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Viene una reforma tributaria?
Resulta obvio que el Estado requiere mayores contribuciones fiscales para invertir más en los servicios básicos que necesita la nación, así como para mejorar los míseros salarios de médicos, policías y otros empleados públicos.
Eso no puede esperar. Los primeros 3 meses del 2015 indican que no habrá superávit fiscal, ni tributario en base a estimaciones presupuestadas. Son estimaciones muy altas en un país donde todos tienen un padrino.
Pero para cultivar un clima que haga propicia una reforma tiene que comenzarse por una disminución drástica y mejor sanción de la corrupción, del nepotismo y del clientelismo y control con transparencia de los ingresos y gastos del tren gubernamental.
Crear el clima necesario para impulsar una reforma tributaria viene adherida a drásticas medidas de ahorro desde el Palacio hasta los ayuntamientos y aquí eso no se ve.
Combatir la evasión impositiva con un sistema abrumador y costoso, como el que tenemos en Quisqueya debe mejorarse, propongo tener muchos contribuyentes, a todos sin excepción, que paguen poco, y ese poco, sea tan poco que no tenga sentido asumir el riesgo de ocultarse y entrar en componendas con inspectores.
Aumentar las recaudaciones y bajar los gastos es la única salida al descuadre de ingresos y gastos. Es el mal llamado hueco fiscal 2015, debido, según Hacienda y técnicos extranjeros a la baja presión tributaria para cubrir todas las necesidades de Estado en R.D.
Una propuesta viable para consideración de todos es subir impuestos al que tiene y ostenta con orgullo su riqueza. Proponemos que quienes tengan activos netos superiores a RD$200 millones de pesos, 200 milloncitos dominicanos, paguen un nuevo impuesto y dejemos el itebis, el selectivo y todas las demás tasas y gravámenes como están, según última reforma del 2012.
Necesitamos una reforma fiscal sin traumas, es lo que espero.
El impuesto al rico, es factible y lo veo potable. Es mi aporte a CREES, el Centro Regional de Estrategias Económicas Sostenibles, como parte, Anteproyecto de Ley de Reforma Integral al Código Tributario, según el Artículo 36 de la Ley 01-12, sobre el Pacto Fiscal vigente.
Si tengo Activos y a eso resto los pasivos o deudas, tendré un activo neto u Capital, el cual será la base de este nuevo gravamen a la riqueza.
Eso es el caso de 50.000 potenciales contribuyentes en R.D., lo que supone el 0,05 % de la población para matizar. Se trata de «un impuesto altamente progresivo que afecta a quien tiene gran capacidad económica. Si somos 11 millones mal contados, vivos, sin haitianos, la mitad del 1% pagará.
Pero la contracara de esa medida es demostrar en el gobierno mayor
austeridad en el funcionamiento del Estado, una progresivización en la tributación y focalización en lo social, con una reducción del 10 % en los gastos generales de funcionamiento del Estado con el fin de dar al Estado y recibir de el, como esperamos todos.
Ese nuevo impuesto permitirá aumentar la inversión social sin afectar a las clases medias ni a los más pobres en lo absoluto. Hay aproximadamente 1,872 personas naturales y 41.029 negocios, empresas y sociedades que, según la DGII, registran patrimonios líquidos (activos menos deudas) superiores a los 200 millones de pesos, si no estoy equivocado, pues hace tiempo no tengo datos frescos del DGII, ojalá sean más los contribuyentes. Localizarlos es muy fácil.
Aplicar ese impuesto a nuestros nuevos ricos y millonarios es justo, ya que muchos no saben cómo justificar lo que tienen vía testaferros o empresas.
Aquí el rico divide su fortuna en 10 testaferros, estilo Félix, el de San Juan, con familiares o amigos a razón de 20 millones cada uno para evitar el nuevo impuesto, pero no saben que deben registrarse esos 20 nuevos contribuyentes ante el DGII y justificar cómo lograron tener 20 millones de patrimonio neto con sueldos de 30 mil al mes y varios hijos de dependes en dos años.
Al primero de enero de 2015 se deberá ajustar la deducción de vivienda familiar de hasta 6,752.2 millones de pesos en un 10% mas, para fines del IPI, ante el DGII, como valor exento del patrimonio inmobiliario perteneciente a personas físicas; eso permite que sólo el excedente patrimonial y que totalice 200 millones más, podrá estar gravado, para esos pocos millonarios.
Paguemos hoy, millonarios nuevos, la cuota de la paz y prosperidad y no busquemos excusas.
Ser millonario en un país pobre debe costar algo y ese sacrificio lo agradecerán los demás, que ya no pueden pagar más. Nadie nuevo paga, ni declara bienes, esperan otra amnistía fiscal y eso es un relajo.
Abro el debate a esta idea.
