Miranda, Bayaguana y el PLD
Desde el Campamento Loma Miranda, empeñado en cosas mayores, no me anima el interés de joderle la vida a destacados personeros de la dictadura morada, situados a millones de leguas del legado ético y político del profesor Bosch, quien esta semana cumplió 105 años de haber nacido y décadas de una valiosa gravitación política en nuestra patria, en nuestra América y el mundo. Sì me anima el deber de sacar a la superficie realidades ocultas tras dos acontecimientos colindantes con este aniversario hipócritamente conmemorado por la cúpula del PLD: la obstrucción en el Congreso Nacional del proyecto de ley Loma Miranda-Parque Nacional y la acusación al Alcalde peledeìta de Bayaguana de auspiciar el asesinado de un regidor de su propio partido. Los 400 millones que se dice se repartió en la Cámara Baja pudieron influir en esa obstrucción congresual, pero no de manera determinante. Tal resultado no hubiera sido posible sin el acuerdo previo entre Danilo y Leonel, que facilitó una directriz política desde la CP del PLD y el despacho presidencial, capaz de compactar el voto peledeìsta contra el proyecto senatorial. El designio de un poder transnacional encabezado por EEUU, Canadá y sus corporaciones mineras -reforzado por la visita de Mr. Biden (vice de Obama)- fue acatado por estos dos neo-caudillos morados, ajenos desde hace años al legado de Bosch, quien denunció el contrato con la Esso Standar Oil y propugnó por la nacionalización de la Gulf and Western y otras corporaciones. Ambos convertidos en instrumento del saqueo, de la minería destructiva y de la alta corrupción que ha facilitado la pérdida de soberanía en tan trascendente capítulo. El Alcalde de Bayaguana, Nelson Sosa, un día antes del aniversario de Bosch, fue acusado de financiar dos empleados de su “industria” que actuaron como sicarios en el asesinato del regidor Jesús Castillo, a quien le atribuyen un cierto apego a la moral boschista. El caso ilustra cómo la podredumbre en las alturas del PLD se va corriendo hacia niveles intermedios. Hecho muy grave, pero no tan grave como las recién pasadas conexiones en las alturas estatales con todo tipo de delincuencia: cárteles de la construcción, narcogenerales, delincuencia policial, mafia de los combustibles, empresarios estafadores, fantasmas mediáticos, corporaciones mineras . Todo esto protegido por el gobierno, que recientemente aceptó en sus filas reeleccionistas a la peor mugre del periodismo del país, y cuyo flamante mandatario nos llama a no “tirar piedras hacia tras” para que no le caigan a la mafia morada, muy presente en su gabinete y en el tren oficial. Cosas veredes Profesor . ¡Cuántas ofensas a tu memoria!