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Vías para un 911 eficaz
Pese a ser la seguridad ciudadana uno de los principales eje del gobierno del presidente Danilo Medina, estudios realizados por el Consejo Regional de Desarrollo, Inc, (CRD), arrojan que los resultados obtenidos en tan importante propósito, no han sido los proyectados, dado los altos niveles de inseguridad que arropa todo el país, al constituirse los delincuentes en sus acciones en más rápidos e inteligentes que todos los que anhelamos la paz. En procura de soluciones efectivas a tan gravísima problemática, el CRD entiende, que se debe asimilar que la sociedad se está organizando en redes, como son Facebook, Instagram y Twitter, las cuales están moviendo la misma hacia los valores, construyéndose por medio de ellas pacientemente un entorno social que se mueve hacia la gratitud y hacia un mayor grado de sanidad social, siendo por tanto las mismas instrumentos esenciales que debemos recurrir para soportar nuestra seguridad ciudadana. Considera en los referidos estudios, que si bien es cierto que la democracia nació para crear un ambiente donde la familia y sus instituciones puedan crecer en valores como el amor y la gratitud, pero hay que tomar en cuenta que en la misma se mueven grupos y personas insensatas que no creen en valores, resultado de importancia capital la plena implementación del sistema del 911, para consolidar la barrera que debemos edificar para controlar las conductas antisociales, el cual en un país de escasos recursos como el nuestro, debemos eficientizarlo empleando la comunicación masiva, fácil y de muy bajo costos que nos permiten las redes sociales. Al establecer el 911 hemos tomado una decisión inteligente para garantizar nuestra seguridad ciudadana, sin embargo, hemos creado un 911 caro y limitado geográficamente, haciéndose necesario, conforme a la dirección técnica del CRD, que nuestras autoridades gubernamentales se involucren en lo inmediato en crear un sistema 911 ligero, barato, apropiado a nuestras condiciones económicas, pero tan eficiente o más que el de los países desarrollados, ya que, copiar y establecer el 911 sin innovación y creatividad, no vale la pena. La ruta que se propone, es dar paso a un plan inmediato, con la creación en todo el territorio nacional de un 911 ligero, integrado por la policía y los organismos de seguridad del Estado, dejando para un futuro otros componentes, en cual se dote a la policía y agentes de seguridad ciudadana de un sistema de radio y computadoras integrada a las redes sociales, que les permitan llegar a la escena del crimen en el instante en el que se desarrolla. En dichos objetivos, el CRD estima saludable que los ayuntamientos, la Liga Municipal y el gobierno central, asuman la propuesta, a fin de permitirle a nuestra nación, establecer un 911 sencillo, innovador, creativo, barato y policial. Un 911 de motores, radios, computadoras y redes, que funcione en cada distrito rural y urbano del país. Las tareas y metas propuestas, debe ser un compromiso que debemos asumir todos los dominicanos y las dominicanas junto a nuestras instituciones, para lograr que deje ser el denominador de nuestro diario vivir, por ejemplo, lo que pasó hace dos semanas en el municipio de Castillo de la provincia Duarte, en el cual dos familias trabajadoras y honestas, después de ser sorprendidas en sus hogares y ser torturadas sin piedad por malhechores, también les tomaron sus vehículos, paseándose por la provincia durante horas sin que la policía los detectaras. La Policía Nacional y otros organismos de seguridad del Estado, estàn haciendo un gran esfuerzo por ser instituciones dignas de un régimen democrático, pero estos no tienen los recursos para una respuesta rápida como lo exigen los tiempos para llegar a los hogares y demás lugares cuando están ocurriendo actos delictivos, siendo de relevante importancia acoger las recomendaciones del Consejo Regional de Desarrollo, Inc. (CRD), para subsanar lo indicado y permitir que nuestra seguridad ciudadana sea fuerte e inquebrantable, y a su vez, nuestras familias basadas en valores se sientan seguras y en paz.