Mientras la vida en la nación dominicana transcurría enfrentando aún los remanentes de la pandemia Covid-19 y los efectos del actual conflictos bélicos entre Rusia y Ucrania, como la inflación y otras secuelas colaterales, es pronosticado el huracán Fiona, el cual afectó la región Este del país los días 18 y 19 de septiembre del año que discurre 2022.

Este fenómeno natural, como parte de las distintas variables incontrolables y exógenas que pueden afectar la estabilidad económica y tranquilidad del diario vivir de un país, trajo consigo el desplazamiento de más de 43,540  mil personas, los cuales aún permanecen fuera de sus hogares y más de 17,400 viviendas dañadas.

Unos 300 mil clientes de las distribuidoras de electricidad del Este y del Sur (Edeeste y Edesur), sin servicio de energía eléctrica a causa de los daños en 93 circuitos, por el paso del señalado huracán.

Más de RD$2 mil millones en pérdidas en el sector agrícola y en la ganadería del Este de la nación, conforme cálculos preliminares.

Daños en el sector turístico de unos US$10 millones, el cual actuando raudo  ha podido activarse, en casi 100%, en todos sus servicios.

Se afectaron más de 23 carreteras y dos puentes colapsados. 28 comunidades estuvieron incomunicadas, más de 4,236 casas afectadas y 96 destruidas.

Ante estos daños causados por el señalado huracán, el gobierno dominicano presidido por el nuevo liderazgo del presidente Luis Rodolfo Abinader Corona, dando muestra de efectividad administrativa, se presentó en lo inmediato en las zonas afectadas, viéndose en la necesidad de suspender su viaje a la reunión de la Asamblea General de la ONU, pautada para los días 19, 20 y 21 del presente mes de septiembre del año que discurre, a los fines de conocer todos los daños que dicho fenómeno natural ocasionó y buscar la manera de repararlos.

Inmediatamente, el presidente dispuso la reconstrucción de más de 5,500 viviendas en el Este y 2,800 en el Nordeste del país.

Dispuso también la administración Abinader, facilitarles dinero a los productores, afectados por Fiona. Dispuso la entrega en un primer aporte de RD$99.5 millones.

Se entregaron materiales de construcción a más de mil personas en Hato Mayor, se entregaron más de 20,000 planchas de zinc y su respectiva madera.

Se entregaron más de cien mil raciones de comida, mediante los comedores económicos.

El presidente Luis Abinader Corona, emitió el decreto Núm. 537-22 de fecha 19 de septiembre de 2022, a los fines de que 21 instituciones puedan realizar compras y contrataciones por la vía rápida, durante 30 días con sus respectivos reportes, sin necesidad de cumplir con todos los requisitos que dispone la ley Núm. 340-06, a favor de 8 comunidades afectadas por el huracán Fiona.

El sector privado así como algunas instituciones nacionales e internacionales, no se hicieron esperar, pues en un ambiente de mucha confianza hacia el gobierno dominicano y su presidente Luis Abinader Corona, comunicaron públicamente una serie de donaciones, tanto en naturaleza como en efectivo.

Ejemplo de ello, el Consejo Nacional de Seguridad Social (CNSS) asignó un aporte extraordinario de RD$100 millones, el Banco de Reservas de la República Dominicana, donará la suma de RD$100 millones, el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE) aportará US$500 mil, el empresario Juan Bautista Vicini donará RD$50 millones.

El Banco Central de la República Dominicana donará RD$2 millones, la Sociedad Industrial la Manisera unos RD$50 millones, entre otras instituciones y personas.

También, los colaboradores o empleados de muchas instituciones gubernamentales, a título personal, han donado: ropa, zapatos, comida enlatada, entre otros artículos.

Todos los aprestos, que hasta ahora ha llevado a cabo el gobierno dominicano a favor de los damnificados del huracán Fiona, se han podido llevar a efecto en tiempo real, gracias a la buena disciplina  de las finanzas públicas que imprime el gobierno dominicano a las recaudaciones tributarias y arancelarias, donaciones privadas, organismos nacionales e internacionales y captaciones de dinero del mismo sector público.

Por primera vez, en la historia dominicana, un gobierno ha concitado tanta confianza en la gestión  del erario, y ser la única administración del Estado dominicano que haya actuado tan rápido en el socorro de los damnificados de un fenómeno natural.

Sin lugar a dudas, el gobierno del presidente Luis Abinader Corona, ha roto todos los parámetros en ir en auxilio de la población antes, durante y después de un fenómeno natural o en la situación que fuese tal el caso de los mineros atrapados que sin escatimar esfuerzos trajo al país los equipos más sofisticados para el rescate de los mismos.

También, el actual gobierno dominicano inspira además de confianza, seguridad y honestidad administrativa, económica y financiera, humildad,  trabajo tesonero, entrega total a favor de la población más vulnerable, pulcritud, transparencia, ética y moral de parte del señor presidente.

Es admirable que en tan solo dos años y un mes de gobierno, la percepción y la confianza de los dominicanos haya cambiado con respecto a las autoridades que les gobiernan, y eso lo ha logrado el ciudadano presidente de la República Dominicana, Luis Rodolfo Abinader Corona en tan breve tiempo.

Hoy, el pueblo dominicano cree en su presidente, en la justicia y en la buena administración de los recursos públicos. Su pesadilla ha pasado gracias a Dios, Todopoderoso, para tranquilidad y bienestar de todos los dominicanos, que le implora nunca volver a los pasados esquemas de abusos y prácticas malsanas.

felix.felixsantana.santanagarc@gmail.com

JPM

BONAO.- El parque industrial Caracol, de aquí, arribó al  34 aniversario de su creación, con la esperanza de que las autoridades de turno cumplan su promesa de relanzarla.

Inaugurado el 25 de septiembre de 1988, fue una importante iniciativa del entonces senador Salvador Gómez Gil, del Partido Reformista Social Cristiano.  Desde su apertura albergó importantes empresas nacionales y del exterior, con el respaldo del presidente Joaquín Balaguer.

Este parque industrial provocó un notable crecimiento económico local y provincial al abrir sus puertas a miles de hombres y mujeres de municipios, distritos municipales, barrios y comunidades.

Las labores productivas redujeron al mínimo las acciones delictivas y mejoraron sustancialmente la calidad de vida de la población.

Pero, al paso de los años muchas empresas han optado por marcharse, lo que ha reducido el flujo de empleados y la estabilidad económica local.

La falta de oportunidades para jóvenes y mujeres ha creado un penoso y preocupante escenario, que ha originado un incremento de los hechos delictivos en toda la sociedad local.

El desmejoramiento de sus operaciones ha llamado poderosamente la atención de dirigentes comunitarios, políticos y hasta religiosos, quienes desde hace más de un lustro claman por su relanzamiento.

Todo se ha resumido en promesas y ofrecimientos incumplidos hasta la fecha, tanto de las autoridades pasadas, como de las actuales.

sp-am