área, está en la zona sur del Bronx que aún es complicada y decadente.
Queens
El distrito más grande y con un área multicultural que destaca por la presencia de muchos centros de arte es Queens. Sirve de hogar a los Mets de Nueva York y tiene su propia ruta turística del jazz, que incluye la casa de Louis Armstrong.
Cosas que ver: el parque Flushing Meadows Corona, el American Museum of the Moving Image –dedicado al cine y la televisión–, el Centro de Arte Contemporáneo PS1 y el 5Poinstz, en cuyos alrededores hay una zona completa de graffitis.
El distrito acoge a la mayor comunidad china de la ciudad, aunque es menos turístico que el Chinatown de Manhattan. No obstante, si busca una experiencia más auténtica y quiere probar muy buena comida, pase por alguno de sus locales. Joe Shanghai (136-21 37th Av. Flushings) es una buena opción. Allí puede probar los dumplings rellenos de sopa u otro de los curiosos manjares del menú.
Ferry a Staten Island
El distrito más meridional y más desconocido tal vez no tenga las atracciones y costosos espectáculos de sus vecinos, pero tiene a disposición espacios verdes y lugares históricos. En la isla se conservan más edificios coloniales que en cualquier otro de los boroughs. Se puede llegar a través del ferry gratuito que conecta con Manhattan.
No deje de acercarse al Historic Richmond Town, un pueblo rural restaurado con edificaciones del siglo XVII. También vale destacar el Fort Wadsworth, un fuerte que sirvió para proteger a Nueva York de las incursiones de flotas enemigas.
Para tomar en cuenta
Tome la línea 6 del Metro dirección Brooklyn Bridge/City Hall –la última parada dirección sur–, pero no se baje. El tren da la vuelta y podrá ver una estación inactiva desde 1945
Revise con atención las opciones del sistema de transporte. Si su estadía supera los 7 días puede comprar la Metrocard con viajes ilimitados