INFORME TURISTICO: Esperanza en el mundo de los cruceros
El fallo solo aplica para los barcos que salen o llegan a los puertos de Florida y se produce mientras los nuevos casos de coronavirus y las hospitalizaciones en Florida se han disparado. Según las reglas federales, los barcos solo podían recibir pasajeros si las líneas de cruceros cumplían algunos requisitos como establecer laboratorios de pruebas para detectar COVID-19, realizar viajes de prueba, mantener el distanciamiento social y establecer viviendas en tierra para poner en cuarentena a los pasajeros. Pero las autoridades de Florida sostienen que esos lineamientos solo permitían que navegara una fracción del número normal de barcos.
No están claros todavía los pasos que puede dar la industria de cruceros tras el fallo judicial en su favor.
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MÁS ALLÁ DEL SOL Y PLAYA
El responsable del Grupo Barceló, que inauguró en 1985 el Barceló Bávaro Beach Resort, el primer resort de una cadena española en Punta Cana, dijo que esta empresa está abierta a ampliar horizontes en este contexto, según señaló en su intervención en la IX Edición del Curso Prensa y Poder, organizada por la Ciudad de la Educación San Gabriel (Burgos, España). El evento fue dedicado este año al tema de “El empresariado y el emprendimiento tras la pandemia” y contó con el apoyo del Grupo Educativo CEF.- UDIMA, casa matriz de CEF.- Santo Domingo.
Para el empresario español, no hay duda de que, pese a la pandemia, el turismo seguirá creciendo, aunque lo hará “de forma distinta y desproporcionada dependiendo de la geografía a la que nos refiramos”. Así, señaló que Asia, tanto por demografía como por crecimiento de la clase media, se convertirá en “el principal polo de actividad turística”, cuando históricamente lo ha sido Europa y más aún América Latina, particularmente México y el Caribe.
Citó el turismo en España como una “historia de éxito”, pero contestó a quienes proponen relegar a este sector económico como lo que es hoy, preponderante para la economía española, que “cuando la actividad se recupere, a este mundo no le pasará nada si España deja de recibir 85 millones de turistas, pero seguramente le pasará mucho, y no bueno, si no recuperamos ese nivel de actividad en el conjunto de nuestro país”. Porque “no puede haber recuperación económica y social en España sin turismo en los dos o tres años siguientes”, sentenció.
Con carácter general, Simón Pedro Barceló aseveró que, “de lejos, el sector turístico está siendo el más afectado por la crisis derivada de la pandemia”. El 2021, auguró, seguirá siendo “un año malo” desde el punto de vista turístico, por debajo del 50 % de las cifras de 2019, aunque con matices: “cuando más internacional es un destino, será peor. Cuando más demanda de mercado nacional haya, mejor le irá”.
Y fue en este contexto en el que habló del turismo interior como salvaguarda, y en el que, aun refiriéndose solo a España, destinos internacionales podrían mirarse en el espejo en una doble dirección: potenciando su turismo interior, al tiempo que abriendo una vía más cultural e histórica al exterior. “Compañías turísticas como la nuestra podríamos hacer más”, reconoció el empresario español en cuanto a mostrar la riqueza cultural del país, porque, admitió, “es muy fácil vender vacaciones a Baleares, Canarias o incluso el Caribe y resulta muy difícil otro tipo de actividad”.
“Entre las iniciativas que podemos hacer de cara al futuro debería entrar una formación a nuestros agentes de viaje para que conocieran de forma más detallada y de acuerdo con las instituciones locales” la riqueza más singular de cada destino. “Yo encantado de intentarlo. Nos viene muy bien tener productos nuevos con personalidad diferente”, concluyó.