El nuevo partido de la “M”

¿De dónde salió el nombre? Confieso que no lo sé. Sin embargo, imagino que tiene relación con el novedoso partido de la “U” de Colombia. Aunque no alcanzo a adivinar a quien corresponderá ese honor de llevar la inicial de su nombre o apellido en una nueva fuerza política. Porque está claro que el Partido de la “U” existe para honrar al ex presidente colombiano Álvaro Uribe Vélez y es un desprendimiento del Partido Liberal Colombiano. El Partido de la “M” dominicano parece que es un desprendimiento del Partido Revolucionario Dominicano, aunque se advierte en su composición la presencia de otras corrientes políticas, de corte no precisamente liberal, como se supone es el PRD. Sus dirigentes, hasta el momento mismo de mudarse, le imprimieron un carácter profundamente recalcitrante a la organización que les sirvió de cubil a partir de 1998. Y digo a partir de 1998, porque aun y cuando militaron desde 1961 en su seno, es con la muerte de Peña Gómez, cuando empiezan a despuntar esos nuevos liderazgos, que terminaron convirtiendo una buena parte del partido de la esperanza nacional en la cuna del Partido de la M. Por un momento pensé que la M era por doña Milagros Ortiz, pero luego advertí que no podía ser, que la M debe ser por el mentor principal o por quien apoye económicamente la nueva fuerza, como lo hace Uribe en Colombia; y es evidente que la primera dama de la política dominicana no es ni una cosa ni la otra. Y pensé y repensé y no pude llegar a conclusión alguna. Lo que si tengo muy claro es que si la JCE no les va a dar un centavo -por ahora- a los nuevos partidarios, hay que seguir pensando en ¿de dónde saldrán las municiones para abastecer ese ejército de dirigentes, tan acostumbrados a guerrear a las sombras del presupuesto nacional? Como no entendía, pregunté a algunos amigos, de esos que tienen buena imaginación y que si no saben una repuesta -algo muy inusual- se la inventan. Pero fracasé de entrada, a nadie se le ocurre de dónde diablos sale la dichosa M del Partido de la M. Freddy Díaz, mi diccionario popular favorito me dijo con autoridad: “Jabalí olvídate de lo que estas pensando, la M no viene de Mayoritario, porque ¿cómo puede ser mayoritario algo que ni siquiera ha nacido? Y a seguidas afirmó: “puede que sea por mentirosos, porque eso sí es seguro que son los jefes del nuevo grupo” Mas luego le pregunté a Arismendi mi camarada de toda una vida y me dij “La M les viene porque son un partido de muertos; chequea la edad de las principales figuras y verás que están “a cuarta de la lápida”. Esto lo consideré poco elegante por parte de mi compadre y lo reprendí, por el irrespeto; pero aun así sostuvo, con ese aire de perdonavidas que caracteriza a los amigos de siempre: “compadre, usted sabe que aunque no luce bien decirlo, es la pura verdad”. Y me puse a pensar que en ocasiones, mi compadre la ve bien clara, aunque no haya bebido nada. Otro amigo, más agudo e irreverente aun me dij “la M les viene porque son mensos; y usted sabe lo que es vivir en un país donde el 70% de los votantes son jóvenes, y hacer un partido nuevo y los primeros dos nombramientos suman casi 200 años de edad; en una provincia como el Distrito Nacional, que es la segunda plaza electoral; ¿a quién le van a ganar? No hay dudas, son mensos y por eso es lo de Partido de la M”. De ahí en adelante no quise seguir preguntando, porque cada vez se hacía más evidente que mis averiguaciones no conducían a un final feliz o cuando menos, que fuera publicable. Ya con el sesgo que le imprimen estos amigos míos, tengo que aventurarme a dar una explicación, que cuando menos pueda parecer posible. Pienso que lo de Partido de la M, tiene que ver con Malicia o Mala Fe; que son dos sentimientos afines que están muy presentes en la memoria de los ex perredeistas. Y no creo que cometa desliz alguno al conectar a los principales dirigentes de la denominada “Divergencia” con estas dos “virtudes”, tan propias de los humanos pobres de espíritu. Los hechos me autorizan el juicio. Malicia y Mala Fe, es lo que muestran los jefes de la nueva aventura política, que al abandonar el barco, quieren asegurarse de que éste se hunda hasta el fondo. Así se advierte que más que crear una nueva organización, los disidentes procuran destruir el más antiguo instrumento de lucha de los dominicanos. Y ya con estos conceptos aclarados, vale plantearse: ¿Quiénes son los verdaderos traidores dentro del PRD? Pero por suerte, la vida es una secuencia de hechos tan armoniosa, que las enfermedades más virulentas, traen consigo las medicinas que las habrían de combatir. Mientras hay un grupo de liquidadores que busca enterrar al PRD, existe otro que trabaja para su preservación y que ya ha ganado la confrontación, en todos los escenarios en que se ha realizado. Adecuándonos a los tiempos presentes, podemos decir que “el PRD tiene la vacuna para su propia chicungunya”. Finalmente, y ya tratando de cerrar el tema éste del Partido de la M, debo confesar que a pesar de la opinión de mis dilectos amigos, y de la mía propia, el pueblo trabajador seguirá creyendo que el nuevo Partido de la M, es y será exactamente es un partido de la m…… Pero, yo no pretendo tener absolutamente la razón, ni tampoco denostar a los miles de perredeistas que se arriesgarán en esa travesía incierta, gracias a los dislates de sus dirigentes; pero no puedo dejar pasar la oportunidad de recordarles, que nunca ha sido beneficioso dejar el camino real por la vereda. ¡Vivimos, seguiremos disparando!

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