El visionario que vio más allá del horizonte

El autor es licenciado en Economía y Contabilidad. Reside en Santo Domingo

Por REDACCION
Fecha: 30/07/2025
Comparte:

POR RAFAEL RAMIREZ

A inicios de la década de 1970, pocos veían en la costa Este dominicana otra cosa que naturaleza agreste, sin caminos ni servicios básicos. Pero Frnak Rainieri imaginó un paraíso turístico.

Con apenas 23 años, fundó junto a Theodore Kheel la empresa Grupo Puntacana, apostando a lo que parecía un Imposible: desarrollar un destino sin agua potable, sin energía eléctrica, sin aeropuerto, sin acceso vial.

Apostó todo a una idea que cambió la historia del turismo dominicano. Hoy, Punta Cana es la principal puerta de entrada del turismo en el país, con un aeropuerto internacional que recibe más de 8 millones de pasajeros al año, más de 40,000 habitaciones hoteleras, múltiples campos de golf de clase mundial, zonas residenciales exclusivas, servicios médicos privados, centros comerciales, oferta educativa bilingüe y una población laboral directa e indirecta que supera los 100,000 empleos.

Rainieri no solo construyó infraestructuras. Construyó una filosofía. Fue uno de los primeros empresarios del Caribe en integrar la sostenibilidad como eje transversal del desarrollo turístico.

Grupo Puntacana ha sido reconocido internacionalmente por su compromiso con el medioambiente, desde programas de conservación de especies marinas y protección de arrecifes, hasta proyectos de reforestación, manejo de residuos sólidos y generación de energía limpia.

Un modelo

Su Fundación Puntacana ha sido un modelo de responsabilidad social corporativa, liderando iniciativas en educación, salud comunitaria, vivienda y apoyo a microempresas en comunidades vulnerables.

Además, el Sr. Rainieri ha sido un maestro en la conformación de alianzas estratégicas. Supo atraer inversionistas globales, forjar acuerdos con aerolíneas internacionales, y asociarse con cadenas hoteleras de renombre mundial.

La diversificación de sus inversiones ha convertido el ecosistema Punta Cana en un ejemplo de integración, turismo, bienes raíces, servicios, energía, educación, tecnología y medioambiente bajo una misma visión.

Frank Rainieri ha sido un impulsor del desarrollo local, generador de divisas, embajador de la marca país y un referente para empresarios y líderes políticos. Su legado económico no se limita al Este del país.

El modelo de desarrollo Punta Cana ha servido como inspiración para otros polos turísticos como Miches, Pedernales y Samaná. Rainieri ha estado siempre presente en las conversaciones clave del desarrollo nacional.

Junto a su esposa Haydée Kuret ha forjado un hogar que también es parte integral de su legado empresarial y humano. Su vida es ejemplo de equilibrio entre el desarrollo económico y el compromiso social.

No es raro encontrarlo caminando entre empleados, participando en eventos comunitarios o hablando con estudiantes sobre el futuro del país.

Frank Rainieri representa una rara combinación de soñador y ejecutor. Su historia nos recuerda que el desarrollo verdadero se logra cuando la visión se une a la acción, cuando la rentabilidad se equilibra con el compromiso social, y cuando el liderazgo se basa en valores.

Hoy, más de cinco décadas después de haber iniciado su travesía, Rainieri no solo ha construido una empresa exitosa, sino una comunidad.

Su legado seguirá siendo fuente de inspiración para las nuevas generaciones de dominicanos que sueñan con transformar su país con dignidad, responsabilidad y esperanza y termino diciendo una frase de él, “sin prisa, pero sin pausa”.

jpm-am

Compártelo en tus redes:

ALMOMENTO.NET publica los artículos de opinión sin hacerles correcciones de redacción. Se reserva el derecho de rechazar los que estén mal redactados, con errores de sintaxis o faltas ortográficas.