La interminable tragedia haitiana (OPINION)
El desgraciado pueblo haitiano se debate hoy entre la vida y la muerte, agoniza en las mismas pérfidas entrañas que le dieron origen, estas barnizadas y retorcidas por lo oscuro, por el odio, por la ingratitud, el desamor y lo satánico. De ahí radica y deviene su eterna maldición, pobreza física y espiritual, y su indetenible caos, violencia y perturbación.
Nada ha funcionado ni funciona bien en Haití, ni la familia, ni el gobierno, ni la educación, ni la salud, ni la producción, ni las ONGs, sólo el odio y el desorden colectivo, los que aliados a los pandilleros criminales trazan las pautas y la cotidianidad haitiana, infectados por ese cáncer maldito y metastásico, que lo conduce a la muerte total.
La historia haitiana, desde su nacimiento hace más de 200 años, ha sido dolorosa y despreciable, como la de una criatura deformada y monstruosa, qué se retuerce en su feto, se agita ahí, arañando las entrañas bondadosas de su madre, hiriéndola de muerte para salir a la vida a hacer el mal, casi siempre despreciar lo bueno, lo justo y lo cristianamente humano. Claro está, con algunas excepciones.
Esa desgarradora realidad haitiana, se acrecienta en estos días, con el exilio forzoso de su primer ministro, Ariel Henry, a quien, como impostor y ave descarriada, se le ha negado hospitalidad o el ingreso a su propio país, y aquí, en República Dominicana, destinos que intentó aterrizar, tras culminar su periplo de mendicidad solidaria, por Kenia, Guyana y la ONU. Finalmente, Puerto Rico lo acogió por orden de Washington.
Y qué bien, qué alta dignidad, respeto y patriotismo demostró el presidente Luis Abinader al ordenar la prohibición de entrada al país de ese inepto y malagradecido político haitiano que, con marcado cinismo e inmensa hipocresía, nos desprecia y nos apuñala desde el poder que ejercía en Haití, pero también desde su venenosa y podrida conciencia interior.
Nuestro presidente Abinader se puso a tono con la conciencia colectiva de nuestro país, la mayoritaria y más pura, honorable y patriótica, la que no atiza el desorden y la tragedia haitiana para obtener beneficios materiales y políticos, como siempre lo han hecho y propiciado algunas potencias extranjeras, que se nutren, se benefician del caos, de la pobreza y hasta de la muerte de naciones empobrecidas, física, cultural y espiritualmente. Es por esa razón primordial y otras más, que Haití no sale de un gran tollo, de un inmenso caos, de su absoluto atraso.
Solo hay que discernir que Haití lleva 3 años sumido en el caos total, y las grandes potencias globales, junto a la anémica e inservible Naciones Unidas, no encuentran y no han querido descubrir la fórmula para ayudarlo, para estabilizarlo, para asegurarle paz y orden, pero sí encontraron y fabricaron cientos de miles de millones de dólares para Ucrania y su guerra interminable contra la Rusia del déspota Vladimir Putin. Ahí está el detalle, Haití no es Ucrania ni República Dominicana Europa.
Por lo que a nosotros respecta, jamás debemos acoger aquí a ningún líder político o militar haitiano fugitivo o rechazado por su pueblo, como se hizo en otras ocasiones menos tormentosas y riesgosas. A ellos, que los reciban los mismos que han ordeñado las tetas haitianas para amamantar su ego elitista y su democracia egoísta y excluyente.
Que resuelvan ellos, los poderosos, el grave problema haitiano y nos dejen a nosotros vivir en paz y lidiar con los nuestros, porque los dominicanos no podemos degollarnos para salvar a Haití, y eso lo sabe muy bien mi presidente Luis Abinader, y lo está poniendo en práctica, sin miedos y sin dobleces. Punto.
jpm-am
sr, perez. a pesar de todo el racismo y el odio que usted vomita, haiti fue, mucho antes que rd. existiera, quien libero la isla. haiti es el segundo socio económico de rd. perez, recuerde lo que produjo el cierre de la frontera para los productores de rd.
desde el primer intento de transformar a haití en un estado democrático la violencia ha cido su norte el pueblo haitiano está acostumbrado a su dictadura los forzaron sin ante preparar la transición si nombran a gui filipe cómo presidente vuelve la calma porque implantaría lo que a ellos le gusta macana y macana