Qué se dice: Juego perverso
Como era de esperarse desde que se hizo evidente que el conflicto entre el CMD y las autoridades del sector salud se contaminó de politiquería, enfrascándose en un juego perverso en el que ambas partes han apostado fuerte a sus candidatos, las cosas van de mal en peor, y podrían agravarse de aquí a que tengamos, el próximo 10 de noviembre, el nombre del ganador de las elecciones del gremio médico.
Ayer el candidato de la Plancha La Gran Unidad, el doctor Wilson Roa, acusó a la ministra de Salud de utilizar los recursos del Estado para promover las aspiraciones del doctor Clemente Terrero. Se trata, según los denunciantes, de “un plan macabro” que tiene por objetivo desconocer los acuerdos firmados el año pasado. Para el candidato de La Gran Unidad el propósito del gobierno es tomar el control del CMD para maltratar a los médicos, por lo que atribuyó al doctor Terrero la intención de extender de 4 a ocho horas su horario de trabajo.
El conocido infectólogo ha negado, como era previsible, esas acusaciones, que atribuye a que el candidato que representa al actual presidente del CMD, Waldo Ariel Suero, se siente desde ya derrotado, y prometió que a partir del 11 de noviembre introducirá la más grande transformación de la historia del gremio para beneficio de todos los médicos y no solo de un grupo, dice, como ocurre ahora.
Mientras sube el tono de la confrontación y las mutuas acusaciones nos golpea la noticia de que médicos, enfermeras, bioanalistas, odontólogos y farmacéuticos paralizarán los hospitales públicos durante 48 horas desde mañana, en reclamo de que las autoridades cumplan con unos acuerdos que esas mismas autoridades dicen haber cumplido a cabalidad.
¿Cómo se romperá ese círculo vicioso? Eso no lo sabremos mientras ambas partes se empeñen en jugar a la política en el CMD, sacrificando la salud, en ese juego perverso y sádico (sí, sádico), de los pobres infelices de siempre.
JPM
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