Marileidy unió al país (OPINION)
Una de las virtudes más apreciables en la actividad deportiva es la solidaridad que se concita alrededor de un equipo o atleta en particular, dejando de lado diferencias políticas, sociales o religiosas.
Este fenómeno social acaba de verificarse con la hazaña de una dominicana de origen y vida tan humildes que pocos de los que hoy la exaltan y pelean por figurar a su lado en una foto, les hubieran prestado atención antes de sus grandes éxitos deportivos.

Ahora todos quieren que sus nombres o empresas sean asociados a la beldad de ébano y por ello ofrecen desde una casa totalmente amueblada, correcta y oportunamente rechazada, grandes y millonarios obsequios, que deben ser cuidadosamente ponderados, hasta las absurdas ofertas de pizzas y helados por un año.
Con estos ofrecimientos se busca relacionar el nombre propio o comercial a una figura que, gracias a su determinación y apoyo de su familia, el COD, entrenadores, CRESO y la Aviación Militar Dominicana, brilla en el olimpo deportivo mundial.
Cabe destacarse el apoyo recibido del Ministerio de Deportes desde gestiones anteriores al gobierno del presidente Luis Abinader quien rompió los parámetros internacionales al garantizarle 15 millones de pesos a los medallistas de oro en las pasadas olimpíadas de París.
¡Salve gacela de ébano!
jpm-am

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