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Un llamado a la paz
El hecho de que este domingo 15 de mayo, tengamos elecciones en tres renglones presidenciales, congresionales, y municipales, genera algunas inquietudes, debido a que se involucran muchos millones de pesos en ellas, y además que representan cargos remunerativos. Estas condiciones, movidas por lo que domina el mundo, el dinero, levantan muchas ilusiones falsas y concretas. De ahí, que nadie quiere perder, y como es obvio, siempre hay algunos movimientos de desconfianzas hacia los demás contrincantes.
Para hacer un llamado a la paz, primero quiero decir, que es importante que el pueblo aprenda a votar sin la influencia externa y sin la compra de su conciencia. He oído decir, que algunos no votarán si no les dan lo de ellos, el dinero. Es verdad, que por lo general, las necesidades llevan a buscar las cosa que no son bien habidas. Pero, mientras no aprendamos a ser honestos con nosotros mismo, es imposible hablar de elecciones limpias. Es el pueblo quien hace las elecciones, y si las mentes están corrompidas en búsqueda de los míos, entonces, es el pueblo el culpable de las inquietudes que generan las elecciones.
Un candidato que gane, cualquier puesto electivo, a base de comprar las conciencias de los votantes, es un electo ilegítimo. Esa es una forma de hacer fraudes, y la pregunta del millón es, ¿Y quién no hace eso en la Rep. Dominicana? Todos sabemos que se compra la conciencia con dineros, con favores, con presión social, con promesas falsas, entre otras. No se debe hacer trampas a los contrarios, si realmente su busca el bienestar de todos. Si el candidato es honesto, quiere ocupar el puesto electivo conforme a si la mayoría está de acuerdo. Estos se refleja en los votos.
Las autoridades que les corresponde administrar, orientar y dirigir las elecciones, deben ser imparciales. El que ganó, ganó; y el que perdió, perdió. La responsabilidad de estos funcionarios, debe ser respaldada por el pueblo consciente. Ellos son los que deben decir quién ganó, y quien perdió. Nadie debe proclamarse ganador antes de que estos funcionarios den el veredicto. Como simples hombres y mujeres, pueden tener sus inclinaciones, pero como hombres y mujeres honorables, las inclinaciones pasan desapercibidas por ellos. Confiemos en nuestras autoridades electorales.
La paz, se obtiene cuando los involucrados directa e indirectamente en el proceso electoral, cumplen con sus roles. La paz no es una simple palabra, es una conducta, que se genera por acciones de los individuos. El mexicano Benito suárez, dijo: «El respeto al derecho ajeno es la paz.» Mientras que las sagradas Escrituras dicen : «No paguéis a nadie mal por mal; procurad lo bueno delante de todos los hombres. Si es posible,en cuanto dependa de vosotros, estad en paz con todos los hombres» Rom. 12:17, 18.
Un llamado a la paz, es un llamado a la tranquilidad interior y personal; si usted no está en paz consigo mismo,es imposible que lo esté con los demás. Después de las elecciones el mundo continuará, si Dios permite. Debe ser parte de la vida social, para contribuir al bienestar de todos y sepa que todo lo que hace debe ser para glorificar a su Dios. Está escrito : «sabiendo que del Señor recibiréis la recompensa de la herencia, porque a Cristo el Señor servís. Mas el que hace injusticia, recibirá la injusticia que hiciere, porque no hay acepción de personas» Col. 3:24, 25.
Es importante que todos los dominicanos y los residentes aquí, podamos ser personas que enarbolemos la paz, como una forma de vida; pues, Dios envió a su Hijo Jesucristo para que sea nuestra paz. Sepamos que el anuncio del evangelio conlleva paz, ya que …» agradó al Padre que en él habitase toda plenitud, y por medio de él reconciliar consigo todas las cosas, así las que están en la tierra como las que está en los cielos, haciendo la paz mediante la sangre de su cruz» Col. 1:19. 20. Estemos en paz con Dios, con el prójimo y consigo mismo. Dios le bendiga.
JPM