Silenciar el silencio

El silencio es ausencia, inexistencia de la palabra, pero a veces es carencia de honor y de principios, sinónimo de sumisión cobardía e impotencia, por igual de humildad, obediencia y respeto

El silencio en forma natural no es mas que una pausa, un momento tan frágil y débil que el simple susurro del viento o el aleteo de una pequeña ave lo quebranta.

No obstante, hay otro tipo de silencio que se origina y se produce en diferentes formas y circunstancias, a veces es prudente y oportuno, pero suele ser, dañino y pernicioso cuando sustituye la palabra de una sociedad y la enmudece poniéndola de rodillas, y la enseña a aplaudir y hasta elegir su miseria.

De hecho, el que ama, en ocasiones guarda silencio, para no hacer sufrir a la persona amada.

El que odia y envidia, por igual guarda silencio para no reconocer méritos ni virtudes de la persona odiada.

Pero también el miedo, el valor, la conveniencia, el oportunismo, el paternalismo, la amistad, la familia, en fin, casi todos los seres humanos, los animales, las aves sacan su tiempo para guardar silencio.

El poder guarda y a veces también impone el silencio, por fuerzas mayores, por prudencia, porque son cosas del Estado, por connivencia, por encubrimiento, por corrupción, etc, etc

Y ante tanta complicidad del silencio,hasta el silencio guarda silencio por temor a que alguien pueda oírlo, y se le ocurra mandar a callar o silenciar el silencio.

Pero de secretos en secretos, se romperá el sacramento de los compadres y en en voz alta hablaran los intereses que por resguardar conveniencias habían estado callados y en las grandes tribunas delatarán los silencios.

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jpm